Abscesos en gatos: causas, síntomas y tratamiento

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Gato con abscesos

Los abscesos son frecuentes en gatos. En este artículo te explicaré todo lo que debes saber sobre ellos, así como las consecuencias que pueden afectar la salud de tu gato.

¿Qué es un absceso?

Un absceso es una acumulación de pus bajo la piel que genera una inflamación llena de líquido, conocida también como bolsa de pus. Los tejidos alrededor de esta zona suelen estar inflamados, doloridos y con un cambio de coloración.

¿Qué causa un absceso?

Un absceso se forma cuando una infección bacteriana se introduce debajo de la piel. Las bacterias se multiplican, lo que activa la respuesta inflamatoria del sistema inmunitario, y esta reacción produce pus, un líquido que provoca la inflamación y el crecimiento del absceso.

El pus es un líquido espeso y maloliente, de color amarillo, verde, marrón o rojizo, opaco, compuesto por glóbulos blancos, bacterias y restos celulares, junto con fluidos que provienen de los vasos sanguíneos y tejidos cercanos.

En los gatos, la causa más común de un absceso es una pelea. Sus dientes y uñas albergan bacterias que, al perforar la piel durante una pelea, quedan alojadas bajo la superficie. El cuerpo reacciona para defenderse y esto da lugar a la acumulación de pus que conocemos como absceso.

Otra causa menos frecuente son los abscesos dentales, cuando se expone la raíz de un diente y se infecta.

En ocasiones poco comunes, un absceso puede formarse dentro de una cavidad corporal, por ejemplo, después de una cirugía o una herida penetrante.

¿Cuáles son los signos de un absceso?

Hay cinco señales principales que indican un absceso:

  1. Una inflamación en la piel, que suele aparecer en la cabeza, cuello, patas, cola o parte baja de la espalda.
  2. La piel sobre esa zona cambia de color, mostrando tonos amarillentos, morados o rojizos.
  3. Puede haber una herida punzante o una pequeña costra en el área del absceso; a veces, de ahí sale pus.
  4. La zona alrededor de la inflamación suele ser dolorosa, lo que puede hacer que tu gato cojee.
  5. Tu gato puede mostrarse apagado y sin ganas; además, es común que presente fiebre.

¿Cómo realiza un veterinario el diagnóstico de un absceso?

1. Toma de historia clínica detallada

Gato con abscesos durmiendo

Tu veterinario recopilará información detallada sobre la rutina y hábitos de tu gato para entender mejor qué está sucediendo.

Tu veterinario analizará cada detalle del estilo de vida de tu gato y evaluará su estado general de salud. Varios factores son clave en esta valoración: por ejemplo, los gatos mayores suelen presentar más problemas que los jóvenes; los que salen al exterior tienen mayor riesgo de abscesos que los que solo permanecen dentro de casa; y aquellos que suelen pelear con otros gatos están más expuestos a este tipo de lesiones.

2. Examen físico

Cualquier estudio sobre un problema en tu gato comienza con un examen físico minucioso y detallado. El veterinario revisará todo el cuerpo de tu mascota con atención, palpando para detectar cualquier anomalía.

Por lo general, esto incluye tomar la temperatura, auscultar el pecho con un estetoscopio y pesar al gato. La zona inflamada se examinará cuidadosamente, y es probable que se recorte el pelo alrededor para observar mejor la piel.

3. Análisis de sangre y orina de rutina

Tu veterinario puede decidir hacer o no análisis de sangre, que incluyen pruebas diagnósticas básicas como hematología (conteo sanguíneo) y perfiles bioquímicos (con electrolitos). También podría recomendar un análisis simple de orina.

Este conjunto de pruebas se conoce como la base mínima y se realiza para evaluar a la mayoría de los gatos enfermos, sin importar los síntomas. Proporciona información valiosa sobre el estado general de salud de tu gato.

Además, podrían sugerir pruebas específicas para detectar el virus de la leucemia felina (FeLV) y el virus de la inmunodeficiencia felina (VIF), ya que estos virus pueden estar relacionados con una mayor frecuencia de abscesos en algunos gatos.

