¿Alguna vez has sorprendido a tu gato en el lavabo y te has preguntado qué demonios está haciendo allí? Si es así, ¡no eres el único! Los gatos suelen acurrucarse en el lavabo. Aunque parecen muy cómodos y contentos allí, es difícil creer que en realidad estén cómodos en un lavabo frío y duro. Exploremos por qué algunos gatos están obsesionados con los lavabos.
1. Enfriamiento
La cerámica o porcelana fría de un lavabo proporciona a tu gato una sensación de comodidad, ya que le permite refrescarse. Si hace calor o tienes la calefacción encendida en casa, la temperatura podría resultar demasiado alta para él, considerando que los gatos están cubiertos por una capa densa de pelaje. Con frecuencia, buscarán un lugar donde puedan tumbarse y enfriarse. El lavabo es ideal para esto, ya que su material, fresco al tacto, facilita la transferencia del calor del cuerpo de tu gato hacia él.
2. Forma perfecta
El lavabo suele tener la forma perfecta para que tu gato se acomode y se acurruque cómodamente. Si lo piensas, los lavabos tienen una forma bastante similar a las camas para gatos. Los lavabos y las camas para gatos también comparten algunas otras características atractivas para los gatos. A los gatos les gusta sentirse seguros cuando se tumban o duermen. El lavabo los contiene bien, ofreciendo una forma agradable y redondeada en la que pueden tumbarse cómodamente.
3. Agua del grifo
Otro atractivo para tu gato es la proximidad del grifo. A los gatos les encanta beber agua corriente. La mayoría de los dueños son conscientes de la fascinación de los gatos por el agua que fluye. Creemos que esto se debe a que es más fácil de detectar que el agua estancada, por lo que se sienten atraídos por ella. Esta es también la razón por la que puedes sorprender a tu gato golpeando la parte superior del líquido en una taza o un vaso de agua, ya que quiere confirmar si hay líquido allí o no.
El sonido del agua que corre también atrae a los gatos. Aunque los gatos domésticos ya no son animales salvajes, pueden encontrarles atractivo el agua corriente, ya que la evolución les ha enseñado que se considera más segura y limpia que el agua estancada.
A muchos gatos les atrae el sabor del agua corriente. El agua de su cuenco puede resultarles desagradable, especialmente si contiene restos de comida caída o si no se ha lavado adecuadamente. Incluso si el cuenco se ha limpiado cuidadosamente, es posible que a tu gato no le guste el olor de los productos de limpieza utilizados. Lo ideal es limpiar el cuenco periódicamente con un producto de limpieza sin fragancia.
4. Punto de vista
El lavabo proporciona una excelente posición de observación para tu gato. Desde allí, puede vigilar su entorno desde una perspectiva elevada, manteniéndose relativamente oculto. A los gatos les gusta estar alerta a la actividad a su alrededor, ya que su instinto les impulsa a estar siempre atentos a posibles amenazas. Este comportamiento es natural, ya que en la naturaleza los gatos pueden ser tanto depredadores como presas: cazan, pero también pueden ser cazados.
5. Tiempo de tranquilidad
Los gatos suelen buscar un rincón tranquilo al que puedan retirarse y sentirse seguros. El baño es un lugar ideal para ello, ya que ofrece un refugio alejado del bullicio habitual de la casa. A diferencia de áreas como el salón o la cocina, que suelen estar llenas de gente y nunca están completamente tranquilas, el baño generalmente está ocupado por una sola persona a la vez, lo que lo convierte en un ambiente más sereno para que tu gato se esconda y repose.
6. Atención
Algunos gatos inteligentes se dan cuenta de que meterse en el lavabo no solo los acerca físicamente a nosotros, sino que también les brinda mucha atención. Si estás a punto de lavarte las manos o cepillarte los dientes y encuentras a tu gato allí, lo más probable es que le hables y lo acaricies, incluso si lo haces mientras lo apartas del camino.
Tu gato comenzará a asociar esto con una experiencia positiva y gravitará hacia el lavabo para pasar un tiempo de calidad e interacciones positivas contigo, su humano favorito.
¿Cómo puedo evitar que mi gato duerma en el lavabo?
Si no te gusta que tu gato se duerma en el lavabo, hay algunas cosas que puedes hacer para convencerlo de que elija otro lugar. Lo primero sería mantener la puerta del baño cerrada para evitar que tu gato se cuele y se acurruque. Si haces esto, asegúrate de tener otros lugares en la casa a los que pueda ir, ya que podría molestarse mucho si su lugar especial queda fuera de sus límites de repente.
También puedes intentar reforzar el comportamiento positivo, así que si tu gato decide acurrucarse en otro lugar que no sea el lavabo, asegúrate de acariciarlo, mimarlo y darle golosinas. Si sigue yendo al lavabo, retíralo con calma y colócalo con cuidado en otro lugar sin prestarle atención ni alborotarlo. Es mejor no regañar a tu gato por ir al lavabo, ya que esto puede asustarlo.
¿Debo preocuparme si mi gato se queda en el lavabo?
Por lo general, si tu gato se queda dormido en el lavabo, se trata de un hábito adorable (aunque extraño) que ha adquirido. No obstante, hay algunas razones por las que podría estar cerca del lavabo que podrían indicar que algo anda mal. Si tu gato se queda cerca del lavabo porque tiene sed constantemente, esto podría ser un signo de algo como una enfermedad renal o diabetes.
Si notas que tu gato tiene mucha sed y posiblemente también usa más su caja de arena, lo mejor es que programes una cita con su veterinario, especialmente si estos cambios ocurrieron de manera repentina. Podría haber un problema de salud subyacente que necesite ser evaluado y tratado.
Otro tema que preocupa a algunos dueños es la higiene. Si tu gato se pasea por el baño con frecuencia durante el día, en algún momento sabrás que acaba de hacer sus necesidades en la bandeja sanitaria.
Si caminan alrededor del lavabo donde te lavas la cara y cerca de tus cepillos de dientes, algunas personas podrían pensar que esto es antihigiénico y sentirse incómodas. Esto depende de las preferencias personales.
Reflexiones finales
Existen diversas razones por las que puedes encontrar a tu gato en el lavabo. La mayoría de ellas están relacionadas con su comportamiento, pero también hay algunas que podrían indicar que tu gato está enfermo y necesita atención veterinaria. Una vez que hayas descartado cualquier problema médico, puedes permitir que tu gato se relaje a su gusto, ¡siempre y cuando tú también estés de acuerdo!
Leer también: 8 razones por las que nunca deberías castigar a tu gato