Si acabas de adoptar un gatito o tu gata ha tenido una camada, es importante saber cómo identificar su sexo correctamente. ¿No estás seguro de si tienes machos o hembras? Diferenciarlos puede ser complicado, sobre todo cuando son muy pequeños, pero con esta guía y algunos consejos clave, te resultará mucho más sencillo.
¿Cómo saber el sexo de un gatito?
Hay algunos pasos sencillos que se deben seguir, entre ellos esperar el momento adecuado, manipularlos correctamente y, a continuación, evaluar visual y físicamente su región genital. El color del pelaje a veces puede ofrecer una pista (como es el caso de los gatos carey), pero la mejor manera de determinarlo es observar los genitales. Las hembras tienen un espacio más pequeño entre el ano y la abertura genital, y los gatos machos tienen testículos pequeños entre el ano y el pene. ¿Estás listo para evaluar el sexo de tus gatitos ? Sigue estos pasos:
Manejo cuidadoso
Para poder evaluar el sexo de tu gatito, tendrás que manipularlo para observar sus genitales. Los gatitos jóvenes son frágiles y se estresan con facilidad. Cógelos con cuidado, manteniéndote cerca de sus hermanos de camada y de su madre, y abrázalos contra ti para que se sientan más seguros.
Rascarle la espalda hasta la base de la cola probablemente provocará que el gatito levante la cola, lo que te permitirá visualizar sus genitales sin manipularlo demasiado.
Evaluación visual de los genitales

La vulva de una gatita es una hendidura vertical cerca del ano (izquierda); el pene de un macho es más bajo, con los testículos entre el pene y el ano (derecha).
Por lo general, se puede determinar el sexo de un gatito mediante una evaluación visual de su parte trasera.
Los genitales de una gatita hembra consisten en la hendidura vertical de la vulva, situada justo debajo del ano. El espacio entre el ano y la vulva es pequeño y, juntos, se parecen a un signo de exclamación invertido o a una letra «i» minúscula.
Los genitales de un gatito macho consisten en un par de testículos debajo del ano, con el pene debajo de estos. Por lo tanto, el espacio entre el ano y la abertura genital es más grande en los machos y la zona se parece más a un colon (:).
Si te resulta difícil determinar el sexo de un gatito en particular, puede ser útil comparar visualmente dos gatitos entre sí, hasta encontrar dos que parezcan diferentes, y al compararlos de cerca, uno al lado del otro, puede resultar más obvio cuáles son gatitos hembras y cuáles son gatos machos.
Evaluación física
Las señales visuales deberían ser suficientes para determinar el sexo de los gatitos, pero si todos se parecen demasiado entre sí, puede ser necesario realizar una evaluación física delicada. Tome un gatito que crea que es macho y, con mucho cuidado, use el pulgar y el índice para palpar el escroto, justo debajo del ano.
En un gato macho, es posible que puedas sentir dos pequeños bultos ovalados debajo de la piel: son los testículos en el escroto, lo que confirma que el gatito es macho.
Color del pelaje
Si estás desesperado por saber el sexo de los gatitos antes de que tengan la edad suficiente para manipularlos, el color de su pelaje podría darte una indicación, aunque este no es un método totalmente confiable.
Los gatos tricolores, como los calicó o los carey, casi siempre son hembras. Esto se debe a que este patrón de color está ligado genéticamente al sexo, determinado por los cromosomas, y por lo tanto solo está presente en las gatas. Con menos fiabilidad, los gatos atigrados anaranjados o pelirrojos tienen más probabilidades de ser machos, y alrededor del 80 % de los gatos machos presentan este color de pelaje.
Comportamiento

Observar el comportamiento de los gatitos no es una forma precisa de determinar su sexo.
Algunos dueños y criadores de gatos insisten en que se puede determinar el sexo de un gato a partir de su comportamiento y sus rasgos de personalidad. Puede ser divertido intentarlo, pero definitivamente no es un método confiable para determinar el sexo de un gatito. Los gatos machos y hembras pueden tener personalidades individuales y rasgos de carácter claros, y determinar el sexo por lo amigables, leales o independientes que sean los gatos es imposible.
Esto dicho, los gatos machos adultos son muy territoriales y tienen más probabilidades de deambular. También pueden rociar orina para establecer su territorio y volverse agresivos con los intrusos. Las gatas alcanzan la madurez sexual alrededor de los 4 o 5 meses de edad y entran en celo regularmente durante la temporada de reproducción. Esto puede implicar cambios de comportamiento como llamar, aumentar el afecto, rodar por el suelo y rociar orina.
¿Cómo prevenir una camada no deseada?
Si tienes una gata que ha dado a luz recientemente a una camada de gatitos, siempre es emocionante descubrir qué mezcla de géneros tienes. Pero el vínculo entre madre y gatito necesita tiempo para desarrollarse, y alterar el flujo de esta importante relación puede causar problemas. El manejo humano de los gatitos recién nacidos puede provocar el rechazo de la madre, así que intenta ser paciente.
Es aconsejable dejar a los gatitos jóvenes solos hasta que tengan al menos 2 a 3 semanas de edad antes de intentar determinar su sexo.
Tener una camada de gatitos es una gran responsabilidad. Los gatitos alcanzan la madurez sexual alrededor de los 4 meses de edad y pueden quedar preñados a partir de ese momento si se aparean con éxito. Los gatos son reproductores estacionales y las hembras tendrán múltiples ciclos de celo a lo largo de la temporada (de febrero a agosto en el hemisferio norte). Con cuatro a seis gatitos por camada y la capacidad de tener múltiples embarazos, los gatos son reproductores prolíficos.
A menos que se los esterilice, pueden empezar a tener camadas de gatitos desde muy jóvenes. Incluso se aparearán con sus hermanos si se mantienen intactos y juntos. Si tienes dos o más gatitos de sexos opuestos, habla con un veterinario sobre la esterilización para evitar camadas no deseadas.
Reflexiones finales
Los gatitos recién nacidos deben dejarse solos para que establezcan un vínculo con su madre durante las primeras semanas. En esa etapa, se los puede manipular con cuidado y seguridad para evaluar su sexo. Las gatitas tienen una abertura vulvar, que es una hendidura vertical que se encuentra justo debajo del ano. Los gatitos machos tienen un espacio más grande entre el ano y el pene, con el escroto en el medio.
Se pueden palpar suavemente los testículos pequeños en el escroto. El color del pelaje también puede dar algunas pistas sobre el sexo de un gatito: los gatos tricolores están genéticamente determinados como hembras y los gatos de pelo naranja tienen más probabilidades de ser machos. Las conductas sexuales pueden comenzar a partir de los 4 meses de edad, por lo que los dueños responsables de gatos deben considerar la posibilidad de castrar a sus gatitos bajo el consejo de un veterinario si tienen gatitos de más de un sexo.
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