Puedes medir fácilmente la temperatura corporal de tu gato, algo que puede proporcionar información importante sobre su bienestar o cualquier otra condición. La temperatura corporal es uno de los signos vitales clave de la salud de un gato, junto con la frecuencia cardíaca y respiratoria.
¿Cómo regulan los gatos su temperatura corporal?
La fisiología natural del cuerpo de un gato actúa para garantizar que el rango de temperatura se mantenga en el nivel normal todo el tiempo. La temperatura solo cambia del nivel normal debido a circunstancias específicas, como una enfermedad o estrés.
- Cuando un gato está descansando, la temperatura corporal basal tiende a ser baja , ya que el cuerpo está inactivo.
- Cuando un gato se vuelve activo o estresado, la temperatura corporal puede aumentar levemente , generalmente junto con la frecuencia respiratoria y la frecuencia cardíaca.
A esta variación fisiológica se suma el hecho de que si un gato padece diversas enfermedades, su temperatura corporal puede ser sensiblemente más alta o más baja.
Controlar la temperatura corporal de su gato puede ser una forma útil de comprobar su estado de salud general. Si registra los signos vitales de un gato con regularidad, puede resultar útil para su veterinario. En una situación de emergencia , puede ser útil medir la temperatura corporal como una forma de explicar con más detalle a su veterinario lo que le sucede a su mascota.
La temperatura corporal normal de los gatos
La temperatura corporal se mide en grados Fahrenheit o en grados centígrados (Celsius). Esto se escribe como grados F o grados C. Fahrenheit se utiliza con mayor frecuencia en los Estados Unidos; en Europa y muchos otros países, es más probable que se utilicen los grados centígrados.
La temperatura corporal normal del gato tiende a permanecer dentro de parámetros relativamente estrechos.
- El rango normal de temperatura es entre 101 °F y 102,5 °F (38,3 °C a 39,2 °C)
- Si la temperatura es inferior a 100 °F (37,8 °C), es demasiado baja.
- Si la temperatura es superior a 103 °F (39,4 °C), es demasiado alta.
Estos niveles de temperatura no son absolutos, pero proporcionan una guía general útil.
Cómo medir la temperatura corporal del gato
Tomar la temperatura de un gato es fácil y es una habilidad útil que todos los dueños de gatos deben aprender. A continuación, se muestra cómo tomar la temperatura de su gato de manera segura y precisa:
- Utilice un termómetro rectal digital . Son económicos y se consiguen fácilmente.
- Lubrique la punta del termómetro digital con jabón, vaselina o un gel lubricante.
- No presione con fuerza . Si el termómetro no entra fácilmente, no insista.
- Inserte el termómetro a través del ano hasta el recto unos 2 a 3 centímetros (aproximadamente 1 a 1,5 pulgadas).
- Mantenga el termómetro en su lugar hasta que emita un pitido o durante aproximadamente un minuto.
- Toma la lectura y escríbela.
Existen termómetros de oído especiales que toman la lectura de la oreja del gato, pero no son tan efectivos ni confiables como los termómetros rectales.
Causas de temperatura corporal anormal en los gatos
Existen muchas causas posibles de anomalías en la temperatura corporal.
La temperatura corporal del gato es demasiado baja
Si la temperatura corporal de un gato es inferior a 100 °F (37,8 °C), es demasiado baja. Si toma la temperatura corporal de su gato y es tan baja, registre la temperatura corporal nuevamente 15 minutos después para garantizar una lectura precisa. Si sigue siendo baja, programe una cita urgente con su veterinario para que la revise.
Las posibles causas de una temperatura corporal baja incluyen debilidad general, enfermedad grave, exposición a temperaturas frías en el exterior (por ejemplo, en gatos que viven al aire libre) y niveles bajos de glucosa en sangre.
