Cisaprida para gatos: dosis, seguridad y efectos secundarios

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Imagen que muestra el uso de cisaprida en gatos.

Cisaprida es un fármaco que estimula el movimiento del sistema digestivo, favoreciendo el vaciado adecuado del estómago y el avance de los alimentos a lo largo del tracto gastrointestinal. Se utiliza principalmente para tratar el estreñimiento en gatos o una condición llamada megacolon.

Descripción general de cisaprida para gatos

Tipo de medicamento:
Agente procinético/pro-motilidad gastrointestinal oral
Forma:
Disponible únicamente en farmacias especializadas. Las presentaciones habituales son comprimidos, cápsulas y líquidos.
¿Se requiere receta médica?:
¿Aprobado por la FDA?:
No
Nombres de marca:
Ninguno
Nombres comunes:
Cisaprida
Dosis disponibles:
La cisaprida solo está disponible como medicamento compuesto, lo que permite diferentes tamaños de dosis o concentraciones líquidas según las instrucciones del veterinario prescriptor.
Rango de vencimiento:
El producto debe utilizarse antes de la fecha de vencimiento que figura en el envase. Muchos productos compuestos pueden tener una vida útil más limitada que otros medicamentos.

En este artículo, aprenderás más sobre cómo funciona la cisaprida, cómo se prescribe, los posibles efectos secundarios y algunas preguntas frecuentes.

Acerca de la cisaprida para gatos

La cisaprida se clasifica como un agente proquinético o estimulante del movimiento intestinal. Actúa como agonista de los receptores de serotonina (5-HT4) en el sistema digestivo. Esto provoca la contracción de los músculos lisos, facilitando el vaciado del estómago y favoreciendo el tránsito tanto del intestino delgado como del grueso.

¿Qué hace la cisaprida en los gatos?

La cisaprida resulta eficaz para tratar gatos con estreñimiento recurrente y aquellos que padecen megacolon. El megacolon se presenta cuando los nervios y músculos del colon dejan de funcionar correctamente.

Esto puede deberse a un daño directo en los nervios o surgir en gatos con estreñimiento crónico u obstrucción fecal, donde el colon se ha estirado tanto que su función muscular queda gravemente afectada.

Al estimular los músculos lisos de la pared del colon, la cisaprida facilita el movimiento de las heces, evitando que se acumulen y que el estreñimiento o la obstrucción empeoren.

Efectos secundarios de la cisaprida en gatos

Por suerte, en gatos los efectos secundarios son pocos. Los más comunes suelen ser vómitos ocasionales, diarrea o cólicos abdominales, causados por la estimulación de los músculos lisos intestinales.

Dado que la cisaprida acelera el movimiento y empuja el contenido digestivo, es fundamental que se use solo cuando no haya ninguna obstrucción activa.

Por ejemplo, si un gato presenta obstipación o bloqueo fecal, primero debe resolverse ese problema antes de iniciar el tratamiento con cisaprida. Usar un agente proquinético en presencia de una obstrucción puede agravar la situación y aumentar el riesgo de perforación intestinal.

También se debe tener precaución en mascotas con enfermedades hepáticas o signos de sangrado en el tracto digestivo, ya sea sangre fresca o heces oscuras y pegajosas.

En humanos, la cisaprida se retiró del mercado debido a que podía causar arritmias, un tipo de ritmo cardíaco anormal. No obstante, este efecto no ha sido reportado en pacientes veterinarios, incluidos los gatos.

Aun así, en gatos con problemas cardíacos previos es recomendable realizar chequeos regulares de su ritmo y frecuencia cardíaca durante el tratamiento.

El uso en gatas embarazadas o en período de lactancia debe ser muy cuidadoso.

La toxicidad es rara si la dosis se administra correctamente. En casos de sobredosis, los síntomas más comunes son diarrea, letargo, movimientos anormales o falta de equilibrio, salivación excesiva, aumento de temperatura corporal y agitación.

Si sospechas una sobredosis, es importante contactar de inmediato a un centro veterinario de consulta toxicológica disponible 24 horas, como el ASPCA Animal Poison Control (1-888-426-4435) o el Pet Poison Helpline (1-855-764-7661). Aunque tienen un costo, el veterinario necesitará la orientación del toxicólogo para establecer un plan de tratamiento adecuado.

Por último, la cisaprida puede interactuar con varios otros medicamentos. Siempre informa a tu veterinario sobre cualquier tratamiento que esté recibiendo tu gato antes de comenzar con cisaprida.

Dosis de cisaprida para gatos

Dosis de cisaprida para gatos

La dosis varía según la condición y la respuesta del gato, por eso es importante consultar a tu veterinario y seguir sus indicaciones.

La cisaprida no se encuentra disponible en farmacias comerciales. Debido a que en humanos puede causar arritmias —aunque no se ha comprobado en animales— fue retirada del mercado para uso humano.

Por esta razón, solo puede obtenerse mediante farmacias de formulación personalizada. La dosis varía según la condición y la respuesta, por lo que tu veterinario será quien mejor determine la cantidad inicial y cómo ajustarla.

Conclusión

La cisaprida puede ser un medicamento útil para algunos gatos con estreñimiento o megacolon. Es relativamente segura cuando se usa bajo las condiciones adecuadas y no presenta en animales el efecto secundario preocupante de arritmias que se observa en humanos.

No obstante, al no estar disponible comercialmente y requerir formulación personalizada, solo puede ser recetada por un veterinario que conozca bien la situación particular de tu gato.

Aviso sobre dosis: Solo proporcionamos dosis para medicamentos aprobados por la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, por sus siglas en inglés) para uso en gatos, siguiendo estrictamente las indicaciones del prospecto. En el caso de medicamentos fuera de etiqueta, ofrecemos únicamente pautas y recomendaciones de seguridad. La dosis segura y adecuada en estos casos debe determinarla siempre un veterinario de atención primaria.

Te recomendamos trabajar de la mano con tu veterinario para evaluar si un medicamento es adecuado para tu gato. Modificar o ajustar la dosis por cuenta propia sin consultar a un especialista puede ser riesgoso. No fomentamos el uso de medicamentos destinados a humanos en mascotas sin la supervisión de un veterinario.

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Dr. Chris Vanderhoof, DVM, MPH

El Dr. Chris Vanderhoof se graduó en 2013 de la Facultad de Medicina Veterinaria de Virginia-Maryland (VMCVM) en Virginia Tech, donde también obtuvo una Maestría en Salud Pública. Completó una pasantía rotativa en el Hospital Veterinario Red Bank en Nueva Jersey y ahora trabaja como médico general en el área de Washington DC. El Dr. Vanderhoof también es redactor especializado en el campo de la salud animal y fundador de Paramount Animal Health Writing Solutions, que se puede encontrar en www.animalhealthcopywriter.com. El Dr. Vanderhoof vive en el área del norte de Virginia con su familia, incluidos 3 gatos.