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Este artículo está patrocinado por Sleepypod, fabricantes de productos de viaje para mascotas innovadores y centrados en la seguridad, como la cama móvil para mascotas y el arnés calmante Sleepypod. Haz clic aquí para explorar la tienda Sleepypod.
Viajar con tu gato, ya sea cruzando el país o mudándote a otro vecindario, puede parecer un desafío. Sin embargo, con la preparación adecuada, compartir el viaje con tu felino puede resultar una experiencia maravillosa. De hecho, a algunos gatos les gusta más que quedarse con un cuidador en casa.
Para que el viaje sea exitoso, es fundamental pensar en los detalles y planificar. Por eso, hemos creado esta guía para ayudarte a prepararte y hacer que el trayecto sea cómodo tanto para ti como para tu gato.
1. Elige un buen transportín

Elegir un buen transportín es el primer paso para que tu gato viaje de forma segura y cómoda. Mallory Crusta / Cats.com
Un buen transportín es fundamental para garantizar un viaje seguro y exitoso con tu gato. Debe estar bien construido, ser seguro y adecuado para el medio de transporte que utilices. Además, es importante que tenga el tamaño correcto, de manera que tu gato pueda sentarse, acostarse y cambiar de posición cómodamente.
Después de probar numerosos transportines, recomendamos los productos de Sleepypod como los mejores del mercado. Esta empresa demuestra un compromiso con la seguridad que supera al de cualquier otro fabricante de productos para viajes con mascotas. A través del Programa de Pruebas de Seguridad de Sleepypod, sus transportines son sometidos a pruebas de impacto y cuentan con certificación para aumentar la seguridad de tu gato en caso de accidente. Estas pruebas cumplen con los mismos estándares que se aplican a los sistemas de retención para niños.
Sugerimos el Sleepypod Mobile Pet Bed como el mejor transportín para viajes en auto y el Sleepypod Air como el mejor para vuelos. Puedes obtener más información sobre su línea de transportines aquí.
Una vez que tengas un excelente transportín, comienza una introducción sin estrés, dejándolo como cama antes de asociarlo con el auto, el veterinario o las vacaciones. Utiliza golosinas para motivar a tu gato a explorar el transportín.
2. Comienza a prepararte con anticipación
Un viaje exitoso con tu gato comienza mucho antes de salir de casa. Aunque la mayoría de los gatos se sienten más cómodos en un entorno familiar, una buena socialización desde cachorros les ayudará a sentirse seguros durante el trayecto.
Si planeas viajar con tu gato en el futuro, empieza a entrenarlo desde temprano. Saca a tu gatito a pasear con arnés y correa, preséntale a nuevas personas y expónlo cuidadosamente a otros animales. Recuerda que toda socialización debe ser bien planificada y supervisada para mantener a tu gatito a salvo.
En las semanas previas al viaje, asegúrate de que tu gato se familiarice con todos los suministros que se usarán el día de la partida. Debe conocer su transportín, arnés y correa, caja de arena portátil y cualquier otro accesorio especial.
También es importante que se sienta cómodo en el auto. Practica animándolo a entrar en el transportín, ciérralo de forma segura y luego llévalo brevemente al auto. Ofrece elogios y premios durante estas sesiones de práctica para que tu gato asocie el viaje con una experiencia positiva.
3. ¿Vuelas o conduces? Planifica en consecuencia

Viajar en coche requiere una preparación diferente a la de un avión. Ten en cuenta tus planes de viaje cuando prepares a tu gato. Mallory Crusta / Cats.com
Viajar con tu gato en coche
Viajar en auto te brinda más control sobre tu horario y la experiencia de tu gato, permitiéndote hacer tantas paradas como necesites, limitar el número de pasajeros y modificar tu itinerario para que tu felino se sienta cómodo. No obstante, hay algunas consideraciones especiales a tener en cuenta.
Utiliza un transportín a prueba de accidentes. Sujétalo al asiento siguiendo las instrucciones del fabricante, asegurándote de que esté en perfectas condiciones para proteger a tu gato en caso de un accidente. Una vez en camino, verifica que haya buena ventilación, pero presta atención a las puertas y ventanas para evitar que escape. Asegúrate de que tu gato esté cómodo: la base del transportín debe estar nivelada y lo suficientemente segura para que no se mueva al conducir, lo que puede empeorar el mareo.
Antes de salir, considera encender el aire acondicionado o la calefacción para garantizar que la temperatura del vehículo sea agradable para tu gato. Si tu gato tiende a marearse, déjalo en ayunas durante 8 a 12 horas antes de partir y consulta con tu veterinario sobre la posibilidad de usar medicación.
Para más consejos, consulta nuestra guía escrita por veterinarios sobre cómo hacer un viaje por carretera con tu gato.
Viajar con tu gato en avión
Viajar en avión con un gato, ya sea a nivel nacional o internacional, implica algunas consideraciones adicionales.
Asegúrate de que tu transportín cumpla con los requisitos para ser guardado bajo el asiento como equipaje de mano, verificando con la aerolínea para evitar sorpresas de último minuto. No se recomienda viajar con tu gato en la bodega de carga, a menos que sea absolutamente necesario. Nuevamente, consulta con la aerolínea para confirmar que el transporte en cabina es una opción. También es importante informarte sobre la documentación que la aerolínea requiere antes de que tu mascota aborde.
La seguridad en el aeropuerto puede ser tan estresante para los gatos como para nosotros, así que considera el TSA PreCheck® para minimizar el tiempo en la fila. Los agentes de seguridad te pedirán que saques a tu gato del transportín justo antes de pasar por el proceso de revisión, así que asegúrate de que lleve un arnés y esté listo para salir del transportín de forma segura. Lleva a tu gato a través de la máquina de rayos X y regresa a tu gato a su transportín tan pronto como sea posible. Haz clic aquí para leer los consejos de la TSA para una experiencia de abordaje y vuelo sin contratiempos con tu mascota.
Una vez en el avión, elige un asiento tranquilo junto a la ventana y prepárate para el vuelo. Un buen transportín debe tener una entrada superior o una ventana que te permita acariciar e interactuar con tu gato durante el trayecto.
4. Crea una lista de equipaje para tu gatito

