Hipoplasia radial en gatos: causas, síntomas y tratamiento

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Gatito con hipoplasia cerebelosa

Este artículo tiene como objetivo explicar los detalles de la hipoplasia radial en gatos, término utilizado para describir una deformidad anatómica en las patas delanteras que resulta en una apariencia y marcha inusuales.

A estos gatos se les puede conocer como gatos RH, gatos torcidos, «squittens» o gatos canguro. Aunque algunos de estos nombres suenen tiernos, estos gatos nacen con una anomalía física seria.

¿Qué significa hipoplasia radial?

El radio es uno de los dos huesos principales que conforman el antebrazo o la parte inferior de la pata delantera en un gato (la pata delantera del gato es equivalente al antebrazo en los humanos). La hipoplasia radial significa que el radio es más pequeño de lo normal. La aplasia radial o la agenesia radial se refieren a la ausencia total del radio.

A veces, el término hipoplasia radial se utiliza para describir también casos de aplasia radial o agenesia radial. Podría decirse que la aplasia radial es simplemente una versión extrema de la hipoplasia radial. Otro término que se emplea ocasionalmente es micromelia de la pata delantera.

Las patas traseras de los gatos con hipoplasia radial suelen ser normales, por lo que estos gatos pueden caminar sobre sus patas traseras, pero no tienen un uso normal de sus extremidades delanteras.

¿Por qué los gatitos afectados reciben nombres inusuales?

Estos nombres suelen dárseles a los gatitos afectados debido a malentendidos sobre la causa de su apariencia anómala.

  • El término «gatos RH» simplemente se refiere a la abreviatura de «hipoplasia radial» (RH por sus siglas en inglés).
  • El término «gatos canguro» (o «roo cats») hace referencia a la marcha inusual de algunos gatos afectados, que, con sus patas traseras poderosas y patas delanteras menos desarrolladas, pueden saltar de manera similar a un canguro.
  • El término «squitten» proviene de “squirrel kitten” (gatito ardilla), sugiriendo que se trata de la descendencia de un gato que se ha cruzado con una ardilla.
  • El término «cabbit» proviene de “cat rabbit” (gato conejo), sugiriendo que es la descendencia de un gato que se ha cruzado con un conejo.
  • Claramente, es imposible que los gatos se crucen con ardillas o conejos.

¿Cuáles son los síntomas de la hipoplasia radial?

Los síntomas de la hipoplasia radial felina se deben a la incapacidad de soportar peso de manera normal en las patas delanteras. Los gatos afectados suelen tener patas delanteras más pequeñas, rígidas o torcidas. A veces caminan con las patas delanteras torcidas, otras veces caminan sobre sus codos, y en ocasiones caminan verticalmente sobre sus patas traseras.

La pata delantera anómala de un «squitten» puede describirse como una aleta debido a su apariencia inusual.

¿Qué tan común es la hipoplasia radial en los gatos?

La hipoplasia radial es rara en los gatos, pero es tan distintiva que, cuando se presenta un caso, puede hacerse muy conocido, y la atención pública puede crear la ilusión de que es más común de lo que realmente es.

¿Qué causa la hipoplasia radial en los gatos?

Los gatitos nacidos con hipoplasia radial no pueden soportar peso de manera normal en las patas delanteras.

La hipoplasia radial es una anomalía congénita (el gatito nace con un radio más pequeño o ausente). Esto puede ser causado por una mutación genética hereditaria (es decir, heredada) o por una mutación aislada en el útero.

¿La hipoplasia radial está asociada con otros problemas?

No. La hipoplasia radial es solo una anomalía física de un gatito y no indica que haya algo más mal en el animal. Los gatos afectados suelen ser normales en otros aspectos, con el mismo maullido, ronroneo y encanto de cualquier otro gatito.

¿Algunas razas de gatos tienen más probabilidades de tener hipoplasia radial?

Como una condición de causa genética, la hipoplasia radial puede ser más común en ciertas razas, porque, por definición, cada raza de gato tiene su propia colección única de genes. Sin embargo, no existe un patrón reconocido que indique que sea más común en razas específicas.

Como regla general, tiene sentido esterilizar o castrar a los gatos afectados para evitar que esta condición se transmita a la siguiente generación de gatitos. Esto es especialmente importante para los criadores de gatos que puedan sentirse tentados a criar a estos gatos debido a su atractivo «tierno».

Diagnóstico de la hipoplasia radial

Gato en el árbol para gatos

Cuando un gatito no puede soportar peso en ambas patas delanteras, se puede sospechar de hipoplasia radial, y es necesario llevar al gatito al veterinario para una consulta.

El veterinario puede sospechar de hipoplasia radial con un simple examen físico, pero se requieren radiografías (rayos X) para confirmar el diagnóstico. Estas mostrarán el tamaño disminuido o la ausencia del hueso del radio.

Tratamiento de la hipoplasia radial

No hay un tratamiento efectivo para la hipoplasia radial. Se ha intentado el uso de férulas y vendajes, y la cirugía ortopédica puede ser sugerida, pero estos métodos generalmente no hacen una diferencia significativa en la condición.

A largo plazo, los gatos afectados pueden desarrollar artritis (enfermedad degenerativa de las articulaciones) en las articulaciones de las patas afectadas, y esto puede necesitar tratamiento para mantener a los gatos cómodos y sin dolor.

¿Cuál es el pronóstico para los gatos con hipoplasia radial?

Los gatos con hipoplasia radial generalmente no pueden usar sus patas delanteras de manera normal, por lo que tienen un estilo de vida limitado. No pueden vivir como gatos de exterior y es posible que no puedan usar una caja de arena de forma normal. No pueden saltar desde lugares altos de la misma manera que un gato normal, por lo que no pueden llevar una vida normal.

Algunos gatos afectados pueden vivir en hogares familiares, mientras que otros necesitan cuidados especiales, viviendo en refugios o santuarios para animales como gatos con necesidades especiales o discapacitados. Los gatos afectados suelen ser populares en las redes sociales, ya que tienen una apariencia muy inusual y distintiva.

Conclusión

La hipoplasia radial, así como una serie de anomalías congénitas relacionadas con los huesos, es una afección poco frecuente que afecta a algunos gatitos desde el nacimiento. Por lo general, no es posible tratarla y los gatos afectados suelen necesitar algún tipo de cuidado especial durante toda su vida.

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Dr. Pete Wedderburn, DVM

El Dr. Pete Wedderburn se graduó como veterinario en Edimburgo en 1985 y ha dirigido su propio consultorio de cuatro veterinarios con animales de compañía en el condado de Wicklow, Irlanda, desde 1991. Pete es muy conocido como un veterinario de los medios con apariciones regulares en la televisión, la radio y los periódicos nacionales, incluidos una columna semanal en el Daily Telegraph desde 2007. Pete es conocido como "Pete el veterinario" en sus ocupadas páginas de Facebook, Instagram y Twitter, y publica periódicamente información sobre temas de actualidad y casos de la vida real de su clínica. También escribe un blog habitual en www.petethevet.com. Su último libro: “Pet Subjects”, fue publicado por Aurum Press en 2017.