¿Alguna vez te has preguntado si los gatos pueden comer queso?
Tal vez tu gato haya probado un poco de tu sándwich de queso cheddar a la parrilla, o tal vez hayas usado un poco de queso crema para que tu gato se trague una pastilla. Antes de darle a tu gato cualquier alimento nuevo para humanos, siempre es buena idea investigar un poco para asegurarte de que sea seguro.
Muchos alimentos humanos son seguros para los gatos y algunos incluso pueden ser beneficiosos si se les ofrecen con moderación. Sin embargo, algunos «alimentos para personas» no son adecuados para los gatos, ya que pueden causar problemas digestivos, como diarrea o vómitos, o resultar tóxicos para ellos.
¿Es seguro alimentar a los gatos con queso?
Lamentablemente, no hay muchos beneficios en alimentar a los gatos con queso. Si bien el queso de cualquier tipo (ya sea cheddar, suizo, mozzarella o parmesano) puede ser una fuente saludable de proteínas para los humanos, el queso no es adecuado para las necesidades nutricionales de un gato.
Debido a que los gatos son carnívoros obligados (lo que significa que la mayor parte de su dieta debe estar compuesta de carne), se benefician más de los alimentos con alto contenido de proteínas, pero bajos en grasas y carbohidratos.
Esto es especialmente cierto en el caso de los gatos domésticos, que tienden a tener necesidades calóricas generales más bajas, por lo que no deberían comer alimentos con un alto contenido de grasa. El queso es alto en contenido proteínico, pero también contiene mucha grasa.
¿El queso es malo para los gatos?
Aunque hace décadas se pensaba que uno de los mejores snacks para un gato era un bol de leche, ahora sabemos que los gatos no digieren bien los lácteos. De hecho, la intolerancia a la lactosa es algo muy común en los gatos.
Los gatos intolerantes a la lactosa no digieren el azúcar que se encuentra en la leche y otros productos lácteos como el yogur y el queso. Si un gato come leche, puede sufrir un gran malestar estomacal, con diarrea y, a veces, vómitos.
Algunos gatos pueden tolerar bien la leche, pero aun así no es bueno alimentarlos con mucha leche desde el punto de vista nutricional.
Aunque el queso suele tener menos lactosa que la leche de vaca (los quesos duros tienen menos lactosa que los quesos blandos), el queso tiene el potencial de causar malestar estomacal a los gatos. Si combinamos el contenido de lactosa del queso con el hecho de que tiene un alto contenido de grasas y calorías, todo se convierte en una mala opción de refrigerio para gatos.
¿Cómo alimentar a tu gato con queso de forma segura?
Los dueños de gatos no deberían optar por alimentar a sus gatos con queso de forma regular porque no es saludable para ellos, pero el queso en sí no es tóxico ni venenoso para los gatos.
De hecho, algunas premios comerciales para gatos tienen sabor a queso, aunque hayan sido elaboradas específicamente para ellos.
Aunque debes tratar de mantener el queso alejado de tu gato, si roba un pequeño trozo de queso de tu sándwich o lame un poco de requesón de tu plato, no te preocupes, no es probable que cause demasiados problemas.
Haz lo posible por mantener el queso fuera de la dieta de tu gato. Además del malestar estomacal que puede causar, el exceso de calorías y el alto contenido de grasa del queso pueden contribuir a la obesidad, que es un problema grave en los gatos.
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Si tu gato come una gran cantidad de queso, vigílalo de cerca para detectar problemas digestivos como diarrea o vómitos. Si tu gato parece estar muy enfermo después de comer una gran cantidad de queso, comunícate con tu veterinario para preguntarle si debe examinarlo.
Hay un caso en el que darle a tu gato un poco de queso no debería ser un problema. Es bien sabido que es muy difícil darle una pastilla a un gato.
Si tu gato necesita tomar algún medicamento temporalmente y le gusta mucho el queso, está bien envolver la pastilla en un trocito de queso (algunos buenos tipos de queso para esto incluyen el queso crema o algún otro queso blando) para que tome el medicamento fácilmente. Solo asegúrate de no excederte y si tu gato parece sufrir algún efecto nocivo a causa del queso, prueba con otra cosa, como un trocito de fiambre bajo en sodio.
Queso para gatos: no es una buena idea
Aunque los gatos pueden disfrutar de forma segura de pequeñas cantidades de muchos alimentos humanos como golosinas saludables, lamentablemente el queso no es una buena opción para tu amigo peludo. Algunas mejores opciones de golosinas para gatos incluyen golosinas comerciales para gatos, trocitos de atún enlatado, huevos revueltos o duros o pollo cocido simple.
Consulta siempre con tu veterinario antes de darle a tu gato cualquier alimento nuevo y asegúrate de no exagerar con los premios, ya que no deben representar más del 10 % de la ingesta total de alimento de un gato durante el día, y el resto debe provenir de su alimento para gatos completo y equilibrado.
Preguntas frecuentes
¿Qué pasa si los gatos comen queso?
El queso puede alterar el sistema digestivo del gato, lo que puede provocar diarrea y, posiblemente, vómitos. Además, tiene un alto contenido de grasas y calorías, y puede contribuir a un aumento de peso no deseado en los gatos.
¿Cuánto queso pueden comer los gatos?
Los gatos no deberían comer queso. Pequeñas cantidades de queso, como las que usarías para esconder una pastilla, probablemente estén bien, pero el queso no es una opción saludable para los gatos.
¿Puede el queso matar gatos?
El queso no es tóxico para los gatos. Si un gato come queso, es poco probable que muera por ello. Sin embargo, se debe evitar alimentar a los gatos con queso siempre que sea posible, ya que no es un alimento saludable para ellos.