10 maneras sencillas de hacer una cerca a prueba de gatos

El exterior nunca es un lugar totalmente seguro para tu gato. Por eso, es normal que te preocupe darle libertad para explorar el jardín o el patio. Afortunadamente, existen muchas formas de crear un espacio adecuado para tu felino, incluyendo una cerca a prueba de escapes. Así, podrás brindarle un entorno seguro y cerrado donde pueda curiosear sin el riesgo de alejarse y exponerse a peligros.

Una cerca es la mejor opción para mantener a tu gato dentro del jardín. Descubre algunas formas sencillas de hacerla a prueba de escapes.

1. Asegúrate de que la cerca tenga la altura adecuada

Los gatos son excelentes saltadores, por lo que es necesaria una cerca lo suficientemente alta para evitar que tu gato salte por encima de ella.

La organización iCat Care recomienda una cerca de 1.80 metros de altura para evitar que tu gato escape del jardín. Los postes que la sostienen deben medir al menos 2.30 metros para asegurar una instalación firme y sin espacios en la base.

Si planeas construir una cerca nueva de esta altura, es importante hablar con tus vecinos para evitar inconvenientes. Además, revisa las normativas locales, ya que en algunos lugares las cercas superiores a 2 metros pueden requerir un permiso especial.

En ciertos edificios o desarrollos habitacionales podrían existir otras reglas que limiten la instalación de cercas, por lo que es recomendable informarse antes de comenzar.

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2. Rellena los huecos

Los gatos pueden pasar incluso por huecos muy pequeños si no están bloqueados.

Los gatos son ágiles y pueden colarse por los huecos más pequeños. Antes de dejarlos salir, revisa la cerca para asegurarte de que no haya espacios por donde puedan escaparse, especialmente en la base, entre la cerca y el suelo.

Cierra o repara cualquier abertura para evitar fugas. Puedes hacerlo clavando tablas sobre los paneles existentes, reemplazando los dañados o añadiendo malla metálica para cubrir los espacios. Esto también ayudará a mantener alejados a otros animales.

No olvides revisar puertas y accesos al jardín. Una opción es cubrir la parte trasera de la puerta con malla de gallinero o alambrado fino de un máximo de 2.5 cm. Además, sella cualquier espacio en la base de la cerca, ya sea elevando el nivel del suelo, colocando malla o añadiendo una tabla extra en la parte inferior de la puerta.

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3. Elige un material adecuado

Materiales como alambre, red, vinilo y madera son opciones populares para cercas a prueba de gatos.

Elige un material de cercado que sea asequible, duradero y fácil de mantener. El más común es el de madera, ya que proporciona mucha privacidad y suele durar si se mantiene. Evita el alambre de gallinero o el de malla, a menos que lo uses para rellenar el hueco de una cerca de listones, como se mencionó anteriormente. Este tipo de cercado por sí solo es muy fácil de agarrar y trepar para tu gato, incluso si mide 1.80 m de alto.

Los dueños de gatos suelen utilizar vallas de vinilo porque el vinilo es una superficie a la que el gato no puede agarrarse. Además, el vinilo es resbaladizo, por lo que los gatos no pueden treparlo. Y, por último, las vallas de vinilo suelen estar disponibles en colores atractivos, lo que las convierte en una opción popular.

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4. Instala un remate de cerca a prueba de gatos

Las cercas de malla, red y enrejado deben ser lo suficientemente pequeñas para que un gato no pueda pasar a través de ellas.

Si no quieres reemplazar tu cerca y prefieres adaptar la que ya tienes, un protector superior puede ser la solución. Estos aumentan la altura y dificultan que tu gato salte. Una opción sencilla de instalar es una barrera de malla flexible en la parte superior.

Asegúrate de que la malla tenga aberturas de un máximo de 2.5 cm. Si son más grandes, tu gato podría meter la cabeza y lastimarse. También puedes añadir cercado decorativo para aumentar la altura hasta 1.80 metros y mejorar la apariencia del jardín. Solo verifica que no tenga huecos por donde pueda pasar.

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5. Instala un rodillo de cerca a prueba de gatos

Los gatos pueden intentar trepar una valla, pero con el material y la construcción adecuados, cuando aprenden que no pueden treparla, dejarán de intentarlo.

