¿Por qué los gatos se muerden el cuello unos a otros?

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Cuello de gato jugando-comprimido

¿Alguna vez te has preguntado por qué los gatos se muerden el cuello? Después de todo, parece un comportamiento tan primitivo que esperarías más de un gato salvaje. Sin embargo, los gatos domésticos son descendientes de los gatos salvajes.

Tal vez cuando nuestros gatos duermen, acurrucados en nuestro regazo, nos resulte difícil imaginar que descienden de estos ancestros salvajes. No obstante, si observamos a nuestras mascotas con más atención, veremos cuántos rasgos salvajes han adaptado para expresarse en sus entornos más domésticos.

Morderse el cuello es un comportamiento común que puede manifestarse por varias razones. Puede ser alarmante observarlo, pero este comportamiento adaptado también tiene manifestaciones positivas. Después de todo, no todas las mordeduras de cuello resultan en lesiones y son una parte esencial de la comunicación felina. Estas son las cinco razones principales por las que los gatos se muerden el cuello entre sí:

1. Comportamiento de apareamiento

Cuando los gatos se aparean, los machos suelen parecer dominantes sobre las hembras. El gato macho monta a la hembra y le muerde el cuello para mantenerla quieta. Por lo general, esto no daña a la hembra y protege al macho cuando es más vulnerable. Morder el cuello tiene un efecto calmante en la hembra (al igual que las madres levantan o sostienen a sus gatitos en la boca) y evita que se dé vuelta y lo ataque.

De hecho, llevar a los cachorros en brazos es otro caso en el que los gatos no muerden el cuello con la intención de hacerles daño. Los gatos son expertos en levantar con cuidado a sus pequeños gatitos por la nuca, tal vez para sacarlos del peligro o llevarlos a una nueva guarida o cama.

Esta es la forma más segura y eficaz para que la madre lleve a sus crías. Recuerda que el pelaje protege la frágil piel de los gatitos de las mordeduras suaves. Y se cree que sujetarlos por la nuca tiene un efecto calmante en los gatitos jóvenes.

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2. Jugar y aprender

A los gatitos les encanta jugar a pelear con la familia, otros gatos y juguetes. Jugar es una oportunidad fantástica para que los gatos jóvenes imiten y prueben diferentes comportamientos, a la vez que les permite poner a prueba los límites y comunicarse con sus compañeros y su familia humana.

Los gatitos tienen la oportunidad de perfeccionar sus habilidades de lucha y caza, y se divierten mucho en el proceso. Cuando los gatos se muerden el cuello, es probable que también estén abalanzándose y dando volteretas, lo cual es emocionante. Además, el gato que recibe la mordida en el cuello proporciona una retroalimentación instantánea sobre lo que está bien y lo que no. Este proceso de aprendizaje es muy divertido para un gato.

Pero, ¿qué pasa cuando juegas tranquilamente con tu gato adulto o te sientas a asearlo y él se da vuelta y te muerde? Esta es solo su forma de decirte que ya ha tenido suficiente. Lee más sobre por qué tu gato podría morderte cuandolo acaricias.

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3. Lucha y dominio

pelea de gatos

En hogares con varios gatos, las demostraciones de dominio y las mordeduras de cuello pueden ser una forma de que los gatos mantengan su jerarquía.

Un gato macho ha aprendido todo lo que necesita saber sobre las peleas a través del juego, pero cuando alcanza la madurez sexual, su visión del mundo es ligeramente diferente. Después de todo, a medida que sus hormonas adultas entran en acción, se vuelve más aventurero y comienza a marcar su territorio. Aun así, es posible que no todos sus vecinos sean tan acogedores como esperaba y que haya algunos gatos agresivos en el vecindario.

Supongamos que el territorio de tu gato se superpone con el de otro gato. Es probable que uno de los gatos tenga problemas con esto. También es común que los gatos expresen dominio sobre los recursos. Esto incluye el espacio, la comida, las cajas de arena, los juguetes y el contacto humano.

Cuando los gatos machos se muerden el cuello entre sí, es una expresión de su dominio sobre otro gato que compite por el mismo recurso. Esto es común cuando los gatos se pelean fuera de casa. Pero también en hogares con varios gatos, las demostraciones de dominio y las mordeduras de cuello son formas que tienen los gatos de determinar y mantener su jerarquía.

Quizás a un gato nuevo le lleve un tiempo adaptarse a una jerarquía establecida, y esta integración debe gestionarse con cuidado. En el siguiente artículo, ofrecemos algunos consejos sobre cómo presentar con éxito a tu nuevo miembro de la familia.

4. Instinto de caza

Es posible que observes a tu gato demostrando toda una serie de habilidades de caza, desde acechar silenciosamente hasta abalanzarse y atacar a su presa. El intenso impulso de hacer esto puede ser abrumador para ellos. Al igual que sus antepasados salvajes, los gatos están programados para inmovilizar a su presa lo más rápido posible. Morder el cuello de su objetivo es muy eficaz. Tal vez tu gato no salga a cazar todas las noches; en cambio, quizá veas su instinto depredador impulsando conductas de juego con sus compañeros de camada o juguetes de la misma manera.

5. Aumento de la agresividad debido a un problema médico

Ocasionalmente, las mordeduras en el cuello de los compañeros de casa y el comportamiento agresivo pueden indicar un problema de conducta o médico.

Si tu gato siempre ha sido manso pero de repente muestra un comportamiento más agresivo, podría ser que esté intentando decirte algo. Si morder el cuello de otros gatos es algo totalmente fuera de lo común en tu gato, intenta determinar si sufre algún tipo de estrés excesivo.

Los cambios en tu hogar, en tu familia o en el vecindario podrían ser la causa subyacente del comportamiento de tu gato. Si no logras identificar ninguna causa externa, considera la posibilidad de que tu gato se sienta mal o esté experimentando dolor. Los cambios en su comportamiento y el aumento de la agresividad pueden ser el resultado de diversas afecciones médicas.

Por ejemplo, algunas afecciones médicas causan dolor crónico (como la artritis) o cambios de comportamiento como resultado de desequilibrios hormonales (como el hipertiroidismo) o enfermedades neurológicas (afecciones que afectan el cerebro). A menudo, estas condiciones también vienen acompañadas de otros síntomas, por lo que debes vigilar atentamente a tu gato para detectar cualquier otro comportamiento inusual. Si crees que el cambio de comportamiento de tu gato se debe a una enfermedad, es esencial consultar al veterinario.

Al final, morderse el cuello entre ellos no es un comportamiento que debas eliminar por completo. Dicho esto, es fundamental que conozcas el lenguaje corporal de tu gato e intervengas antes de que las cosas se salgan de control. También es importante brindarles a los gatos en hogares con varios felinos mucho espacio. Y, por supuesto, si las peleas más intensas ocurren con gatos del vecindario durante la noche, puede que necesites implementar un toque de queda para mantener a tu gato a salvo.

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Dr. Rosalind Wright

El Dr. Wright actualmente desempeña un papel en un hospital veterinario. Desarrolló un gran interés en la medicina de cuidados intensivos y emergencias de animales pequeños. Le gusta escribir para veterinarios, especialmente sobre comportamiento y nutrición de los gatos, y dirige un equipo local para la organización benéfica StreetVet.