4. Otros trabajos de laboratorio

En algunos casos, se puede tomar una muestra de pus para enviarla al laboratorio y hacer un cultivo bacteriano, que también incluye pruebas para identificar qué antibióticos son efectivos. No es algo que se haga siempre, pero en ciertas situaciones el veterinario considerará que es necesario.

Se pueden detectar distintos tipos de bacterias, como fusobacterium, clostridium, bacteroides, corynebacterium, pseudomonas, mycoplasma, nocardia, actinomyces, pasteurella multocida, bartonella, escherichia coli, estafilococos, estreptococos, entre otras.

Cada bacteria puede requerir un tratamiento específico con antibióticos adecuados para su eliminación.

5. Pruebas adicionales

En raras ocasiones, podrían recomendar radiografías o ecografías para examinar ciertas áreas del cuerpo de tu gato, especialmente si el absceso parece afectar tejidos o estructuras cercanas.

¿Cuánto cuesta tratar un gato con un absceso?

veterinario revisando gato

Tu veterinario tomará los signos vitales de tu gato y lo palpará por todo el cuerpo durante el examen.

El costo de tratar un absceso varía según su ubicación y gravedad. Puede ser menos de $ 150 USD si el absceso es simple y de fácil tratamiento, o superar los $ 2,000 si se presenta un caso complicado.

¿Cómo se tratan los abscesos?

El tratamiento de los abscesos comienza con recortar el pelo alrededor para evitar que se acumule el material infectado. Luego, el veterinario abrirá el absceso para permitir que el pus drene correctamente, lo que suele requerir sedación o anestesia general.

Después de drenar el pus, se lava la cavidad con solución salina estéril para facilitar que el líquido siga saliendo. En algunos casos, basta con abrir el absceso; en otros, se coloca un drenaje de látex que se fija con puntos y permanece entre dos y cinco días.

Es fundamental limpiar regularmente el área alrededor de la apertura para evitar que se acumule pus y suciedad. Se suelen recetar antibióticos para frenar el crecimiento de las bacterias. Además, el gato debe recibir analgésicos, ya que los abscesos causan mucho dolor.

Tu veterinario podría recomendar un collar isabelino para evitar que el gato se lama o muerda la zona y para que no retire el drenaje si está colocado.

Según dónde vivas, también revisarán que tu gato tenga la vacuna contra la rabia al día, ya que esta enfermedad se transmite por mordeduras.

Seguimiento y pronóstico

Limpieza veterinaria de abscesos en gatos

Tu veterinario querrá revisar a tu gato en citas de seguimiento para asegurarse de que el absceso esté sanando correctamente.

El nivel de seguimiento varía según cada caso, pero en general, los gatos con abscesos requieren revisiones periódicas (por ejemplo, cada dos o tres días) para que el veterinario confirme que la recuperación avanza hasta que estén completamente sanos. Estas revisiones minuciosas reducen las posibilidades de que el absceso reaparezca.

El pronóstico suele ser favorable, aunque tu veterinario es quien podrá darte la información más precisa sobre la situación de tu gato.

En resumen

Los abscesos son comunes en los gatos que pasan tiempo al aire libre, generalmente después de peleas entre gatos y heridas por mordeduras. Son un problema grave, pero generalmente responden bien a un tratamiento simple por parte del veterinario.

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Dr. Pete Wedderburn, DVM

El Dr. Pete Wedderburn se graduó como veterinario en Edimburgo en 1985 y ha dirigido su propio consultorio de cuatro veterinarios con animales de compañía en el condado de Wicklow, Irlanda, desde 1991. Pete es muy conocido como un veterinario de los medios con apariciones regulares en la televisión, la radio y los periódicos nacionales, incluidos una columna semanal en el Daily Telegraph desde 2007. Pete es conocido como "Pete el veterinario" en sus ocupadas páginas de Facebook, Instagram y Twitter, y publica periódicamente información sobre temas de actualidad y casos de la vida real de su clínica. También escribe un blog habitual en www.petethevet.com. Su último libro: “Pet Subjects”, fue publicado por Aurum Press en 2017.