Asegúrate de que tu gato comience el viaje preparado con todos los elementos esenciales. Monika Wisniewska / Shutterstock.com
Además del transportador, el arnés y la correa para seguridad, tú y tu gato deben llevar consigo algunos elementos adicionales.
Asegúrate de que tu gato tenga suficiente comida y agua para todo el viaje y lleva cuencos que le resulten familiares para que pueda comer y beber. Te recomendamos tener algunos suministros adicionales a mano en caso de que haya retrasos en el viaje. Lleva una caja de arena desechable con la arena habitual de tu gato. Dado que pueden ocurrir accidentes durante los viajes largos, cubre la caja de arena con una almohadilla para orina por seguridad.
Artículos a empacar
- Transportador.
- Arnés y correa.
- Almohadillas absorbentes para orinar.
- Documentos médicos y de seguros, incluida la información de contacto de tu veterinario habitual.
- Certificados de vacunación.
- Cualquier análisis de laboratorio reciente que pueda ser relevante.
- Cualquier medicamento que necesite tu gato, con prescripción de tu veterinario.
- La misma comida que normalmente comen en casa.
- Platos familiares de comida y agua.
- Si es posible, agua de casa; el agua de otras fuentes puede tener un sabor extraño para tu gato.
- Arena para gatos familiar.
- Una manta familiar para mayor comodidad.
- Un collar e identificación con información actualizada.
- Un rastreador de actividad del gato, si lo deseas.
- Si vas a permanecer en tu destino durante un tiempo, una etiqueta de identificación temporal con su nueva dirección puede ser una buena idea.
Además de estos elementos esenciales, revisa el historial clínico de tu gato. Asegúrate de que haya recibido la última ronda de vacunas esenciales y confirma que la información en su microchip esté actualizada.
5. Trae objetos de casa
Los gatos se conectan con los lugares a través del olfato. Llevar objetos que huelan a casa ayudará a que tu gato se sienta seguro tanto durante el transporte como al llegar a tu destino. Los artículos que suelen estar impregnados con el olor de tu gato incluyen mantas y camas donde duerme, juguetes favoritos, arena y superficies para rascar.
Al llegar a tu destino, intenta crear un ambiente hogareño. Coloca los comederos y bebederos en una disposición similar a la de tu casa y usa el transportín como cama. Asegúrate de que tu gato tenga una caja de arena con arena familiar. Si viajas para visitar familiares o amigos, considera pedirles que preparen una habitación de refugio antes de tu llegada.
6. Utiliza calmantes según sea necesario
Los productos calmantes pueden ayudar a manejar los niveles de estrés de tu gato durante el viaje. Un buen punto de partida es el arnés de tu gato. El Martingale Calming Harness de Sleepypod ofrece sujeción y calma a la vez, envolviendo el cuerpo de manera uniforme para ayudar a reducir la ansiedad.
Los productos con feromonas calmantes utilizan feromonas sintéticas para hacer que tu gato se sienta seguro y como en casa. Los sprays o toallitas pueden aplicarse dentro del transportín antes de salir y re aplicarse varias veces durante el trayecto. Un collar de feromonas calmantes también puede ser útil.
Existen suplementos calmantes disponibles, aunque son menos investigados y no han demostrado ser tan efectivos. Algunos gatos que experimentan mucho estrés pueden beneficiarse de medicamentos recetados para la ansiedad, como buprenorfina o gabapentina. Consulta a tu veterinario y asegúrate de hacer una prueba en casa para saber cómo reacciona tu gato.
7. ¡Sé paciente!

Recuerda que tu gato puede sentir y alimentarse de tu estrés. Controla tu propia ansiedad para que el viaje sea placentero para tu gato. Africa Studio / Shutterstock.com
Incluso con el gato más tranquilo, viajar puede ser estresante. Para el beneficio de ambos, trata de manejar tus propios niveles de estrés y ten paciencia. ¡Tu calma ayudará a que tu gato se sienta más seguro y cómodo durante el viaje!
Planificar con anticipación y crear un esquema de contingencia te ayudará a enfrentar mejor los desafíos inesperados. Una vez que estés en el camino o en el aire, no olvides respirar profundamente y disfrutar de este momento especial con tu gato.
Una última palabra de precaución
Recuerda que viajar no es adecuado para todos los gatos, especialmente aquellos que son tímidos o ansiosos. No asumas que, solo porque les encanta pasar tiempo contigo, tu gato querrá acompañarte en unas largas vacaciones. En muchos casos—si no es que en la mayoría—sería mucho más feliz quedándose en casa.
Si decides dejar a tu gato, un cuidador de confianza suele ser la mejor alternativa de bajo estrés. Haz clic aquí para leer nuestro artículo sobre si debes llevar a tu gato a una guardería o dejarlo en casa.