Sería mucho más sencillo si nuestros gatos vinieran con manuales de instrucciones, ¿verdad?
Es probable que tengas claros los horarios de alimentación y juego, que sepas sobre vacunas y control de pulgas, e incluso que conozcas el lugar favorito para acariciar a tu gato. Esto dicho, cuando se trata de prevenir el dolor y las enfermedades, y de ayudar a tu felino a vivir su mejor vida, hay mucho más que a tu veterinario le gustaría que supieras.
1. Es probable que tu gato tenga una enfermedad dental

La enfermedad dental es dolorosa, puede causar pérdida de dientes y afecta negativamente la salud general del gato.
Muchos dueños se sorprenden al enterarse de que su gato tiene problemas dentales, ya que esta condición no es ampliamente conocida. A los 4 años, la mayoría de los gatos domésticos presenta algún grado de enfermedad en las encías, conocida como gingivitis.
Los problemas dentales suelen pasar desapercibidos en los gatos porque, generalmente, no visitan al veterinario a menos que necesiten vacunas o presenten síntomas de enfermedad. Estas afecciones son lentas y progresivas, y muchos gatos aprenden a vivir con el dolor sin mostrar signos evidentes de malestar bucal.
No solo causan dolor, sino que también impactan negativamente su salud y bienestar general. Por eso, los veterinarios desean que más personas conozcan esta condición de salud común.
¿Qué puedes hacer al respecto?
- Haz que un veterinario revise los dientes de tu gato una vez al año.
- Establece una rutina de cuidado dental en casa.
- Presta atención a los signos de enfermedad dental, como el mal aliento.
2. La osteoartritis es común en gatos mayores y con sobrepeso

La obesidad puede provocar el desarrollo o empeoramiento de la osteoartritis dolorosa.
Las personas suelen tener más conocimiento sobre la osteoartritis en perros que en gatos. Debido a esto y a la tendencia de los gatos a ocultar el dolor, los felinos con osteoartritis a menudo sufren en silencio.
La osteoartritis (OA) es una condición degenerativa que causa inflamación en las articulaciones de los gatos mayores, resultando en dolor y pérdida de movilidad. Millones de gatos padecen esta condición, pero pocos dueños de mascotas son conscientes de ella.
La mayoría de los gatos mayores de 10 años presentan algún grado de OA, aunque también afecta comúnmente a gatos más jóvenes. Los gatos con sobrepeso u obesidad tienen un mayor riesgo de OA debido al desgaste adicional en las articulaciones.
¿Qué puedes hacer al respecto?
- Infórmate sobre los signos de osteoartritis en gatos.
- Mantén a tu gato en un peso saludable.
- Proporciona suplementos articulares para promover la salud de las articulaciones.
- Consulta a tu veterinario si crees que tu gato sufre de dolor artrítico.
3. Es importante planificar con antelación las facturas del veterinario

El seguro para mascotas y los planes de ahorro pueden ayudarte a presupuestar los gastos veterinarios de tu gato.
Muchos se sorprenden por el costo de la atención veterinaria cuando su gato se enferma o se lesiona de forma inesperada. Además, cuando tu gato se encuentra mal o lesionado, ya estás preocupado, y los costos veterinarios imprevistos pueden agravar una situación estresante.
A veces, no puedes permitirte la atención que tu gato realmente necesita, lo que puede llevar a un sufrimiento innecesario y, en situaciones desgarradoras, a la eutanasia.
Esto también es estresante para tu veterinario, quien desea practicar buena medicina y ofrecer la mejor atención, pero se enfrenta a las limitaciones de un negocio pequeño (que es lo que son la mayoría de las clínicas veterinarias).
Por eso es importante planificar con anticipación los gastos veterinarios, incluso si acabas de adoptar un lindo gatito.
¿Qué puedes hacer al respecto?
- Abre una cuenta de ahorros para emergencias que solo uses para gastos veterinarios, con el objetivo de ahorrar entre $ 2,000 y $ 5,000.
- Obtén una tarjeta de crédito y úsala únicamente para facturas veterinarias.
- Abre una línea de crédito con Carecredit o Scratchpay para tenerla disponible si alguna vez la necesitas.
- Compra un seguro para mascotas ANTES de que tu mascota se enferme o se lesione.
4. Los exámenes anuales son fundamentales para la salud y el bienestar de tu gato

