Denamarin, creado por Nutramax, es un suplemento empleado en medicina veterinaria para proteger el hígado y favorecer su buen funcionamiento. Aquí descubrirás cuáles son sus ingredientes, cómo benefician la salud hepática, detalles clave sobre la dosificación y respuestas a las dudas más comunes.
Descripción general de Denamarin para gatos
Acerca de Denamarin para gatos
Denamarin es un suplemento para la salud hepática que combina dos ingredientes principales: s-adenosilmetionina (SAMe) y silibina.
Aunque se considera un nutracéutico más que un medicamento, Denamarin se emplea ampliamente en veterinaria como tratamiento complementario para distintas enfermedades del hígado, así como para mascotas que reciben medicación prolongada que puede afectar o dañar la función hepática con el tiempo.
La SAMe es un compuesto natural producido por las células del cuerpo. Participa en tres rutas metabólicas clave que el hígado utiliza para su correcto funcionamiento.
La silibina es el principal componente activo de la silimarina, un extracto natural del cardo mariano. Su acción protectora sobre el hígado se basa principalmente en impedir que las toxinas penetren en las células hepáticas. Además, bloquea los efectos tóxicos e inflamatorios, y funciona como antioxidante y eliminador de radicales libres.
Los radicales libres son átomos inestables que circulan por el organismo causando daño celular. Los antioxidantes, como los eliminadores de radicales libres, se unen a estos átomos para neutralizarlos. Muchos compuestos naturales tienen esta capacidad.
Aunque tanto la SAMe como la silimarina pueden encontrarse por separado como suplementos, la combinación específica y la dosificación para mascotas es exclusiva del producto Denamarin.
¿Qué hace Denamarin en los gatos?

Denamarin protege las células del hígado frente a toxinas y daños inflamatorios, además de mejorar su funcionamiento.
Los ingredientes de Denamarin protegen las células hepáticas de toxinas y daños inflamatorios gracias a la acción de la silibina, mientras que la SAMe mejora la función del hígado al intervenir en procesos metabólicos clave.
Denamarin suele recomendarse como parte del tratamiento en diversas situaciones que afectan al hígado. En gatos, esto incluye casos con elevación de enzimas hepáticas detectadas en análisis de sangre, como colangitis o colangiohepatitis, lipidosis hepática y la enfermedad o triaditis felina.
También se utiliza en el manejo de intoxicaciones que afectan al hígado, como las causadas por acetaminofén. Algunos medicamentos indispensables para tratar ciertas enfermedades pueden ejercer presión adicional sobre el hígado, y Denamarin ayuda a protegerlo mientras se administra ese tratamiento.
Efectos secundarios de Denamarin en gatos
Afortunadamente, los efectos secundarios de Denamarin son mínimos. Los estudios de toxicidad no han mostrado reacciones adversas en mascotas con las dosis habituales, y una sobredosis rara vez provoca problemas graves. En humanos, los efectos secundarios de la SAMe son poco comunes, aunque se han reportado vómitos y pérdida de apetito.
Ten en cuenta que al darle una tableta a un gato, puede generarse rechazo, ya sea por el medicamento en sí o por la forma de administrarlo. Algunos gatos pueden presentar salivación excesiva, esconderse o, en casos poco frecuentes, vomitar.
Esto no se considera una reacción verdadera al medicamento, pero si tienes dudas sobre una posible toxicidad, contacta al Centro de Control de Envenenamientos de la ASPCA (1-888-426-4435) o a Pet Poison Helpline (1-855-764-7661) para recibir orientación.
Aunque los productos naturales suelen ser muy seguros, la SAMe y la silibina no han sido estudiadas en gatas embarazadas o lactantes, por lo que Denamarin debe usarse con precaución en estas felinas.
Dosis de Denamarin para gatos

Denamarin se administra con el estómago vacío, aunque si es necesario puedes ocultar la tableta en una pequeña porción de comida.
Para gatos, solo existe una presentación de Denamarin: la fórmula para gatos y perros pequeños, que contiene 90 mg de SAMe y 9 mg de silibina.
Por lo general, las tabletas se administran una vez al día según las indicaciones del fabricante. Sin embargo, en ciertos casos se ha observado que dosis mayores de SAMe y silibina pueden ser más efectivas que las recomendadas en la etiqueta de Denamarin.
Algunos pacientes que usan Denamarin a largo plazo también pueden seguir beneficiándose con una dosis cada dos o tres días. Por eso es fundamental seguir al pie de la letra las indicaciones del veterinario.
Las tabletas deben mantenerse en su empaque original hasta el momento de usarlas y no deben partirse ni triturarse; es decir, no debes dividir las dosis mayores formuladas para perros para administrarlas a un gato.
Denamarin debe darse con el estómago vacío, preferiblemente una hora antes o dos horas después de la comida.
Dar la pastilla seca suele ser complicado en gatos. Tras administrar Denamarin, puedes darle de 3 a 6 mililitros de agua para facilitar que la tableta llegue al estómago. Si es necesario, también puedes ocultarla en una pequeña cantidad de alimento o en un producto diseñado para esconder pastillas y facilitar la administración.
Aunque SAMe y silibina o silimarina (extraída del cardo mariano) están disponibles en suplementos para humanos, estos varían mucho en concentración de ingredientes activos y no están pensados para mascotas.
Denamarin está especialmente formulado para animales. Siempre consulta con tu veterinario antes de darle cualquier suplemento a tu gato.
Conclusión

Es normal que algunos gatos babeen un poco cuando están muy relajados y contentos.
Denamarin para gatos es un nutracéutico muy útil y forma parte fundamental del arsenal de todo veterinario para tratar enfermedades hepáticas o intoxicaciones que afectan al hígado. Su uso suele ser seguro, aunque administrarlo con el estómago vacío puede resultar complicado para algunos felinos.
Las dosis efectivas pueden variar según la condición, por lo que es esencial seguir al pie de la letra las indicaciones del veterinario.
Aviso sobre dosificación: Solo ofrecemos dosis para medicamentos aprobados por la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, por sus siglas en inglés) para uso en gatos, siguiendo las indicaciones del envase. En casos de uso fuera de etiqueta, solo brindamos pautas y datos de seguridad; la dosis correcta solo puede determinarla el veterinario de cabecera.
Te recomendamos trabajar siempre con tu veterinario para decidir si un medicamento es adecuado para tu gato. Modificar o ajustar dosis por cuenta propia implica riesgos. No aconsejamos usar medicamentos para humanos en mascotas sin antes consultar a un profesional.