Temperatura corporal normal y anormal en los gatos

Compartir Email Pinterest Linkedin Twitter Facebook

Midiendo la temperatura de un gato.

Puedes medir fácilmente la temperatura corporal de tu gato, lo cual puede proporcionar información importante sobre su bienestar. La temperatura corporal es uno de los signos vitales clave en la salud de un gato, junto con la frecuencia cardíaca y la frecuencia respiratoria.

¿Cómo regulan los gatos su temperatura corporal?

La fisiología natural del cuerpo de un gato actúa para garantizar que el rango de temperatura se mantenga en niveles normales en todo momento. La temperatura solo cambia de este nivel normal debido a circunstancias específicas, como enfermedades o estrés.

  • Cuando un gato está en reposo, la temperatura corporal base tiende a ser baja, ya que el cuerpo está inactivo.
  • Cuando un gato se vuelve activo o está estresado, la temperatura corporal puede aumentar ligeramente, generalmente junto con la frecuencia respiratoria y la frecuencia cardíaca.

Además de esta variación fisiológica, si un gato sufre de diversas enfermedades, la temperatura corporal puede ser significativamente más alta o más baja.

Monitorear la temperatura corporal de tu gato puede ser una forma útil de comprobar su salud general. Si registras los signos vitales de tu gato de manera regular, esto puede ser útil para tu veterinario. En una situación de emergencia, medir la temperatura corporal puede ser útil para explicar en más detalle a tu veterinario lo que está ocurriendo con tu mascota.

La temperatura corporal normal de los gatos

Gato jugando en una manta.

La temperatura corporal se mide en grados Fahrenheit o en grados centígrados (Celsius). Esto se expresa como grados F o grados C. Fahrenheit se utiliza comúnmente en los Estados Unidos; en Europa y muchos otros países, es más probable que se use el centígrado.

La temperatura corporal normal de un gato tiende a mantenerse dentro de parámetros relativamente estrechos.

  • El rango normal de temperatura es entre 101 °F y 102.5 °F (38.3 °C a 39.2 °C).
  • Si la temperatura está por debajo de 100 °F (37.8 °C), es demasiado baja.
  • Si la temperatura supera los 103 °F (39.4 °C), es demasiado alta.

Estos niveles de temperatura no son absolutos, pero ofrecen una guía general útil.

¿Cómo medir la temperatura corporal del gato?

Comprobando la temperatura de un gato.

Para tomar la temperatura de tu gato, inserta suavemente un termómetro lubricado aproximadamente de 1 a 1.5 pulgadas en el recto.

Tomar la temperatura de un gato es fácil de hacer, y esta es una habilidad útil que todos los dueños de gatos deberían aprender. Aquí tienes cómo hacerlo de manera segura y precisa:

  1. Usa un termómetro digital rectal. Estos son económicos y están ampliamente disponibles.
  2. Lubrica la punta del termómetro digital con jabón, vaselina o un gel lubricante.
  3. No presiones con fuerza. Si el termómetro no entra fácilmente, no insistas.
  4. Inserta el termómetro a través del ano en el recto aproximadamente de 2 a 3 centímetros (alrededor de 1 a 1.5 pulgadas).
  5. Mantén el termómetro en su lugar hasta que emita un pitido, o durante aproximadamente un minuto.
  6. Toma la lectura y anótala.

Existen termómetros especiales para el oído que toman una lectura del oído del gato, pero no son tan efectivos ni confiables como los termómetros rectales.

Causas de temperatura corporal anormal en los gatos

Existen muchas causas posibles de anomalías en la temperatura corporal.

La temperatura corporal del gato es demasiado baja

Si la temperatura corporal de un gato es inferior a 100 °F (37.8 °C), está demasiado baja. Si tomas la temperatura corporal de tu gato y está tan baja, registra la temperatura nuevamente 15 minutos después para asegurar una lectura precisa. Si sigue baja, programa una cita urgente con tu veterinario para una revisión.

Las posibles causas de la baja temperatura corporal incluyen debilidad general, enfermedades graves, exposición a temperaturas frías en el exterior (por ejemplo, en gatos que están afuera) y niveles bajos de glucosa en sangre.

La temperatura corporal del gato es demasiado alta

Si la temperatura corporal de tu mascota es superior a 103 °F (39.4 °C), está demasiado alta. Nuevamente, para asegurar que la lectura sea precisa, registra la temperatura corporal de tu gato 15 minutos después. Si sigue demasiado alta, programa una cita con tu veterinario para una revisión.

La razón más común de una temperatura elevada es una reacción del sistema inmunológico que libera sustancias químicas en el torrente sanguíneo, elevando la temperatura por encima de lo normal.

