Metronidazol para gatos: usos, dosis y efectos secundarios

Compartir Email Pinterest Linkedin Twitter Facebook

Característica del metronidazol para gatos

El metronidazol, conocido también por su nombre comercial Flagyl, es un medicamento con acción antibiótica y antiparasitaria que se utiliza mucho en medicina veterinaria. Aquí descubrirás cómo actúa, en qué casos se receta con mayor frecuencia, cuáles efectos secundarios debes vigilar y algunas preguntas comunes sobre su uso.

Descripción general del metronidazol para gatos

Tipo de medicamento:
Antibiótico, antiprotozoario
Forma:
Cápsula, Tableta, Líquido
¿Se requiere receta médica?:
¿Aprobado por la FDA?:
No
Nombres de marca:
Flagyl, Flagyl ER, Flagyl IV RTU, Metizol, Protostat, Metrogel
Nombres comunes:
Metronidazol

Acerca del metronidazol para gatos

Gato tumbado sobre una baldosa para mantenerse fresco

El metronidazol es un agente antibacterial y antiprotozoario.

Como antibiótico, actúa principalmente contra un grupo específico de bacterias llamadas anaerobias, que requieren poco o nada de oxígeno para sobrevivir. Entre ellas, el género Clostridium es un habitante común del tracto digestivo.

Su eficacia depende de la concentración, es decir, elimina bacterias solo si alcanza ciertos niveles dentro del organismo. Aunque no se conoce completamente su mecanismo, se cree que interfiere en la síntesis del ADN de las bacterias susceptibles.

Además, el metronidazol es un medicamento antiprotozoario. Los protozoos son organismos unicelulares microscópicos; por ejemplo, una ameba. Muchos protozoos son parásitos, y en gatos son comunes especies como Giardia y Tritrichomonas foetus. Su acción contra estos parásitos no está del todo clara, pero su uso está bien respaldado en tratamientos.

Por otro lado, aunque no está completamente definido ni documentado, se piensa que el metronidazol influye en la inmunidad mediada por células, un tipo de respuesta inmune relacionada con la inflamación. Este efecto explicaría su uso complementario en enfermedades inflamatorias intestinales, como la enfermedad inflamatoria intestinal.

¿Qué hace el metronidazol en los gatos?

Cómo se utiliza el metronidazol

El metronidazol se utiliza para tratar infecciones bacterianas y protozoarias, además de la encefalopatía hepática.

En medicina veterinaria, el metronidazol es más conocido como un medicamento para tratar la diarrea y siempre se emplea de manera extraetiqueta en las mascotas.

Aunque su utilidad para controlar episodios de diarrea en animales es innegable, su mecanismo de acción aún no está completamente claro.

Una de las teorías más aceptadas es que el metronidazol actúa sobre el sobrecrecimiento bacteriano en el intestino delgado.

El tracto intestinal alberga una gran variedad de microorganismos, incluyendo bacterias, que mantienen un equilibrio delicado. Cuando una población bacteriana, como Clostridium, crece en exceso, puede provocar diarrea. Este desequilibrio puede ser consecuencia de otra afección gastrointestinal o la causa principal del problema.

En este contexto, se cree que el metronidazol elimina el exceso de bacterias anaerobias, como Clostridium, que generan infecciones o contribuyen a los síntomas. Estas bacterias producen enterotoxinas que pueden causar episodios intermitentes de heces blandas o diarrea.

Otra posible explicación para la eficacia del metronidazol en la diarrea es su efecto antiinflamatorio relacionado con la inmunidad mediada por células, aunque este mecanismo no está bien definido. Este efecto podría ayudar a reducir la inflamación intestinal presente.

Aunque se usa con frecuencia de forma empírica para tratar la diarrea —es decir, sin conocer siempre la causa exacta— el tratamiento es más efectivo cuando se identifica el origen del problema.

Por eso, es común enviar muestras fecales, incluso de gatos que viven en interiores, para descartar causas parasitarias comunes.

Uno de estos parásitos es el protozoo Giardia. El metronidazol puede emplearse para tratar infecciones por Giardia en gatos, aunque no suele ser la primera opción. Generalmente se combina con fenbendazol, que es el tratamiento preferido, para reducir los signos clínicos y la eliminación del parásito.

Otro protozoo, Tritrichomonas foetus, puede causar diarrea persistente, especialmente en gatitos menores de un año. Aunque ronidazol es el tratamiento ideal, no siempre está disponible en las clínicas, por lo que en muchos casos se comienza con metronidazol.

Como se mencionó, el metronidazol puede usarse como terapia complementaria en enfermedades inflamatorias intestinales, debido a su posible efecto sobre la inmunidad celular. Dado que estas condiciones requieren tratamientos prolongados, el uso extendido del medicamento aumenta el riesgo de efectos secundarios.

