Nov 18, 2024
Los gatos tienen la fama de ser distantes y de bajo mantenimiento. Incluso en los dibujos animados, es más probable que el personaje felino se quede tomando el sol que jugando con la familia. Sin embargo, en la realidad, muchos gatos son juguetones y sociables. Necesitan actividades regulares e interacción humana para mantenerse saludables y felices. La buena noticia es que todo lo que necesitas hacer es jugar con tu gato.
Al involucrar a tu felino en sesiones de juego diarias, logras más de un objetivo. Primero, contribuyes a que se mantenga saludable y en forma mediante ejercicio suave. Y mientras queman esas calorías, también obtienen la estimulación mental y la liberación emocional que necesitan.
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Además, brindarle a tu gato toda tu atención fortalece el vínculo entre ambos. Con todos estos beneficios, jugar con tu gato es una decisión sencilla. La única decisión real que debes tomar es qué juego elegir. Aquí tienes algunos juegos divertidos que puedes compartir con tu gato para emocionarlo durante el tiempo de juego.
1. Juguete de tipo caña de pescar
Las cañas de pescar o los juguetes con plumas son juguetes populares para gatos y por buenas razones. Al mover el juguete frente a tu gato, estimulas su instinto natural de cazar, saltar, perseguir y golpear. La visión felina está diseñada para captar movimientos sutiles, y el ligero movimiento de esa pluma activa los instintos depredadores de tu gato.
Por supuesto, para tu gato, todo es diversión. Mantén el juguete cerca del suelo para los principiantes, pero si tienes un gatito enérgico o un adulto atlético, no dudes en intensificar el juego. Algunas de las mejores acrobacias felinas ocurren cuando un gato salta para atrapar un juguete.
2. Rompecabezas de comida
Un estudio reciente descubrió que a los gatos no les interesa trabajar para conseguir comida (¡han recorrido un largo camino desde sus raíces salvajes!), pero eso no significa que no disfruten de un rompecabezas de comida ocasional. Los rompecabezas de comida son juguetes simples que estimulan el cerebro de un gato. Pones una golosina sabrosa dentro y tu gato manipula el juguete para llegar al premio.
Como las golosinas son especialmente motivadoras, este tipo de juego puede mantener entretenidos a los gatos durante al menos unos minutos. Si tu gato nunca ha probado un comedero con forma de rompecabezas, hazlo sencillo. Hay dispensadores de comida fáciles de encontrar en las tiendas de mascotas, pero también puedes hacer el tuyo propio usando algo como un recipiente de plástico con agujeros recortados o un rollo de papel higiénico vacío con los lados doblados hacia adentro. Siéntate y observa cómo tu gato resuelve el rompecabezas para que se entretenga tanto como él.
3. Ir por la pelota
El juego de buscar no es solo para perros. A muchos gatos les encanta perseguir pelotas y otros juguetes pequeños que les lanzan sus humanos. Es como perseguir una presa en la naturaleza y les da mucha emoción a los gatos. La mayoría de los gatos son buenos en la parte de persecución del juego, pero es posible que tengas que entrenarlos para que traigan el juguete de vuelta.
Una vez que tu gato haya atrapado el juguete y se lo haya metido en la boca, llámalo por su nombre y convéncelo de que vuelva con sus golosinas favoritas. Los gatos son inteligentes y, si la recompensa es lo suficientemente buena, pronto aprenderán las reglas del juego. Algunas razas de gatos, como el siamés, el ragdoll, el abisinio y el birmano, son conocidas por su gran amor por el juego de buscar y traer.
4. Exploración de túneles
Llámalo como quieras, pero es el juego favorito de muchos felinos. Puedes usar una bolsa de papel, una caja de cartón, una manta, un túnel de juguetes o incluso un cesto para ropa. A los gatos les gusta por naturaleza meterse en estos espacios cerrados y puedes convertir su exploración en un juego divertido.
Cuando tu gato esté dentro del objeto elegido, rasca y pincha suavemente los lados desde afuera. El ruido y el ligero movimiento intrigarán a tu gato y lo tentarán a jugar contigo. Intentará «atrapar» tu mano desde dentro de su escondite.
5. Atrapa la luz
Los gatos no pueden ver ciertos colores, pero son muy buenos para notar esos reflejos aleatorios en la pared. La luz reflejada por un reloj, la pantalla del teléfono o cualquier otro objeto brillante puede convertirse en un juego divertido para jugar con tu gato.
Gira el objeto brillante en un rayo de sol y busca dónde cae el reflejo. Desde allí, puedes apuntarlo al suelo y tentar a tu gato a perseguirlo, o colocarlo en la pared y ver qué tan alto puede saltar tu gato. Este juego anima a tu gato a hacer ejercicio mientras satisface su impulso de acechar y perseguir. También puedes usar un puntero láser si tienes uno, pero asegúrate de que sea un láser de clase 2 que no dañe a tu gato si lo apuntas accidentalmente a sus ojos.
6. Tiempo frente a la pantalla
Quizá limites el tiempo que tú y tus hijos pasan frente a las pantallas, pero tu gato no se verá afectado negativamente por jugar unos juegos en el teléfono o la tableta. De hecho, hay varios juegos descargables diseñados específicamente para captar la atención de los gatos y estimular sus cerebros de manera saludable.
La mayoría incorpora algún tipo de presa en movimiento que anima a los felinos a golpear y saltar. No hay muchas cosas más divertidas que ver a tu gato emocionarse por unos ratones virtuales.
7. Pelotas saltarinas
Las pelotas saltarinas no son solo para niños, son muy divertidas para toda la familia. A tu gato le encantará especialmente seguir una pelota de colores mientras vuela por el aire y rebota en la pared. El tamaño y la velocidad de las pelotas saltarinas pequeñas son perfectos para que tu gato participe en un juego activo. Simplemente envía la pelota por el pasillo y deja que tu gato la persiga, la golpee y se divierta.
Lo único de lo que debes preocuparte es del tipo de pelota. No querrás que la pelota sea demasiado pequeña y se convierta en un peligro de asfixia. También debes evitar el tipo de goma que se puede romper con dientes o garras afiladas. Si tienes problemas para encontrar la pelota que rebote perfecta, recuerda que las pelotas de ping pong siempre son un éxito.
8. El juego del escondite
Este puede ser un juego desafiante, pero resulta divertido tanto para humanos como para gatos. Para principiantes, comienza con un escondite fácil de encontrar, como al otro lado de una puerta abierta o detrás de un mueble. Llama a tu gato por su nombre unas cuantas veces o agita su bolsa de golosinas favorita. Cuando te encuentre, ofrécele un premio.
Aumenta gradualmente la dificultad de los escondites y sigue otorgando recompensas por los hallazgos exitosos. Este juego también tiene la ventaja de enseñar a tu gato a venir cuando lo llamas, al mismo tiempo que fortalece su amistad.
Cuando termines de jugar con tu gato y ambos estén felices y agotados, no olvides ofrecerle algunas caricias y abrazos. Relajarse juntos después de un emocionante juego es una excelente manera de conectar aún más con tu felino.
