Descripción general del clorambucilo para gatos
En este artículo descubrirás para qué se utiliza el clorambucilo en gatos, los efectos secundarios que debes tener en cuenta, una guía general sobre la dosis y respuestas a preguntas comunes.
Acerca del clorambucilo para gatos
Clorambucilo es el nombre genérico de un medicamento antineoplásico (contra tumores y cáncer) e inmunosupresor comercializado como Leukeran, fabricado por Aspen Global. Aunque suele recetarse en gatos con ciertas afecciones, no cuenta con la aprobación de la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, por sus siglas en inglés) específicamente para uso felino.
Los términos Leukeran y clorambucilo se utilizan de forma intercambiable al referirse a este fármaco. No obstante, el tamaño de las tabletas de 2 mg de Leukeran suele dificultar una dosificación precisa en la mayoría de los gatos. Por eso, se suele recurrir a farmacias de formulación personalizada para adaptar el tratamiento.
Este medicamento se considera quimioterapéutico y ha demostrado tener efectos teratogénicos en fetos en desarrollo, además de ser irritante para la piel, los ojos y las vías respiratorias.
Por lo tanto, siempre debes usar guantes tanto al administrarlo como al manipular los desechos del gato que lo recibe. Las tabletas no deben partirse ni triturarse.
¿Qué hace el clorambucilo en los gatos?

En medicina veterinaria, el clorambucilo se utiliza principalmente para tratar linfoma o linfosarcoma en gatos, especialmente cuando afecta al sistema gastrointestinal.
El clorambucilo pertenece a la familia de los antineoplásicos derivados de mostazas nitrogenadas y actúa también como inmunosupresor.
Estas sustancias se descubrieron alrededor de la Primera Guerra Mundial. Aunque en un inicio se exploraron como armas químicas, pronto se enfocaron en su uso médico para tratar linfomas, debido a su impacto sobre los glóbulos blancos y la médula ósea.
Gracias a su efectividad, su aplicación se ha extendido al tratamiento de diversos tipos de cáncer, tanto en personas como en animales.
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Las mostazas nitrogenadas actúan sobre las células cancerosas mediante un proceso llamado alquilación. Este mecanismo daña las hebras de ADN dentro de las células, impidiendo que se dividan y se multipliquen, lo que finalmente provoca su muerte.
En general, las células cancerosas se reproducen mucho más rápido que las normales, por lo que son más vulnerables a medicamentos que atacan células de división acelerada.
En medicina veterinaria, el clorambucilo se emplea principalmente para tratar ciertos tipos de linfoma o linfosarcoma en gatos, sobre todo cuando afecta al sistema gastrointestinal. El linfoma es un tipo de cáncer que involucra linfocitos, una clase de glóbulos blancos presentes en casi cualquier tejido del cuerpo.
También se utiliza por sus propiedades inmunosupresoras como tratamiento complementario en casos avanzados de enfermedad inflamatoria intestinal felina. En estos casos, suele combinarse con esteroides como la prednisolona.
Efectos secundarios del clorambucilo en gatos

