Entrena a tu gato en 5 sencillos pasos

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Cómo entrenar a tu gato

Cada vez más amantes de los gatos se dan cuenta de que entrenar a un gato no solo es sencillo, sino también una actividad divertida para todos los miembros de la familia. Para los gatos que viven en interiores y no reciben suficiente estimulación, el tiempo dedicado al entrenamiento se convertirá en un momento destacado de su día y ayudará a prevenir comportamientos destructivos por aburrimiento.

Entrenar a tu gato le enseñará trucos divertidos y habilidades prácticas, al mismo tiempo que satisface sus necesidades diarias de interacción social positiva con los humanos.

1. Consigue un clicker

El entrenamiento con clicker para gatos se basa en principios de refuerzo positivo; le damos un premio al gato por un trabajo bien hecho, y ellos aprenden a ofrecer comportamientos a cambio de recompensas. El clicker es una herramienta útil que proporciona instrucciones claras durante el entrenamiento.

Este dispositivo pequeño y portátil emite un sonido al presionarlo. Enseñamos al gato que un clic equivale a una golosina, y el sonido se convierte en un marcador que indica que hicieron algo bien y que la recompensa está en camino.

Piensa en el clicker como una instantánea de la acción que deseas premiar. Por ejemplo, al enseñarle a un gato a chocar la pata, debes hacer clic en el preciso instante en que levanta su pata, para que entienda que recibió una recompensa por esa acción específica.

Una vez que el gato comprende que levantar la pata es el comportamiento deseado, repetirá el gesto para continuar con el juego. Recuerda que el comportamiento que se recompensa se repite; con eso en mente, estarás en el buen camino para convertirte en un experto en el entrenamiento de tu gato.

2. Encuentra premios que le encanten a tu gato

Para que el entrenamiento con clicker funcione, es fundamental encontrar una recompensa que tu gato valore. Para muchos dueños de gatos, este puede ser el paso más complicado, ya que muchos felinos comen de un tazón de comida que se deja disponible todo el día, lo que disminuye el valor de la comida. ¡Hay una razón por la que las personas reciben su pago DESPUÉS de realizar el trabajo y no antes!

Puedes reforzar el buen comportamiento de tu gato utilizando sus comidas, siempre que no dejes la comida afuera todo el día para que se sirva libremente. Introduce pequeñas comidas programadas para aumentar la motivación alimentaria de tu gato.

Antes de la hora de comer, utiliza una porción de su comida para el entrenamiento. Si alimentas a tu gato con comida húmeda o cruda, la recompensa puede ser un par de lamidas de su comida con una cuchara. Si le das croquetas, puedes usar un puñado de piezas como recompensas.

Después del entrenamiento, coloca el resto de su comida como el premio mayor por todo su esfuerzo. Cuantas más recompensas tengas para tu gato, más fácil será el entrenamiento. Muchos gatos también se motivan por golosinas saludables, como pequeños trozos de pollo liofilizado.

Trabajar por comida es una excelente manera de que tu gato gaste energía y enriquezca su vida.

3. Captura un comportamiento: enséñale a tu gato a sentarse

Una vez que tengas una recompensa que le guste a tu gato, elige una habilidad en la que quieras trabajar y busca la manera de crear una situación que lo motive a ofrecer ese comportamiento, para que puedas “capturarlo” con el clicker. Enseñarle a sentarse es un truco fácil de entrenar, ya que la mayoría de los gatos se sientan durante el día, lo que te brinda una excelente oportunidad para practicar con el clicker.

Toma tu clicker y espera a que tu gato se siente. Haz clic en cuanto su trasero toque el suelo y lánzale un premio. Tu gato rápidamente entenderá que el sonido del clic predice una recompensa. Como el comportamiento que se recompensa se repite, notarás que tu gato te mirará y ofrecerá sentarse para ganar recompensas.

4. Agregar una señal

Cuando tu gato se siente de manera constante, puedes poner el comportamiento “en señal”. Una señal puede ser un gesto de la mano o una indicación verbal que le indique a tu gato que estás dispuesto a “pagar” por ese comportamiento. Para sentarse, podrías elegir agregar la señal verbal “Siéntate”.

Para enseñar la señal verbal, di la palabra justo cuando veas que tu gato adopta la posición. Practica emparejando la señal verbal con el comportamiento en varias repeticiones hasta que notes que tu gato comienza a responder a la palabra cuando la dices.

El paso final es recompensar a tu gato solo cuando se siente después de que digas “Siéntate”.

5. ¡Diviértete entrenando!

Cómo entrenar a tu gato para que camine con correa

Una vez que hayas reunido tu equipo, el siguiente paso es entrenar a tu gato para que camine con correa.

Utilizando el método de captura, puedes enseñarle muchos trucos y comportamientos adorables. ¿A tu gato le gusta rodar o levantarse sobre las patas traseras? Toma tu clicker y observa qué puedes capturar. Para mantener la atención de tu gato, las sesiones de entrenamiento deben ser divertidas, sencillas y cortas, de aproximadamente 3 a 5 minutos.

¡Basta! Cómo mejorar el comportamiento de tu gato

¿Qué pasa con utilizar el entrenamiento para DETENER a tu gato de hacer algo, como saltar sobre la encimera de la cocina?

