Proporcionarle a su gato un alimento adecuado es uno de los principios básicos de la tenencia de un felino, aunque no siempre es tan sencillo como parece. Si su gato no come su alimento seco, puede ser preocupante y frustrante a partes iguales. Hay muchas razones por las que los gatos no comen croquetas secas, desde preferencias individuales hasta enfermedades de los dientes y las encías u otras enfermedades.
6 razones por las que tu gato no come comida seca
¿Simplemente están inquietos o es algo más? Puede resultar difícil determinar si tu gato rechaza las croquetas secas por un buen motivo o no. Comprender algunas de las razones por las que pueden optar por dejar su comida puede ayudarnos a saber cómo ayudarlos.
1. Tu gato simplemente no prefiere la comida seca
Al igual que las personas, los gatos tienen sentimientos muy fuertes sobre qué alimentos les gustan y cuáles no. Estas preferencias suelen formarse durante la etapa de gatitos. Las texturas, los olores y los sabores de las croquetas son muy diferentes a los de la comida enlatada, lo que hace que esta sea una transición difícil para muchos gatos.
2. Pueden darse cuenta de que algo anda mal
Si tu gato rechaza de repente su comida seca, pero sigue devorando con gusto las golosinas para gatos, revisa el paquete de comida. Es posible que los gatos no coman alimentos demasiado viejos por miedo a sufrir molestias estomacales y también pueden ser sensibles a pequeños cambios en la receta o los ingredientes.
3. Tienen un problema con el plato
Los hábitos alimenticios de un gato suelen ser bastante rutinarios y pueden verse alterados con pequeños cambios. ¿Has cambiado el lugar donde colocas su plato de comida o incluso has cambiado el plato en sí? Los gatos suelen preferir un plato de comida ancho y poco profundo, para que sus bigotes no rocen constantemente los bordes. También pueden preferir un plato de comida hecho de un material que se limpie fácilmente para que no retenga el aroma de la comida vieja o del detergente.
4. Tu gato está estresado
A los gatos les encanta relajarse y echarse una siesta. Sin embargo, pueden estresarse , lo que a veces les provoca pérdida de apetito. Los ruidos fuertes, las mascotas nuevas y las peleas territoriales pueden provocar ansiedad en nuestros gatos, que suelen ser tranquilos. Además de los cambios en el apetito, el estrés en los gatos también puede manifestarse en forma de ensuciar la casa, acicalarse en exceso, vocalizar y alterar las interacciones sociales.
5. Tienen dolor en la boca
Las enfermedades dentales son muy comunes en los gatos, pero los síntomas pueden ser difíciles de detectar. Las encías doloridas, la inflamación, la reabsorción dental y las infecciones son causas muy comunes de dolor bucal y dental en los gatos. Esto puede manifestarse en gatos que no quieren comer su comida seca, aunque sí pueden comer comida húmeda. También puedes notar que babean más, que la saliva está descolorida, que comen por un lado de la boca, que dejan caer la comida de la boca o incluso que pierden peso.
6. Tienen otro problema de salud
Prácticamente cualquier tipo de enfermedad puede afectar el apetito de un gato . Los culpables más comunes incluyen problemas gastrointestinales como estreñimiento, diarrea, vómitos o cuerpos extraños, pancreatitis, enfermedades hepáticas y enfermedades renales. Si su gato pierde el apetito y no come durante 24 horas, o si parece no sentirse bien de alguna otra manera, siempre busque el consejo de un veterinario.
Cuándo preocuparse
Puede ser muy preocupante si tu gato no come bien por diversas razones: su nutrición, su hidratación y su bienestar general. Un gato que no come también corre el riesgo de desarrollar lipidosis hepática (enfermedad del hígado graso) , que puede ser muy grave. Sin embargo, puede ser difícil saber cuándo tu gato simplemente está inquieto y cuándo hay que intervenir.