La temperatura corporal del gato es demasiado alta
Si la temperatura corporal de su mascota es superior a 103 °F (39,4 °C), es demasiado alta. Nuevamente, para asegurarse de que la lectura sea precisa, registre la temperatura corporal de su gato nuevamente 15 minutos después. Si sigue siendo demasiado alta, programe una cita con su veterinario para que la revise.
La causa más común de una temperatura alta es una reacción del sistema inmunológico que libera sustancias químicas en el torrente sanguíneo que elevan la temperatura por encima de lo normal.
Las posibles causas incluyen infecciones virales o bacterianas, neoplasia (cáncer) y dolor, así como otras afecciones médicas.
Las temperaturas más altas también pueden ser causadas por una actividad o ejercicio excesivo y por la exposición a altas temperaturas ambientales.
Finalmente, existe una condición específica conocida como "fiebre de origen desconocido" (FUO) que ocurre cuando no se puede identificar una causa subyacente de la temperatura alta que provoca la fiebre de un gato.
Otra información del termómetro
Vale la pena observar el aspecto de la punta del termómetro después de sacarlo del recto. Debe quedar solo una fina capa de heces, que se debe limpiar con un pañuelo húmedo o un algodón.
Verifique si hay un mayor nivel de “humedad”, que podría indicar diarrea, o cualquier signo de sangre o negrura (que indica sangre digerida), o moco excesivo, cualquiera de los cuales podría indicar algún tipo de trastorno digestivo.
Registro de otros signos vitales
Si la temperatura corporal es demasiado alta o demasiado baja, vale la pena evaluar también otros aspectos de los signos vitales de tu gato.
- Cuente la frecuencia respiratoria de su gato (midiendo el número de respiraciones en 15 segundos y multiplicándolo por cuatro).
- Mida la frecuencia cardíaca de su gato (sintiéndola a través de la pared torácica o tomándole el pulso y midiendo la cantidad de latidos en 15 segundos y luego multiplicándolos por cuatro).
Luego podrá informar a su veterinario de todos los signos vitales de su mascota: temperatura, frecuencia cardíaca y frecuencia respiratoria.
Tratamiento de la temperatura corporal alta o baja en gatos
No intente tratar usted mismo la temperatura corporal alta o baja de su gato. El uso de medicamentos de uso humano, como el paracetamol (Tylenol), es peligroso en los gatos y provoca reacciones tóxicas graves. En lugar de eso, lleve a su gato al veterinario de su zona.
Lo primero que hará tu veterinario será comprobar la temperatura corporal y los signos vitales de tu gato, además de realizar un examen físico detallado, buscando otros signos de mala salud como pérdida de peso.
Si el veterinario está preocupado, puede recomendar diversas pruebas, como análisis de sangre y orina, radiografías, ecografías y electrocardiogramas. Por lo general, se realizará un examen veterinario normal.
Este proceso debería permitir a su veterinario identificar la causa de la temperatura anormal de su gato, para que pueda administrarse el tratamiento adecuado.
Tratamiento de la temperatura corporal baja en gatos
Además de tratar la causa subyacente, es importante calentar al gato con temperatura corporal baja, ya sea en una habitación cálida, con calentadores o con el uso cuidadoso de almohadillas térmicas o bolsas de agua caliente (teniendo mucho cuidado de no quemar al gato manteniendo al menos tres capas de toalla entre la bolsa de agua caliente y el cuerpo del gato).
Tratamiento de la temperatura corporal elevada en gatos
El tratamiento de la causa subyacente de una temperatura corporal alta puede incluir antibióticos, medicamentos antiinflamatorios y otros medicamentos, según el problema específico. El golpe de calor, causado por una temperatura ambiental alta, requiere que se tomen medidas específicas. Se pueden administrar líquidos intravenosos a los gatos con temperatura alta para mantenerlos bien hidratados.
Es fácil aprender a medir la temperatura de su mascota, y esto puede actuar como una guía adicional útil para la salud de su mascota, además de proporcionar información útil que puede transmitir a su veterinario.