La mayoría de las personas se enfocan en enseñarle a su gato a responder a un comando verbal como “¡No!”, pero este no es el mejor enfoque, ya que no le enseña a tu gato qué es lo que quieres que haga en su lugar. Imagina que llegas a una cena donde hay una gran mesa con lugares para diez personas, eliges un sitio y te sientas, y el anfitrión te dice: “no te sientes ahí.” Te levantas y te mueves a otro asiento, y nuevamente el anfitrión te pide que cambies de lugar.

Ahora comienzas a preguntarte, ¿dónde SÍ puedo sentarme? Imagina cómo se siente tu gato cuando dices “¡NO!” Tu gato no tiene idea de lo que quieres que haga.

Desde su perspectiva, está hambriento o buscando tu atención, y cuando le dices que NO, no resuelve la razón subyacente por la que está realizando ese comportamiento en primer lugar. Es mucho más fácil para los humanos y los gatos cuando las instrucciones son claras: “Siéntate aquí y te traeré un premio.”

Enseña a tu gato dónde quieres que vaya y luego recompénsalo mucho. Recuerda hacer que el nuevo lugar sea igual de atractivo que su antiguo lugar favorito.

Volviendo a nuestro ejemplo de la cena, si el anfitrión te coloca en la mesa de los niños cuando deseas estar con los adultos, no estarás contento. De igual manera, si intentas crear un nuevo “lugar de estacionamiento” para tu gato en el suelo y él quiere tener una buena vista de todo lo que haces en la cocina, esto no funcionará porque no satisface sus necesidades.

Ayuda a tu gato a superar sus miedos

¿Qué pasa si tienes problemas para cepillar a tu gato o cortarle las uñas?

Necesitamos cambiar de enfoque y utilizar un método de entrenamiento diferente llamado desensibilización y contracondicionamiento. La desensibilización consiste en presentar el objeto o experiencia que tu gato no disfruta a un nivel que pueda tolerar.

Imagina que tienes miedo de entrar en un ascensor porque sientes claustrofobia en un espacio pequeño. En este caso, primero debo ayudarte a sentirte cómodo en un área cerrada antes de que podamos lograr que te sientas a gusto en un ascensor en movimiento.

Podríamos dedicar la primera sesión a que solo entres y salgas de un ascensor estacionario. En esta etapa, puede que solo logres entrar al ascensor durante un segundo antes de que se vuelva demasiado aterrador.

Después de varias sesiones de entrar y salir del ascensor estacionario, podríamos aumentar el tiempo a diez segundos y luego eventualmente a un minuto. El objetivo de la desensibilización es introducir el objeto que causa miedo de una manera que sea manejable.

La parte de contracondicionamiento del proceso ayuda a que reacciones de manera positiva al estar en el ascensor. Podría hacerlo haciendo que algo bueno ocurra cada vez que entres al ascensor. Supongamos que te encanta el chocolate y te doy un trozo cada vez que entras al ascensor.

En este entrenamiento, ocurren dos cosas: aprendes que el ascensor no es aterrador y que al entrar, recibes chocolate, algo que amas. Siempre que no apresuremos el entrenamiento, puedes aprender que el ascensor es seguro y agradable (¡gracias al chocolate!).

Si a tu gato NO LE GUSTA que toques sus patas, necesitarás tocarlas en un lugar que pueda tolerar (quizás la parte superior de su pata o su pecho) y luego ofrecerle un delicioso premio. Desliza tu mano desde la parte del cuerpo donde tu gato se siente cómodo con el toque hacia el área que puede tolerar (notan que tocas la nueva zona y están preocupados, pero no asustados, es decir, no se alejan) y ofrécele la comida que adora.

Considera el ejemplo del ascensor y lo fácil que hice el proceso de desensibilización. Si desde el principio te hubiera llevado a un ascensor en movimiento, habría esperado demasiado. Para mejorar la respuesta de tu gato a los cortes de uñas y al manejo, es útil contar con un plan de entrenamiento completo elaborado por un especialista en comportamiento felino.

Ayuda a tu gato a mostrar lo mejor de sí

Combina ambos métodos de entrenamiento (clicker y desensibilización/contracondicionamiento) para lograr todos tus objetivos de entrenamiento.

El entrenamiento con clicker enseña a tu gato que tiene control sobre su entorno. Es su elección participar en la actividad y ofrecer las acciones. Por ejemplo, si estás enseñando a tu gato a permanecer en un transportín, con el entrenamiento con clicker, tu gato decide cuánto tiempo se queda adentro; es su opción entrar y quedarse para ganar recompensas.

Este tipo de entrenamiento crea un gato feliz y seguro de sí mismo. La desensibilización y el contracondicionamiento ayudan a tu gato a nivel emocional a superar sus miedos. Si deseas acelerar el progreso, es beneficioso combinar ambos métodos.

Por ejemplo, para el entrenamiento de corte de uñas, puedes mostrarle a tu gato que tocar sus patas no es aterrador y enseñarle que choque la pata o un apretón de patas equivale a golosinas y atención.

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Julie Posluns, Applied Animal Behaviourist (ACAAB)

Hace más de diez años, Julie se convirtió en entrenadora de perros profesional certificada (CCPDT-KA). En 2013, regresó a la escuela para obtener una Maestría en Ecología Cognitiva y Conductual de la Memorial University. Obtuvo con orgullo la designación de Conductista Animal Aplicada Certificada Asociada de la Animal Behavior Society y combina su conocimiento sobre el comportamiento animal y el entrenamiento con clicker para ayudar a los estudiantes a sobresalir en el entrenamiento de sus gatos.