Las posibles causas incluyen infecciones virales o bacterianas, neoplasia (cáncer) y dolor, así como otras condiciones médicas.

Las temperaturas más altas también pueden ser causadas por actividad o ejercicio excesivos y por la exposición a altas temperaturas ambientales.

Finalmente, una condición específica conocida como «fiebre de origen desconocido» (FUO) ocurre cuando no se puede identificar ninguna causa subyacente para la fiebre alta de un gato.

Otra información del termómetro

Es importante observar la apariencia de la punta del termómetro después de retirarlo del recto. Debe haber solo una fina capa de heces, que debes limpiar con un tejido húmedo o un algodón.

Verifica si hay un aumento en el nivel de “humedad”, lo cual podría indicar diarrea, o cualquier signo de sangre o color negro (indicando sangre digerida), o mucosidad excesiva, cualquiera de los cuales podría indicar algún tipo de trastorno digestivo.

Registro de otros signos vitales

Si la temperatura corporal está demasiado alta o demasiado baja, también es importante evaluar otros aspectos de los signos vitales de tu gato.

  • Cuenta la frecuencia respiratoria de tu gato (midiendo el número de respiraciones en 15 segundos y multiplicando por cuatro).
  • Mide la frecuencia cardíaca de tu gato (sintiendo el pulso a través de la pared del tórax o tomando el pulso, y midiendo el número de latidos en 15 segundos y luego multiplicando por cuatro).

Luego, puedes informar a tu veterinario sobre todos los signos vitales de tu mascota: temperatura, frecuencia cardíaca y frecuencia respiratoria.

Tratamiento de la temperatura corporal alta o baja en gatos

Examen de ecografía de un gato.

Si la temperatura corporal de tu gato está demasiado alta o baja, visita a tu veterinario para recibir un tratamiento adicional.

No intentes tratar la temperatura corporal baja o alta de tu gato por ti mismo. El uso de medicamentos destinados a humanos, como el acetaminofén (Tylenol), es peligroso en los gatos y puede causar reacciones tóxicas severas. En su lugar, lleva a tu gato a tu veterinario local.

Lo primero que hará tu veterinario será verificar la temperatura corporal y los signos vitales de tu gato, y realizar un examen físico detallado, buscando otros signos de mala salud, como pérdida de peso.

Si el veterinario está preocupado, puede recomendar diversas investigaciones, como análisis de sangre y orina, radiografías, ultrasonido y un electrocardiograma (EKG). Por lo general, se llevará a cabo un trabajo de medicina veterinaria normal.

Este proceso debería permitir que tu veterinario identifique la causa de la temperatura anormal de tu gato, para que se pueda administrar el tratamiento adecuado.

Tratamiento de la temperatura corporal baja en gatos

Además de tratar la causa subyacente, es importante calentar al gato con temperatura corporal baja, ya sea en una habitación cálida, con calentadores o con el uso cuidadoso de almohadillas térmicas o bolsas de agua caliente (teniendo mucho cuidado de no quemar al gato manteniendo al menos tres capas de toalla entre la bolsa de agua caliente y el cuerpo del gato).

Tratamiento de la temperatura corporal elevada en gatos

El tratamiento de la causa subyacente de una temperatura corporal alta puede incluir antibióticos, medicamentos antiinflamatorios y otros fármacos, dependiendo del problema específico. El golpe de calor, causado por altas temperaturas ambientales, requiere acciones específicas. Se pueden administrar fluidos intravenosos a los gatos con temperaturas elevadas para mantenerlos bien hidratados.

Es fácil aprender a medir la temperatura de tu mascota, y esto puede servir como una guía adicional útil para la salud de tu mascota, además de proporcionar información valiosa que puedes compartir con tu veterinario.

Avatar photo

Dr. Pete Wedderburn, DVM

El Dr. Pete Wedderburn se graduó como veterinario en Edimburgo en 1985 y ha dirigido su propio consultorio de cuatro veterinarios con animales de compañía en el condado de Wicklow, Irlanda, desde 1991. Pete es muy conocido como un veterinario de los medios con apariciones regulares en la televisión, la radio y los periódicos nacionales, incluidos una columna semanal en el Daily Telegraph desde 2007. Pete es conocido como "Pete el veterinario" en sus ocupadas páginas de Facebook, Instagram y Twitter, y publica periódicamente información sobre temas de actualidad y casos de la vida real de su clínica. También escribe un blog habitual en www.petethevet.com. Su último libro: “Pet Subjects”, fue publicado por Aurum Press en 2017.