Algunos efectos secundarios del clorambucilo pueden incluir una disminución en los glóbulos rojos y blancos.
Los medicamentos como el clorambucilo están diseñados para atacar células que se dividen rápidamente, como las cancerosas. No obstante, en el cuerpo también existen células sanas con una tasa alta de renovación, como las del tracto digestivo. En humanos y algunas razas de perros, esto también incluye las del pelo.
Por eso, uno de los efectos secundarios más comunes en gatos suele ser el malestar digestivo, con síntomas como vómito y diarrea.
A diferencia de las personas, los gatos no presentan pérdida de pelo con este tipo de tratamientos, ya que su pelaje no crece de manera continua.
El clorambucilo también actúa sobre la médula ósea, lo cual puede ser útil cuando se trata de cánceres que la afectan directamente. Sin embargo, esto puede provocar anemia (disminución de glóbulos rojos), leucopenia (disminución de glóbulos blancos) y reducción en el número de plaquetas, necesarias para la coagulación.
Cuando estos efectos se presentan de forma más intensa, es posible que el gato muestre debilidad, encías pálidas, apatía, falta de apetito y moretones. Una baja en glóbulos blancos también puede aumentar el riesgo de infecciones virales o bacterianas, y causar fiebre.
El clorambucilo se metaboliza en el hígado, por lo que se debe tener precaución si el gato presenta signos de disfunción hepática.
Por todas estas razones (afectación de células sanguíneas y función hepática), es indispensable realizar análisis de sangre de forma periódica durante el tratamiento, especialmente un hemograma completo. En la mayoría de los casos, los cambios en glóbulos rojos, blancos y plaquetas ocurren al inicio y pueden revertirse con ajustes en la medicación.
Si tu gato acaba de comenzar el tratamiento con clorambucilo, no se deben posponer estas revisiones. Son fundamentales para detectar cualquier efecto adverso a tiempo.
Dado que este medicamento impacta el sistema inmunológico, puede interferir con la eficacia de las vacunas o aumentar el riesgo de efectos adversos relacionados con ellas. En algunos casos, será necesario evaluar si se deben posponer ciertas vacunas o incluso suspenderlas, según el riesgo y beneficio.
También se ha documentado que el clorambucilo puede causar efectos teratogénicos, es decir, dañar embriones o fetos en desarrollo. Por esa razón, no debe utilizarse en gatas gestantes o lactantes, salvo que el beneficio del tratamiento sea mayor que los riesgos.
Por último, debido a su potencial irritante para la piel, los ojos y las vías respiratorias, y al riesgo que representa para el desarrollo fetal, es fundamental usar guantes al manipular el medicamento y al limpiar desechos del gato en tratamiento. Esto incluye la arena del arenero, vómito o cualquier otro residuo.
Si notas cualquier señal de toxicidad o tienes dudas sobre el uso de clorambucilo en tu gato, lo mejor es contactar a tu veterinario de confianza, a un oncólogo veterinario, al Centro de Control de Envenenamientos de Animales de la ASPCA (1-888-426-4435) o a la línea de emergencia Pet Poison Helpline (1-855-764-7661).
Dosis de clorambucilo para gatos

Debido a los riesgos que representa para la salud, las tabletas de clorambucilo no deben partirse ni triturarse bajo ninguna circunstancia. Siempre que sea viable, deben administrarse enteras.
No se puede establecer una dosis específica de clorambucilo, ya que cada tratamiento se adapta tanto al gato en particular como a la enfermedad o cáncer que se esté abordando.
Sin embargo, es importante conocer algunos aspectos comunes sobre la dosificación.
El medicamento comercial Leukeran solo está disponible en tabletas de 2 mg. Debido a los riesgos que implica su manejo, las tabletas nunca deben partirse ni triturarse. Siempre que sea posible, deben administrarse completas. Por este motivo, y porque el tamaño de 2 mg no resulta práctico para muchos gatos, es habitual que el medicamento se obtenga a través de una farmacia de formulación personalizada.
El clorambucilo suele administrarse mediante una terapia en pulsos, es decir, no se usa diariamente. Algunos protocolos indican dosis en días alternos o cada tres días; otros recomiendan varios días consecutivos, pero solo en ciclos semanales específicos.
La dosificación siempre debe estar bajo supervisión veterinaria. Además, cuando se trata de cáncer, es común que el tratamiento sea definido por un oncólogo veterinario certificado.
El manejo de ciertos tipos de cáncer requiere combinaciones de fármacos, y los oncólogos veterinarios son quienes mejor conocen los protocolos adecuados y cómo ajustarlos según sea necesario.
Conclusión
El clorambucilo puede ser un medicamento muy útil cuando se indica para ciertos tipos de cáncer o para casos resistentes de enfermedad inflamatoria intestinal en gatos.
No obstante, suele requerir formulación personalizada, demanda precauciones específicas al administrarlo y puede representar un riesgo para las personas si no se manejan adecuadamente.
Si crees que tu gato podría beneficiarse con este tratamiento, siempre conversa a fondo con tu veterinario, quien en algunos casos podría derivarte a un oncólogo veterinario para una evaluación más especializada.
Aviso sobre dosificación: Solo proporcionamos dosis para medicamentos aprobados por la FDA para uso en gatos y conforme a las indicaciones del envase. Para medicamentos usados fuera de etiqueta, ofrecemos únicamente pautas generales y recomendaciones de seguridad. La dosificación segura y adecuada en estos casos debe ser determinada exclusivamente por el veterinario de confianza.
Te recomendamos trabajar junto a tu veterinario para evaluar si un medicamento es apropiado para tu gato. Modificar o ajustar dosis sin asesoría profesional puede ser riesgoso. No recomendamos el uso de medicamentos destinados a humanos en mascotas sin previa consulta veterinaria.