La mirtazapina es un estimulante del apetito que se receta frecuentemente en medicina veterinaria para gatos, con el fin de aumentar su interés por la comida, mejorar la ingesta y favorecer el aumento de peso.
Entre las marcas más conocidas están Remeron y Mirataz. En este artículo descubrirás qué es la mirtazapina, cómo actúa, las diferentes presentaciones que existen, los efectos secundarios a vigilar y las dudas más comunes sobre su uso.
Descripción general de mirtazapina para gatos
Acerca de la mirtazapina para gatos
La mirtazapina se clasifica como un antagonista de receptores de serotonina y un antidepresivo tetracíclico. En gatos, no se utiliza para tratar problemas de comportamiento, sino por su capacidad para estimular el apetito y favorecer la alimentación.
La norepinefrina (NE) es un neurotransmisor que, entre otras funciones, actúa en ciertos receptores del cuerpo para aumentar el apetito. La mirtazapina bloquea los receptores que normalmente frenan la liberación de NE, lo que provoca un aumento de este neurotransmisor y, en consecuencia, mayor deseo de comer.
Además, la mirtazapina bloquea algunos receptores de serotonina, lo que le otorga un efecto anti-náuseas y antiemético (evita el vómito).
Actualmente, la mirtazapina se encuentra disponible en tabletas genéricas y en la presentación tópica transdérmica bajo la marca Mirataz, que se aplica en la piel del lado interno del pabellón auricular.
¿Qué hace la mirtazapina en los gatos?
Los veterinarios han utilizado mirtazapina durante muchos años para estimular el apetito de los gatos. Esto puede aplicarse a gatos con poco apetito, como gatitos con enfermedad renal crónica (ERC) o gatos con otras afecciones que provocan pérdida de peso y en los que queremos estimular una mayor ingesta de calorías.
Efectos secundarios de la mirtazapina en gatos

La mirtazapina puede causar hipersalivación (babeo) y sedación (somnolencia excesiva) en los gatos.
La mirtazapina suele ser bien tolerada en gatos, pero hay algunos efectos secundarios que debes conocer y vigilar.
Al actuar también como bloqueador de histamina, puede causar sedación, especialmente con dosis elevadas.
El efecto secundario más común después de la somnolencia es el aumento en la vocalización, que se presenta en aproximadamente la mitad de los gatos. La agitación y problemas digestivos como el vómito ocurren en entre el 25 % y el 33 % de los casos.
Alrededor del 10 % de los gatos pueden mostrar problemas al caminar, inquietud o hiperactividad, y salivación excesiva. Otros efectos menos frecuentes, que afectan a un 10 % o menos, incluyen aumento de la frecuencia respiratoria y cardíaca, pérdida de apetito, desorientación, eliminación inapropiada, temblores y conductas para esconderse.
Los estudios indican que al usar dosis bajas, los efectos negativos disminuyen.
En cuanto a Mirataz, la presentación tópica, cerca del 10 % de los gatos pueden presentar reacciones en el lugar donde se aplica en la parte interna de la oreja, tales como enrojecimiento, formación de costras o residuos.
Según reportes al Centro de Control de Envenenamientos de la ASPCA, en casos de sobredosis los síntomas más frecuentes son vocalización excesiva, agitación y vómito. Afortunadamente, incluso en humanos, dosis de 10 a 30 veces superiores a las indicadas mostraron baja toxicidad, requiriendo solo unas horas de observación.
La mirtazapina puede interactuar con varios medicamentos, especialmente sedantes, analgésicos y fármacos para modificar conductas. Siempre habla con tu veterinario sobre cualquier tratamiento que esté recibiendo tu gato antes de iniciar mirtazapina.
Debe administrarse con precaución en animales con enfermedades renales, hepáticas, cardíacas o diabetes. Aunque se usa comúnmente para estimular el apetito en estas condiciones, las dosis podrían ser menores y necesitar un monitoreo más estricto.
Si notas algún efecto adverso mientras tu gato usa mirtazapina, contacta a tu veterinario, al Centro de Control de Envenenamientos de la ASPCA (1-888-426-4435) o a Pet Poison Helpline (1-855-764-7661) para recibir orientación.
Dosis de mirtazapina para gatos

Tu veterinario te indicará la dosis y la frecuencia de administración más adecuadas según las necesidades específicas de tu gato.
La dosis para la presentación en tabletas puede variar entre 2 y 3.75 miligramos, según los objetivos y la tolerancia a los efectos secundarios. Las tabletas genéricas solo están disponibles en presentaciones de 7.5 y 15 miligramos.
La frecuencia de administración de las tabletas orales suele ser cada 48 a 72 horas, pero es fundamental monitorear el apetito del gato para ajustar el intervalo adecuado.
Dado que la dosis y frecuencia dependen mucho de las necesidades y condiciones de salud de tu gato, siempre consulta con el veterinario antes de comenzar el tratamiento, informando sobre cualquier padecimiento actual o pasado.
El producto tópico Mirataz, un ungüento transdérmico aprobado por la FDA para tratar la pérdida de peso en gatos, se aplica en una tira de 1.5 pulgadas sobre la parte interna del pabellón auricular una vez al día durante 14 días, lo que equivale a unos 2 miligramos.
Es fundamental que quien aplique Mirataz use guantes para evitar la absorción accidental a través de su propia piel. La mejor forma de aplicar el ungüento en la parte interna de la oreja es con el pulgar o el índice, pero al ser un producto transdérmico, el medicamento puede absorberse por la piel de quien lo aplica.
Aunque la mirtazapina también se usa en humanos, es importante evitar la absorción accidental del producto.
Conclusión
La mirtazapina es una excelente opción para apoyar a gatos que enfrentan pérdida de peso o falta de apetito. La presentación tópica Mirataz ofrece una vía cómoda para administrar el medicamento a aquellos felinos que no comen bien o a quienes les resulta difícil tomar pastillas.
Aunque la mirtazapina puede presentar algunos efectos secundarios por su acción como antidepresivo, la mayoría de los gatos, especialmente con dosis bajas, la toleran bien y la encuentran muy beneficiosa.
Aviso sobre dosis: Solo ofrecemos información sobre medicamentos aprobados por la FDA para gatos y según las indicaciones del envase. Para fármacos usados fuera de etiqueta, solo brindamos pautas y datos de seguridad. La dosis segura y adecuada en estos casos debe ser determinada por un veterinario de confianza.
Te recomendamos trabajar junto a tu veterinario para valorar si un medicamento es adecuado para tu gato. Modificar o ajustar dosis por cuenta propia sin supervisión veterinaria implica riesgos. No sugerimos el uso de medicamentos humanos en mascotas sin la autorización y guía del profesional.