¿Por qué los gatos tienen la lengua áspera?

Si alguna vez tu gato te ha dado un rápido cepillado, habrás notado inmediatamente que su lengua se siente áspera en piel. Si te acercas mucho a tu gato cuando bosteza o se acicala, es posible que incluso hayas notado el extraño aspecto irregular de su lengua.

Entonces, ¿por qué la lengua de los gatos es tan diferente a la de otros animales, como los perros? Pues resulta que este órgano tan útil está adaptado para todo tipo de funciones útiles para los gatos, desde comer y beber hasta acicalarse. ¡Sigue leyendo para saber más!

¿Qué hace que la lengua de un gato sea áspera?

La lengua es un músculo fuerte que tiene múltiples usos. La lengua de los gatos es muy especial porque está cubierta de pequeñas púas orientadas hacia atrás, llamadas papilas filiformes. Estas tienen forma de gancho, lo que hace que la lengua se sienta áspera como papel de lija.

Las púas varían de longitud, siendo las que se encuentran en el medio de la lengua las más largas. No son solo nuestros gatos domésticos los que tienen estas lenguas con aspecto de papel de lija: las especies de felinos más grandes, incluidos los leones, también tienen estas púas. Las papilas están hechas de queratina, una proteína fuerte que se encuentra en el pelo y las uñas, lo que las hace duras y resistentes.

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¿Por qué los gatos necesitan tener la lengua áspera?  4 posibles razones

Los animales suelen estar bien adaptados a su entorno, dieta y hábitos, y los gatos no son la excepción. Su lengua áspera resulta útil de diversas maneras para adaptarse a su hábitat y hábitos naturales.

1. Dieta

En la naturaleza, las lenguas con púas ayudan a los gatos a arrancar la carne de presas enteras.

Los gatos son carnívoros estrictos, lo que significa que dependen de la proteína animal para sus principales necesidades dietéticas. Debido a esta propensión a comer carne, una lengua con púas es útil para lamer literalmente la carne de los huesos y también para mantener la comida en su lugar. Nuestros gatos domésticos cazan principalmente presas pequeñas, como topillos, ratones y pájaros pequeños, que pueden comer enteros, pero ocasionalmente también cazan presas más grandes.

Las especies de grandes felinos, como los leones, obviamente no comen presas enteras, y esas lenguas ásperas están bien adaptadas para separar la carne de los huesos, lo que permite un consumo eficiente de nutrientes y no hay riesgo de obstrucciones por los huesos, picos, alas y plumas no digeribles. Estas útiles papilas también desempeñan un papel en la detección del sabor y la textura.

2. Agua

¿Alguna vez has visto a un gato beber agua? ¡Tienen una técnica muy interesante y única! No meten la boca en el agua, sino que lamen el agua con la lengua muy rápidamente. La lengua tiene forma de cuchara y las papilas de la lengua atraen el agua hacia la boca en un chorro continuo que el gato puede tragar.

Se trata de un método de beber muy eficaz, pero también permite que el gato permanezca atento y alerta mientras bebe, una habilidad muy útil para un animal territorial y solitario.

3. Aseo

La aspereza de la lengua de tu gato hace que actúe como un peine natural. Las púas en forma de gancho atraviesan el pelaje mientras tu gato se lame. La lengua separa el pelaje, eliminando enredos, pelo muerto y residuos o suciedad. El pelo queda plano y en excelentes condiciones.

Las papilas filiformes también estimulan las glándulas sebáceas de la piel alrededor de la base de cada pelo, permitiendo que los aceites naturales se distribuyan sobre el pelaje para mantenerlo en buenas condiciones.

Además, como los gatos son una especie a menudo solitaria, las adaptaciones de este órgano multiusos son ideales para su entorno natural, donde deben confiar únicamente en sí mismos para acicalar y cuidar su pelaje.

Algunas razas de gatos han sido criadas especialmente por su pelo y ahora tienen un pelaje espeso y lujoso. Son hermosos, pero incluso la lengua de un gato bien adaptado puede tener dificultades para penetrar la espesa pelusa.

Los gatos pueden acabar con la boca llena de pelo, que no pueden escupir debido a las espinas posicionadas hacia atrás, lo que puede provocarles un bloqueo intestinal o malestar. Estas razas de pelo más largo necesitan un cepillado adicional por parte de sus dueños para facilitar su aseo.

4. Control de calor

Las púas de la lengua del gato son huecas y están llenas de saliva, que humedece la piel durante el acicalamiento, ayudando a mantener al gato fresco.

Los gatos descienden de felinos salvajes que viven en los desiertos africanos y están bien adaptados al clima cálido. Sin embargo, al tener glándulas sudoríparas solo en sus patas, requieren otros métodos para regular su temperatura corporal. Cuando hace calor, las púas huecas pueden llenarse de saliva y transferirla a la piel, lo que ayuda a enfriar al gato a medida que se evapora. ¡Ingenioso, ¿verdad?!

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Los gatos son criaturas inteligentes y están extraordinariamente bien adaptados a su entorno de múltiples maneras. No debería sorprender que hasta sus lenguas sean inteligentes.

Resulta que este órgano multiusos está adaptado a su dieta y presas específicas, para beber agua, controlar la temperatura corporal y para acicalarse. Todas estas funciones son sumamente necesarias para los gatos y, como especie a menudo solitaria, necesitan ser autosuficientes en estos aspectos.