Todos los gatos, incluso aquellos que parecen estar sanos por fuera, deben visitar al veterinario al menos una vez al año.
Dado que la mayoría de los gatos solo van al veterinario cuando están enfermos, lesionados o necesitan vacunas, eso significa que muchos no reciben exámenes físicos anuales. Uno de los aspectos más importantes del cuidado de la salud de tu gato es realizar un examen anual con un veterinario.
Esto es crucial porque los exámenes pueden detectar condiciones de salud ocultas a tiempo (como enfermedades dentales u osteoartritis) antes de que se cause un daño irreversible.
Los análisis de sangre anuales también son un aspecto muy importante del cuidado para los gatos mayores por la misma razón.
¿Qué puedes hacer al respecto?
- Incluso si tu gato no necesita vacunas, no omitas la visita anual al veterinario: ¡la salud y el bienestar de tu gato pueden depender de ello!
5. Los gatos también pueden contraer la enfermedad del gusano del corazón

La enfermedad del gusano del corazón es menos común en gatos que en perros, pero es más mortal porque no hay tratamiento para ella.
Si tienes un perro, es probable que hayas oído hablar de la enfermedad del gusano del corazón, pero ¿sabías que los gatos también están en riesgo? Esta enfermedad es una infección grave y potencialmente fatal tanto para perros como para gatos.
Es transmitida por mosquitos y, aunque los gusanos del corazón no pueden reproducirse en los gatos ni suelen madurar en ellos, aún pueden infectarlos, y la presencia de uno o dos gusanos puede causar problemas.
La enfermedad del gusano del corazón a menudo no se diagnostica en gatos porque no se les realiza pruebas rutinarias para detectar esta infección.
Los signos de la enfermedad del gusano del corazón en los gatos incluyen:
- Tos
- Vómitos intermitentes
- Disminución del apetito
- Convulsiones
- Colapsar
¿Qué puedes hacer al respecto?
- No existen medicamentos efectivos para tratar la enfermedad del gusano del corazón en gatos, por lo que la prevención es clave. Si vives en una zona donde hay enfermedad del gusano del corazón, consulta a tu veterinario sobre la prevención.
6. La obesidad causa grandes problemas

Los gatos obesos y con sobrepeso tienen un mayor riesgo de desarrollar problemas de salud.
Según la Asociación para la Prevención de la Obesidad en Mascotas, el 60 % de los gatos en Estados Unidos son obesos o tienen sobrepeso. Los gatos con sobrepeso u obesidad no viven tanto como los gatos delgados y enfrentan un mayor riesgo de sufrir dolor por osteoartritis, hipertensión, enfermedades renales, diabetes tipo 2 y ciertos tipos de cáncer.
Los gatos obesos generan mayores gastos veterinarios y de alimentos, y parece que a la gente no le importa tanto si su gato está gordo, lo que tiende a volver locos a los veterinarios.
Los veterinarios desean que sepas que puedes prevenir muchas enfermedades, reducir tus gastos veterinarios y de alimentos, y ayudar a tu gato a vivir más tiempo y de manera más feliz simplemente manteniéndolo delgado. Es tan simple, pero cuando consideras los componentes psicológicos, también es más complicado de lo que creemos.
¿Qué puedes hacer al respecto?
- Pregunta a tu veterinario si tu gato tiene sobrepeso u obesidad, y si es así, trabaja con él para crear un plan de pérdida de peso que devuelva a tu gato al camino de la salud.
- Tu veterinario podrá proporcionarte el peso ideal de tu gato, indicarte la cantidad de calorías que debe consumir al día, ofrecer recomendaciones sobre la alimentación y el ejercicio, revisar tu progreso y apoyarte en el proceso. Juntos, podemos poner fin a la obesidad en mascotas y a las enfermedades crónicas asociadas.
7. Los gatos de interior necesitan ejercicio y estimulación mental