Los rodillos para cercas son tubos de metal o PVC que se colocan a lo largo del borde superior de la cerca y ruedan cuando alguien los toca. Esta es una buena solución para adaptar las cercas existentes y hacerlas a prueba de gatos. Tu gato no podrá agarrarse a ellas si intenta saltar. También aprenderá pronto que no puede trepar la cerca con éxito y desistirá de intentarlo.

6. Cercas curvas

Reduce la posibilidad de que tu gato escale la valla al no dejarle ningún lugar donde posarse.

Si vas a instalar una cerca nueva antes de la llegada de tu gato, elige un diseño con la parte superior curvada. Este tipo de cercado es un gran disuasivo, ya que les resulta difícil saltar, aterrizar o caminar sobre él. Además, ayudará a mantener alejados a los gatos del vecindario.

7. Crear salientes

Los aleros de plantas son atractivos y funcionan bien para evitar que los gatos pasen por encima de una cerca.

Cualquier elemento que sobresalga del borde superior de la cerca desalentará a tu gato de intentar saltar, ya que no verá una superficie segura para aterrizar o caminar. Puedes usar trozos de cercado para crear un voladizo o darle un toque decorativo con macetas y plantas colgantes, logrando así una barrera efectiva y estéticamente agradable.

8. Mantener la cerca en buen estado

A los gatos les encanta poder expresar sus instintos al aire libre, como cazar y trepar.

Mantener tu cerca en buen estado evitará la descomposición o daños que puedan generar agujeros lo suficientemente grandes para que tu gato se escape. La madera debe tratarse con productos seguros para mascotas, y cualquier agujero en el alambrado debe repararse.

Retira siempre astillas sueltas o alambres del cercado, y asegúrate de que no haya clavos saliendo que puedan lastimar a tu gato si intenta trepar. Un buen mantenimiento garantizará que tu cerca a prueba de gatos se mantenga en buenas condiciones por mucho tiempo, evitando reparaciones o reemplazos frecuentes.

9. Construye un catio

Los catios son la solución ideal para que tu gato disfrute del exterior de manera segura.

La mejor manera de garantizar la seguridad de tu querido gato en el jardín es instalar un espacio cerrado diseñado específicamente para ellos, conocido como “catio”. Con un catio, tu gato podrá disfrutar del aire libre mientras tú te sientes tranquilo sabiendo que está a salvo. No tendrás problemas con permisos de construcción, pero es importante asegurarte de que sea resistente a la intemperie y lo suficientemente amplio para que tu gato pueda correr y trepar.

Puedes proporcionar acceso a través de una trampilla para gatos o una ventana, o crear áreas cerradas y protegidas dentro del espacio. Generalmente, estos recintos se construyen con malla metálica y pueden tener un techo de PVC o de malla. La malla debe tener aberturas de una pulgada o menos para evitar que tu gato pueda meter la cabeza, y debe estar sostenida por estructuras fuertes y estables.

10. Compra una cerca para gatos especialmente diseñada para ser instalada

La estimulación al aire libre es saludable y enriquecedora para los gatos.

Si buscas una solución específicamente diseñada para evitar que tu gato se escape, existen cercas especializadas en hacer tu jardín a prueba de gatos. Incluso hay empresas que pueden acudir a tu hogar, presentarte diferentes opciones y construir la cerca perfecta para mantener a tu gato seguro.

Reflexiones finales

Explorar es una parte natural de ser un gato, por lo que un área segura al aire libre les resulta estimulante y agradable.

A los gatos les encanta explorar el exterior. Es beneficioso para ellos tener acceso a un espacio al aire libre seguro donde puedan exhibir comportamientos naturales como cazar y trepar. Sin embargo, dejar que tu querido gato explore afuera puede generar mucha preocupación, especialmente si vives en una zona transitada o cerca de una carretera.

Hacer tu cerca a prueba de gatos es la mejor forma de garantizar que se mantengan seguros en tu jardín. Una cerca de 1.80 metros o una cerca elevada a esa altura con un protector superior u otras adaptaciones evitará que se escalen y se escapen. También puedes construir un catio para tener la tranquilidad total de que tu gato está a salvo.

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