Las gatas que no han sido esterilizadas entran en celo (estro) por primera vez al llegar a la pubertad, alrededor de los 4 a 6 meses de edad. Luego, tendrán múltiples celos cada año durante la temporada de apareamiento.
En esta etapa del ciclo reproductivo, las gatas son fértiles y pueden quedar embarazadas. También pueden mostrar comportamientos extraños y a menudo bastante dramáticos. Las gatas en estro pueden vocalizar en voz alta, buscar atención constantemente, marcar con orina e incluso intentar escapar de casa. Estas señales pueden ser preocupantes para los dueños de mascotas.
En esta guía, exploraremos las etapas del estro felino, los signos de que tu gata puede estar en celo y las acciones que puedes tomar.
Fases del ciclo estral en las gatas
El ciclo reproductivo de una gata, también llamado ciclo de celo, dura de media entre 14 y 21 días y se desarrolla en cuatro etapas:
Proestro
Se trata de una etapa breve (1-2 días) que precede al celo. La gata puede resultar atractiva para los machos, pero aún no es fértil ni está dispuesta a aparearse.
Estro
Este es el periodo fértil del ciclo, donde la hembra está lista y receptiva para el apareamiento, pudiendo quedar embarazada si se aparea. Dura entre 3 y 14 días. Durante esta etapa, tu gata puede mostrar diferentes señales, como rodar por el suelo, ser más cariñosa y vocalizar. También puede marcar su territorio o la casa para informar a los machos que está lista para aparearse. Los gatos machos pueden detectar a una hembra en celo a una milla de distancia.
Interés o diestro
Si la gata no es apareada, el período de interestrus entre los ciclos de celo dura de 2 a 3 semanas.
Si la gata es apareada y ovula, entrará en la fase de diestro. Los óvulos fertilizados se convierten en embriones e implantan en el útero. El embarazo dura de 62 a 64 días.
Anestro
Esta es la etapa en la que la gata se encuentra en estado de letargo reproductivo: no experimenta ningún ciclo de celo. Las gatas se reproducen por temporadas y no tienen ciclos durante los meses más fríos, cuando los días son más cortos. Durante este período, no entrará en celo y no podrá quedar embarazada.
8 Señales de que tu gata está en celo
En las gatas, los signos físicos de estro son difíciles de detectar. No sangran cuando están en celo. Las pistas más evidentes son conductuales y pueden ser bastante dramáticas. Una gata experimenta su primer ciclo estral al alcanzar la madurez sexual. La edad exacta en que una gata entra en celo por primera vez varía. Generalmente ocurre alrededor de los seis meses, aunque puede suceder tan pronto como a los cuatro meses.
Las señales de que tu gata está en celo incluyen:
- Vocalización excesiva y/o ruidosa (aullidos, gritos y maullidos).
- Rodar por el suelo y elevar su parte trasera.
- Búsqueda de atención (pidiendo caricias y mimos).
- Gatas de interior intentando escapar de casa.
- Agitación o inquietud.
- Caminar en círculos con las patas traseras.
- Marcaje con orina.
- Disminución del apetito.
¿Qué hacer cuando tu gata está en celo?
Las gatas en celo pueden mostrar comportamientos persistentes, dramáticos y potencialmente preocupantes. Es comprensible que te preocupe que tu gata esté sufriendo debido a sus aullidos y agitación, pero todo esto forma parte de un ciclo de celo normal.
Saber cómo ayudar puede resultar complicado. Algunas formas de lidiar con una gata en celo incluyen:
- Distraerla con juegos, un juguete nuevo o una golosina.
- Ofrecerle hierba gatera.
- Usar ayudas para la calma.
Lamentablemente, es casi imposible detener a una gata en celo de maullar, inquietarse, rodar por el suelo y elevar su parte trasera. Puede que tengas que esperar a que pase esta fase.
Una vez que tu gata haya salido de celo, esterilizarla evitará que vuelva a entrar en celo en el futuro.
¿Deberías esterilizar a tu gata?

Las gatas en celo intentan constantemente escapar en busca de un compañero, lo que puede ser peligroso.
Puedes evitar que tu gata entre en celo y quede embarazada al esterilizarla. Este es un procedimiento sencillo realizado por un veterinario, en el cual se retiran los órganos reproductivos a través de una pequeña incisión.
Las gatas intactas pasan por múltiples celos cada año. Durante estos períodos, vocalizan en voz alta, ruedan por el suelo, orinan en objetos y tratan de escapar constantemente. Si logran salir, esto puede ser peligroso, ya que pueden alejarse mucho de casa en su búsqueda de un compañero. El embarazo en gatas muy jóvenes también puede ser perjudicial para sus cuerpos en crecimiento, sin mencionar la responsabilidad que conlleva una camada de gatitos.
Se recomienda la esterilización o castración para todas las gatas. Pueden tener entre 2 y 8 gatitos por camada y entre 2 y 5 camadas por temporada. Esto significa que una sola gata podría potencialmente tener cientos de gatitos a lo largo de su vida. Además de los beneficios conductuales, la esterilización también elimina el riesgo de cáncer uterino y ovárico y reduce la probabilidad de otras condiciones médicas, como infecciones uterinas.