Clavamox para gatos: descripción general, dosis y efectos secundarios

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Imagen que muestra el medicamento Clavamox para gatos.

Clavamox es un antibiótico de uso frecuente para tratar distintas infecciones bacterianas en gatos y perros. Se trata del nombre comercial de la combinación amoxicilina con ácido clavulánico (también conocido como amoxicilina/clavulanato de potasio).

Descripción general de Clavamox para gatos

Tipo de medicamento:
Antibiótico
Forma:
Tableta, Líquida
¿Se requiere receta médica?:
¿Aprobado por la FDA?:
Etapa de la vida:
Todas las etapas de la vida
Nombres de marca:
Clavamox
Nombres comunes:
Amoxicilina/Ácido clavulánico, Amoxicilina/Clavulanato de potasio
Dosis disponibles:
Comprimidos: 62.5 mg; equivalente a 50 mg de actividad de amoxicilina, 12.5 mg de ácido clavulánico como sal de potasio.
Rango de vencimiento:
10 días (líquido)

En este artículo descubrirás qué es Clavamox, cómo actúa y otros datos útiles sobre su dosificación y seguridad.

¿Qué es Clavamox?

Imagen que ilustra una infección de oído en gatos.

Clavamox es un antibiótico del grupo de las penicilinas potenciadas. Gracias a la incorporación de ácido clavulánico, su acción se amplía en comparación con la amoxicilina sola y puede bloquear una enzima llamada beta-lactamasa, que algunas bacterias producen para resistir ciertos tratamientos.

Suele recetarse para tratar infecciones en las vías urinarias, problemas en la piel e infecciones en tejidos blandos, como mordeduras.

También es común que los veterinarios lo utilicen para infecciones respiratorias altas. Dado que existen muchos tipos de antibióticos, será el profesional quien elija el más adecuado para cada caso.

¿Qué hace Clavamox en los gatos?

Imagen que muestra a un veterinario discutiendo la prescripción de Clavamox para un gato.

Clavamox elimina las bacterias responsables de infecciones respiratorias altas, problemas en las vías urinarias y afecciones en tejidos blandos relacionadas con mordeduras u otras lesiones.

Como antibiótico bactericida, Clavamox actúa eliminando las bacterias sensibles a su fórmula. En gatos, se utiliza principalmente para infecciones respiratorias altas, problemas urinarios e infecciones en tejidos blandos provocadas por mordeduras o lesiones.

Su acción se basa en unirse a ciertas enzimas presentes en la membrana celular de las bacterias, lo que interfiere con la formación de la pared celular. Esto las vuelve inestables y conduce a su destrucción.

Es fundamental tener en cuenta que Clavamox no sirve para tratar infecciones virales, una causa frecuente de problemas respiratorios en gatos. Por eso, siempre debe ser el veterinario quien determine si el uso de un antibiótico es necesario.

Efectos secundarios de Clavamox para gatos

"Imagen que ilustra las posibles causas de la infección por el virus de inmunodeficiencia felina (VIF).

Por suerte, los efectos secundarios de Clavamox en gatos suelen ser leves y desaparecen por sí solos. Lo más habitual es que aparezcan molestias digestivas, como pérdida de apetito, vómito o diarrea.

Al tratarse de un antibiótico de amplio espectro, Clavamox también puede alterar las bacterias buenas del intestino, lo que suele explicar la diarrea cuando se presenta.

Administrarlo junto con la comida suele reducir las molestias estomacales. Si aun así aparecen, suspender el tratamiento puede ayudar a que desaparezcan los síntomas, pero no debes hacerlo sin antes hablar con tu veterinario, sobre todo si estás tratando una infección.

Si se presenta diarrea leve, el uso de probióticos, siempre bajo la indicación del veterinario, puede ser útil. En otros casos, puede ser necesario tolerar estos efectos secundarios mientras se combate una infección más grave.

Ahora bien, si tu gato deja de comer, debes avisar de inmediato a tu veterinario, ya que la falta de apetito prolongada puede derivar en un problema hepático serio.

Aunque es extremadamente poco común, pueden presentarse reacciones alérgicas como ronchas, erupciones, fiebre y alteraciones en los glóbulos rojos y blancos.

En los gatos que desarrollan este tipo de reacción, cualquier dosis puede desencadenarla, sin importar la cantidad. Es decir, si tu gato tolera bien la dosis indicada y por error recibe una extra, no hay mayor riesgo de que ocurra una reacción alérgica.

Dosis de Clavamox para gatos

Imagen que captura a un gato en el acto de estornudar.

La dosis publicada para gatos es de 62.5 mg cada 12 horas. Aun así, esta cantidad puede variar según el tipo de infección que se esté tratando, así como el tamaño o peso corporal del gato.

Gatitos muy pequeños o gatos con sobrepeso pueden necesitar una dosis diferente, siempre bajo criterio del veterinario.

Formas de dosificación de Clavamox para gatos

Imagen que muestra una forma de medicamento Clavamox para gatos.