Una buena regla general es que si tu gato no ha comido durante 24 horas, debes acudir al veterinario. También debes preocuparte si la falta de apetito se acompaña de otros síntomas como vómitos, diarrea o fiebre. Si el apetito de tu gato ha disminuido gradualmente y está perdiendo peso , esto también es una señal de que podría no estar bien y deberías acudir al veterinario.
Qué puedes hacer
Cambiar la dieta de un gato puede ser difícil, pero existen formas de facilitar la transición. Siempre busque atención veterinaria si su gato no se encuentra bien, pero aquí hay algunos trucos caseros para que los gatos coman su alimento seco.
¿Por qué mi gato sólo come comida húmeda?
Algunos gatos pueden preferir la comida húmeda porque huele más fuerte y tiene una textura más interesante que les encanta a los gatos. La humedad adicional de la comida húmeda es como un refuerzo de hidratación, lo cual es genial ya que los gatos a veces no beben suficiente agua. Si tu gato tiene problemas dentales o le faltan dientes, la comida húmeda suele ser más fácil para ellos. Los gatos pueden ser quisquillosos con la comida, así que si al tuyo le encanta la comida húmeda, probablemente sea su favorita.
Mantenga las transiciones lentas
Los gatos son animales de hábitos y un cambio de rutina puede resultarles difícil. Si estás cambiando de comida húmeda a comida seca y tu gato no come la comida seca, es posible que hayas hecho el cambio demasiado rápido. Intenta hacer la transición muy lentamente a lo largo de unas semanas y comienza simplemente añadiendo pequeñas cantidades de comida seca a su dieta habitual.
Aumente la cantidad lentamente cada pocos días. También puede intentar agregar un poco de agua al alimento seco al principio para facilitar la transición. Si simplemente está cambiando el tipo o el sabor del alimento seco, es posible que deba hacer los cambios lentamente.
Prueba y error
A los gatos les gustan las proteínas, por lo que los sabores de la comida para gatos suelen ser a base de carne o pescado, como pollo o atún. A menudo, los gatos tienen una preferencia de sabor definida, así que prueba varios sabores para determinar cuáles les gustan. Siempre busca una dieta de buena calidad que sea nutricionalmente completa para su edad y estilo de vida.
Resalte el aroma
Los gatos no tienen una gran cantidad de papilas gustativas, pero utilizan su excelente sentido del olfato para buscar la comida más deliciosa. La comida seca suele oler menos que la húmeda, así que aumenta el atractivo añadiendo un poco de agua tibia o un poco de caldo de carne para atraerlos.
Rutina de bajo estrés
Si los hábitos alimentarios de su gato se han vuelto selectivos, piense en su horario y lugar de alimentación. Mantenga horarios de comida regulares y constantes, coloque los recipientes en un lugar accesible e intente reducir los posibles factores de estrés para su gato.
Hazte un chequeo de salud
Si su gato no come bien, es posible que tenga un problema de salud subyacente. Tome nota de cualquier otro síntoma y acuda a su veterinario para que le haga un examen exhaustivo. La detección temprana suele ser clave para un tratamiento exitoso.
Preguntas frecuentes
¿Está bien que mi gato sólo coma comida húmeda?
Tanto la comida húmeda como la seca tienen sus ventajas y desventajas. La mayoría de los gatos se adaptan perfectamente a cualquiera de las dos, siempre que la comida sea nutricionalmente completa y adecuada para la edad y el estilo de vida de su gato.
¿Por qué mi gato de repente se vuelve quisquilloso con la comida?
Los gatos no responden bien a los cambios repentinos en su dieta o en su horario de alimentación, por lo que un cambio en la comida puede provocar que se vuelvan quisquillosos al comer. Las enfermedades y el dolor (incluidas las enfermedades dentales) también pueden afectar el apetito de los gatos, por lo que puede ser conveniente acudir al veterinario.
¿Está bien mezclar agua con comida seca para gatos?
Sí, puedes agregar agua o caldo bajo en sodio a la comida seca para gatos. Esto puede ayudar a animar a algunos gatos a comerla y también puede aumentar su ingesta de líquidos.