Finalmente, el metronidazol no solo sirve para infecciones del tracto gastrointestinal. Las bacterias anaerobias también pueden provocar infecciones en otras partes del cuerpo. En casos graves, puede administrarse una forma inyectable del fármaco.

Efectos secundarios del metronidazol para gatos

Efectos secundarios del metronidazol en gatos

El metronidazol puede causar varios efectos secundarios en los gatos. Debido a su sabor amargo, la salivación excesiva es el efecto más frecuente. Otros efectos adversos pueden presentarse, pero son poco comunes.

Los gatos suelen tolerar muy bien el metronidazol, siempre que la dosis sea la adecuada.

Los efectos secundarios más comunes son el vómito y la falta de apetito, que suelen presentarse con mayor frecuencia debido al sabor amargo de la tableta genérica. Si notas estos signos, enmascarar el sabor o usar una fórmula compuesta en tableta con sabor o en líquido puede ayudar a evitarlo.

En dosis altas o cuando se administra por períodos prolongados, puede aparecer toxicidad que afecta el hígado y provoca síntomas neurológicos. Esto rara vez ocurre en tratamientos cortos, como en casos de diarrea sencilla, Giardia o Tritrichomonas, pero el riesgo aumenta en tratamientos crónicos, como en enfermedades inflamatorias intestinales.

Dosis de metronidazol para gatos

Imagen destacada de un gato que respira con dificultad

La dosis de metronidazol en gatos varía según el motivo del tratamiento. Para diarrea general, suele ser de 5 a 10 mg/kg, pero para infecciones por Giardia o Tritrichomonas foetus, las dosis son considerablemente más altas.

Por eso, es fundamental administrar el metronidazol únicamente bajo indicación veterinaria.

En gatos pequeños, especialmente gatitos, las tabletas comerciales pueden ser demasiado grandes para una dosificación segura o práctica. En estos casos, tu veterinario puede solicitar tabletas de dosis muy bajas a una farmacia especializada en formulaciones personalizadas.

Existen dos opciones en forma líquida. Una de ellas es Ayradia, un metronidazol líquido aprobado por la FDA para perros. Aunque no está aprobado para gatos, algunos veterinarios lo usan de manera extraetiqueta, sobre todo en gatos pequeños. Con una concentración de 125 mg/ml, permite administrar volúmenes muy pequeños. Tiene sabor a pollo, pero no todos los gatos lo aceptan.

También se puede preparar metronidazol líquido en farmacias compuestas, lo que permite ajustar el volumen y sabor para que se adapte mejor a tu gato.

Conclusión

El metronidazol es un medicamento muy común en medicina veterinaria. Gracias a sus propiedades antibacterianas y antiprotozoarias, se utiliza frecuentemente para tratar distintas causas de diarrea en gatos, aunque también puede emplearse para otras infecciones.

Los efectos secundarios pueden presentarse, pero suelen ocurrir más con dosis elevadas o tratamientos prolongados. Como con cualquier antibiótico, es fundamental completar el tratamiento tal como lo indique tu veterinario y nunca administrarlo sin consultarlo previamente.

Aviso sobre dosis de medicamentos: Solo proporcionamos dosis de medicamentos aprobados por la FDA para uso en gatos, y siempre siguiendo las indicaciones del prospecto. Para medicamentos usados fuera de etiqueta, solo ofrecemos pautas y datos sobre seguridad. La dosificación segura y adecuada en estos casos debe ser determinada por un veterinario de atención primaria.

Te recomendamos trabajar de la mano con tu veterinario para evaluar si un medicamento es adecuado para tu gato. Cambiar o ajustar una dosis por cuenta propia implica riesgos. Tampoco recomendamos usar medicamentos destinados a humanos en mascotas sin antes consultar a un veterinario.

Avatar photo

Dr. Pete Wedderburn, DVM

El Dr. Pete Wedderburn se graduó como veterinario en Edimburgo en 1985 y ha dirigido su propio consultorio de cuatro veterinarios con animales de compañía en el condado de Wicklow, Irlanda, desde 1991. Pete es muy conocido como un veterinario de los medios con apariciones regulares en la televisión, la radio y los periódicos nacionales, incluidos una columna semanal en el Daily Telegraph desde 2007. Pete es conocido como "Pete el veterinario" en sus ocupadas páginas de Facebook, Instagram y Twitter, y publica periódicamente información sobre temas de actualidad y casos de la vida real de su clínica. También escribe un blog habitual en www.petethevet.com. Su último libro: “Pet Subjects”, fue publicado por Aurum Press en 2017.