Existen dos presentaciones de Clavamox para gatos: suspensión líquida oral o tabletas. Tú o tu veterinario elegirán la más adecuada según las necesidades de tu gato.

Clavamox está disponible en dos presentaciones: suspensión líquida oral y tabletas. Tu veterinario puede tener una preferencia, o bien dejarte elegir según cuál sea más fácil de administrar.

Si tu gato acepta una pastilla mezclada o escondida en su comida o en un premio, esa suele ser la opción más sencilla y menos estresante.

Pero si es de los que se comen todo menos la pastilla y la dejan al fondo del plato, quizá debas optar por la versión líquida, especialmente si no tienes experiencia dando medicamentos directamente en la boca.

Las tabletas vienen en versiones masticables y no masticables. Algunos gatos aceptan las masticables como si fueran un premio o camufladas en la comida, lo que facilita mucho el proceso.

Aun así, dado que muchos gatos son exigentes con lo que comen, puede que tengas que dársela directamente o cambiar a la versión líquida.

Las tabletas suelen venir en blísters sellados, ya que el ácido clavulánico es sensible a la humedad. Por eso es importante no abrir el blíster hasta el momento exacto en que vayas a dar la dosis. Además, no se recomienda partir las tabletas, ya que la mitad restante quedaría expuesta por horas.

La versión líquida debe mantenerse en refrigeración. Generalmente, se reconstituye con agua en el consultorio veterinario cuando te la entregan. Si recibes dos frascos, deben darte instrucciones para preparar el segundo. También puedes encontrarlas impresas en el lateral de la caja.

Como la fórmula líquida debe desecharse después de 10 días, no conviene mezclar el segundo frasco hasta que realmente lo necesites.

Si un frasco ya preparado ha estado fuera del refrigerador, lo más prudente es consultar con tu veterinario antes de desecharlo, ya que su estabilidad puede verse comprometida tras varias horas a temperatura ambiente.

¿Clavamox o Augmentin?

Clavamox para gatos

Algunos medicamentos destinados a humanos contienen el mismo antibiótico que se encuentra en Clavamox, pero la dosis de Augmentin es diferente.

Los medicamentos genéricos son una opción popular y a veces más económica que muchos dueños de mascotas consideran. La combinación amoxicilina/ácido clavulánico también se comercializa para humanos bajo la marca Augmentin.

Aunque contienen los mismos antibióticos, es crucial entender que las presentaciones y dosificaciones de Augmentin y Clavamox son muy diferentes, lo que puede generar confusión.

Las fórmulas veterinarias como Clavamox indican la dosis sumando ambos componentes, amoxicilina y clavulánico, mientras que en Augmentin y otros genéricos para humanos, la dosis suele expresarse solo en función de la amoxicilina. Por eso, 125 mg de Augmentin no equivale a 125 mg de Clavamox.

En gatos, las tabletas de Augmentin suelen ser poco prácticas, ya que la dosis más baja disponible es el doble de la recomendada para la mayoría de ellos (no existen tabletas de 62.5 mg de Augmentin). Por estas razones, tu veterinario probablemente prefiera recetar una presentación veterinaria como Clavamox para tu felino.

Reflexiones finales sobre Clavamox

Síntomas de infección de las vías respiratorias superiores en gatos

Clavamox es uno de los antibióticos más efectivos y de uso más frecuente en medicina veterinaria, especialmente en gatos.

Es fundamental que solo se utilice bajo indicación o prescripción veterinaria y que se sigan al pie de la letra todas las instrucciones de administración.

El uso indiscriminado de cualquier antibiótico puede generar bacterias resistentes, lo que dificulta el tratamiento de futuras infecciones. Siempre completa el tratamiento durante el tiempo que te indique el veterinario, incluso si tu gato parece estar mejor.

Aviso sobre dosificación: Solo podemos brindar dosis para medicamentos aprobados por la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, por sus siglas en inglés) para gatos y siguiendo las indicaciones oficiales. En casos de uso fuera de etiqueta, ofrecemos solo pautas generales y recomendaciones de seguridad. La dosis segura y adecuada en estos casos solo puede determinarla un veterinario de confianza.

Te recomendamos trabajar junto con tu veterinario para evaluar si un medicamento es el indicado para tu gato. Modificar o cambiar la dosis por cuenta propia implica riesgos. Tampoco recomendamos usar medicamentos humanos en mascotas sin consultar primero con un veterinario.

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Dr. Chris Vanderhoof, DVM, MPH

El Dr. Chris Vanderhoof se graduó en 2013 de la Facultad de Medicina Veterinaria de Virginia-Maryland (VMCVM) en Virginia Tech, donde también obtuvo una Maestría en Salud Pública. Completó una pasantía rotativa en el Hospital Veterinario Red Bank en Nueva Jersey y ahora trabaja como médico general en el área de Washington DC. El Dr. Vanderhoof también es redactor especializado en el campo de la salud animal y fundador de Paramount Animal Health Writing Solutions, que se puede encontrar en www.animalhealthcopywriter.com. El Dr. Vanderhoof vive en el área del norte de Virginia con su familia, incluidos 3 gatos.