Los gatos que viven en interiores necesitan mucho tiempo de juego para hacer suficiente ejercicio.
Aunque los gatos de interior tienden a vivir más que los gatos de exterior, también sufren tasas más altas de obesidad y trastornos relacionados con el estrés, ya que suelen quedarse acostados y comer por aburrimiento.
¿Qué puedes hacer al respecto?
- Para mantener a los gatos de interior en buena salud física y mental, necesitan ejercicio diario y estimulación mental. Esto puede prevenir muchos trastornos de comportamiento y físicos relacionados con el estrés, incluidos la cistitis por estrés, la eliminación inapropiada y la agresión.
- La Asociación Americana de Prácticos Felinos ofrece un excelente recurso para los dueños de gatos sobre cómo proporcionar un entorno interior saludable para sus felinos.
8. Los gatos necesitan humedad en su comida

La comida húmeda ayuda a los gatos a consumir más agua.
Los antepasados de los gatos modernos eran habitantes del desierto y obtenían la mayor parte de su humedad de la presa que cazaban y comían.
Los gatos tienen un impulso reducido para beber en comparación con los perros y los humanos, y en general, no tienden a beber suficiente agua para mantenerse adecuadamente hidratados.
¿Qué puedes hacer al respecto?
- Alimenta a los gatos con una combinación de comida enlatada y seca.
- Agrega caldo de pollo o res bajo en sodio, o jugo de atún a la comida para humedecerla.
- Utiliza una fuente de agua en lugar de un tazón de agua.
9. La mala higiene y el mal uso de la caja de arena pueden ser la causa de los problemas con la caja de arena de tu gato

Muchos gatos evitarán usar la caja de arena si no se mantiene lo suficientemente limpia.
Una de las razones más comunes por las que los gatos son abandonados en refugios es por problemas con la caja de arena, algo que podría solucionarse si la gente supiera más sobre cómo piensan sus gatos.
Si a los gatos no les gusta la caja, la ubicación, la arena, la limpieza de la caja, o se sienten apretujados o apurados por otros gatos, entonces rechazarán la caja y eliminarán en otro lugar.
¿Qué puedes hacer al respecto?
- Ubica las cajas en áreas tranquilas, cálidas, de poco tráfico y bien ventiladas (lejos de la calefacción y la lavadora/secadora).
- Usa arena fina, tipo arena para gatos, aglomerante y sin fragancia, y cubre el fondo con 2.5 cm de arena.
- Limpia la arena a diario; renueva la arena cada dos o tres días.
- Al limpiar, evita productos de limpieza agresivos. Utiliza una solución de 1:1 de amoníaco y agua para limpiar.
- En hogares con varios gatos, ten una caja más que el número de gatos en casa.
- Evita protectores, tapas y limpiadores automáticos; la mayoría de los gatos prefieren cajas sencillas.
- Si tu gato tiene artritis, utiliza una caja con lados más bajos.
10. Las visitas al veterinario no tienen por qué ser estresantes

Pregunta a tu veterinario cómo hacer las visitas al veterinario menos estresantes para tu gato (¡y para ti!).
Una de las razones por las que los gatos no son llevados al veterinario tan a menudo como los perros es porque ¡es estresante!
El gato está asustado y tú estás estresado (y a veces avergonzado por el comportamiento de tu gato o te sientes mal por él). Puede ser difícil atrapar al gato y meterlo en un transportador para llevarlo al veterinario. La experiencia completa puede ser realmente horrible de principio a fin.
Afortunadamente, la industria veterinaria es muy consciente de que esta lucha es real, y ha habido un movimiento dentro de la profesión en la última década para hacer las visitas al veterinario menos estresantes.
Esto incluye técnicas de manejo de bajo estrés, modificación de salas de espera y de examen, hospitales solo para gatos o áreas separadas para gatos, y más.
¿Qué puedes hacer al respecto?
- Mientras los profesionales veterinarios trabajan arduamente para hacer que las visitas sean más agradables y seguras para todas las partes involucradas, los veterinarios desean que sepas que hay cosas que puedes hacer en casa antes de la visita y durante la misma que mejorarán aún más la experiencia.
- La Asociación Americana de Hospitales de Animales tiene una lista de recomendaciones que puede ser útil.
Al seguir estas recomendaciones, puedes prevenir muchos problemas en tu gato antes de que comiencen, reducir los costos de las facturas veterinarias, ayudar a tu gato a vivir una vida más larga y saludable, y hacer muy feliz a tu veterinario.