Adoptar un gato, un cachorro o cualquier otra mascota es un compromiso para toda la vida, así que infórmate bien antes de dar el paso. Muchas personas los ven como algo desechable, lo que contribuye al aumento de colonias felinas y refugios saturados. Responder estas 10 preguntas te ayudará a tomar una decisión acertada.
1. ¿Realmente quiero un gato?
Un gato no es un perro pequeño. Aunque pueden aprender ciertas cosas, su comportamiento es muy distinto. Y sí, necesitan atención. Aunque muchos los consideren solitarios, se desarrollan mejor cuando reciben cariño e interacción. Eso incluye momentos de juego, sesiones de cepillado y llamarlos por su nombre. Sí, lo reconocen, aunque solo respondan con un sutil movimiento de oreja.
Si nunca has convivido con un gato, infórmate sobre su comportamiento. Aquí encontrarás datos útiles, además de los conocimientos de expertas como Amy Shojai y Pam Johnson-Bennett.
2. ¿Debería elegir un gatito de refugio o un gatito de raza pura?
Si vas a adoptar un gato de un refugio, tómate el tiempo de conocer su personalidad. Visita la sala comunitaria y observa cómo reaccionan contigo. Si pasas muchas horas fuera de casa, considera llevarte una pareja inseparable.
¿Buscas un gato de raza? No te dejes engañar por anuncios en sitios como Craigslist. En Facebook hay grupos dedicados a distintas razas, pero también estafadores. Antes de contactar, investiga bien a los criadores y sus gatos.
Los criadores responsables tienen listas de espera, evalúan cuidadosamente a los adoptantes, entregan certificados de salud y, en muchos casos, esterilizan a los gatitos antes de darlos en adopción.
3. ¿Quiero un gato adulto o un gatito?

Utilizar una trampa humanitaria, como las que se emplean en programas de TNR (captura, esterilización y retorno), puede ayudarte a recuperar a tu gato perdido.
La edad a la que un gato es socializado influye mucho en su personalidad. El período clave va de las 2 a las 10 semanas. Cuanto más tiempo pase un gatito con su camada, mejor aprenderá límites de comportamiento, como el juego brusco y las mordidas. Aun así, cada gato tiene su propia personalidad, y conocerla es fundamental.
4. ¿Soy alérgico?
El alérgeno principal en los gatos, conocido como Fel d 1, proviene de su saliva. Si tú o alguien en casa sospechan tener alergia, pasa tiempo con gatos en un refugio o en casa de un amigo antes de adoptar.
Si presentas síntomas, lávate las manos después de acariciarlos y evita tocarte la cara. Puedes crear un área libre de gatos, como tu habitación. Cepíllalo con frecuencia y considera acostumbrarlo al baño.
Algunas razas, como el azul ruso o el siberiano, se consideran hipoalergénicas, pero eso no garantiza que no tengas síntomas a su alrededor.
5. ¿Cómo prepararé mi casa?
Debes tener una habitación tranquila preparada para tu nuevo gato, teniendo en cuenta que cada gato se relaja a su manera antes de que se le permita explorar toda la casa.
Proporcionar lo siguiente:
- Cama cómoda
- Cajas para esconderse
- Caja de arena
- Rascadores (altos y bajos)
- Juguetes
- Cuencos de comida y agua
6. ¿Estoy listo para conocer a mi nuevo gatito?

Establecer un vínculo con un gato requiere atención y paciencia.
Cada gato tiene una personalidad diferente y conocer al tuyo requiere un poco de tiempo y paciencia. Mucho depende de la socialización temprana.
Algunos son tímidos y sensibles a los ruidos fuertes, como el de la aspiradora gigante. Otros son cariñosos y sociables. Tendrás que aprender a reconocer sus preferencias, como por ejemplo, que les rasquen el cuello y el mentón en lugar de cogerlos y sostenerlos.
7. ¿Estoy preparado para brindar atención veterinaria?
No esperes hasta que haya una emergencia o tu gato esté muy enfermo para buscar un veterinario. Agenda una visita de control poco después de llevarlo a casa para establecer una referencia de su salud. Consulta sobre un calendario de vacunación adecuado para su estilo de vida; la Asociación Americana de Hospitales Veterinarios recomienda como esenciales las vacunas contra FHV-1, FCV, FPV, rabia y FeLV (para gatos menores de un año), mientras que otras son opcionales.
Si adoptaste un gato adulto, un análisis de sangre puede ayudar a detectar problemas como insuficiencia renal. Pregunta si el veterinario atiende emergencias 24/7 o si colabora con una clínica cercana.
8. ¿Podré obtener un seguro para mascotas para mi gato?
El seguro para gatos puede marcar una gran diferencia si alguna vez enfrenta una enfermedad grave. Lee las pólizas con atención y revisa qué cubren en cuanto a chequeos de rutina, vacunas, condiciones preexistentes, deducibles, límites de gasto y atención de emergencias.
Otra opción es abrir una cuenta de ahorros exclusiva para gastos veterinarios.
9. ¿Sé cómo detectar problemas?
Revisa a tu gato con frecuencia para detectar bultos, heridas o irregularidades en la piel. Puedes hacerlo mientras lo cepillas, algo que la mayoría disfruta y que, además, fortalece el vínculo entre ustedes.
El corte de uñas y el cepillado de dientes también deben formar parte de su rutina. Acostúmbralo poco a poco para reducir el estrés, teniendo en cuenta que cada gato reacciona de manera distinta.
10. ¿Sé qué es normal para un gato, física y conductualmente?
Cualquier cambio (letargo, ocultamiento, agresividad) podría ser señal de enfermedad. Abordar los problemas a tiempo puede evitar gastos importantes y mantener la calidad de vida de tu gato. Deberás observar de cerca a tu gato para identificar posibles problemas antes de que se agraven.
Consejos adicionales
Si decides adoptar un gato, aquí tienes algunos consejos que te ayudarán a dar la bienvenida a tu nuevo amigo en casa:
1. Háblale usando su nombre
Puede sonar cursi, pero diles que están seguros y que los amas y que son hermosos. Se acostumbrarán al sonido de tu voz y verás respuestas como ronroneos, caricias y besos en los ojos.
2. Programa el tiempo de juego
Los juguetes con cañas de pescar siempre son populares, los juguetes de peluche hechos con hierba gatera, las pelotas arrugadas, los resortes… Cada gato desarrolla sus preferencias.
3. Dale la mejor comida que puedas permitirte
Es la mejor inversión que puedes hacer para asegurar la salud de tu gato. Hay una gran cantidad de información en línea, pero aquí te comparto algunos recursos útiles sobre la nutrición felina.
Las mejores opciones incluyen una variedad de alimentos enlatados de alta calidad (la diversidad previene la selectividad o deficiencias de una sola marca), una dieta cruda pre elaborada o casera, alimentándolo en horarios fijos, tres o cuatro veces al día. (Los gatitos, por supuesto, deben ser alimentados con más frecuencia). La comida seca, a pesar de su popularidad, es controvertida, ya que a menudo se asocia con la obesidad, la diabetes y problemas urinarios.
La mayoría de los gatos se adaptan fácilmente a un horario de alimentación y ¡te lo harán saber! Además, según el etólogo felino Jackson Galaxy, los gatos están diseñados para cazar, atrapar, matar y comer, así que tenlo en cuenta al programar el tiempo de juego y las comidas.