¿Los gatos sienten vergüenza?

Los gatos experimentan algunas emociones al igual que los humanos. Por lo general, es bastante fácil reconocer cuándo nuestros gatos están felices, asustados o enojados. Pero ¿qué sucede con las emociones más complejas, como la vergüenza? Un gato puede mirar a su alrededor con una expresión facial extraña justo después de haberse resbalado o caído, y podríamos asumir fácilmente que se debe a que está comprobando quién lo vio.

Pero, ¿tu gato realmente se siente avergonzado o simplemente asumimos que lo está porque así nos sentiríamos si estuviéramos en nuestro lugar? Sigue leyendo para saber más sobre si los gatos son capaces de sentirse avergonzados.

¿Qué es la vergüenza?

Sentir vergüenza requiere autoconciencia, algo que los científicos aún no saben con certeza si los gatos tienen.

Todos hemos experimentado vergüenza en algún momento de nuestras vidas. Es esa sensación desagradable que tienes cuando sientes que has hecho algo malo o tonto y que otras personas te están juzgando. Puede hacer que tu ritmo cardíaco se acelere, que te suden las palmas de las manos y que te ruborices.

Puede ser una emoción incómoda, pero se cree que sentir vergüenza cumple una importante función social. Nos ayuda a aprender que hemos hecho algo mal y que no queremos volver a repetirlo en el futuro. Sentirse avergonzado requiere conciencia de uno mismo, así como de lo que piensan los demás a nuestro alrededor. No está claro si los gatos son capaces de tener esta conciencia de sí mismos.

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Emociones de los gatos

Aunque los gatos son buenos comunicándose a través del lenguaje corporal, no entendemos completamente cómo experimentan emociones complejas.

Los gatos pueden experimentar una variedad de emociones, como miedo, felicidad y frustración. Aunque no pueden hablar, tienen muchas formas de comunicar sus sentimientos, principalmente mediante el lenguaje corporal.

Un gato feliz tendrá una postura corporal relajada y podría ronronear satisfecho, mientras que un gato temeroso probablemente se quedará de pie con el lomo arqueado y el pelo erizado mientras sisea ante la amenaza. Estas emociones básicas son fácilmente interpretadas por nosotros como dueños de gatos, pero las emociones más complejas como la vergüenza son un poco más difíciles de determinar.

No está claro si los gatos experimentan emociones más complejas, como la vergüenza, de la misma manera que los humanos. Los gatos son conocidos por ser independientes y, a veces, distantes, pero también son sensibles a las señales sociales y pueden reaccionar a situaciones de maneras que sugieren que son conscientes de su propio comportamiento.

Por ejemplo, un gato que tira un adorno al suelo puede escabullirse o evitar el contacto visual con su dueño, lo que podría interpretarse como una señal de vergüenza. Pero ¿es esto lo que realmente siente?

También podría ser que el gato simplemente esté reaccionando al lenguaje corporal o al tono de voz del dueño, o incluso anticipando la reacción de su dueño basándose en una situación similar anterior y sin sentir vergüenza en absoluto.

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¿Qué comportamientos de los gatos se asemejan a la vergüenza?

En muchos casos, lo que los humanos interpretan como vergüenza tiene una explicación diferente.

Veamos algunas situaciones comunes en las que podríamos creer que nuestro gato se siente avergonzado y qué otras razones podrían explicar ese comportamiento:

Tu gato se resbala o se cae y mira a su alrededor

En lugar de sentirse avergonzados por hacer el ridículo, los gatos están más preocupados por cómo su comportamiento los hace vulnerables a las amenazas.

Si esto nos pasara a ti o a mí, probablemente estaríamos mirando a nuestro alrededor para ver quién nos ha visto caer. Nos daría vergüenza haber cometido un error tonto delante de otra persona. No obsante, es más probable que tu gato esté mirando a su alrededor en un movimiento instintivo para comprobar si el ruido de la caída ha atraído a algún depredador.

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Tu gato tira algo y se escabulle

Los gatos son muy buenos para leer el lenguaje corporal y los estados de ánimo de los humanos, especialmente cuando estás molesto con ellos.

Aunque a ti o a mí nos dé vergüenza haber sido tan torpes, lo más probable es que tu gato simplemente sea consciente de que ha hecho algo malo y quiera evitar tu reacción. Los gatos son muy buenos leyendo nuestro lenguaje corporal y podrían interpretar correctamente que estamos molestos con ellos. Tu gato también podría estar recordando tu reacción de un episodio similar anterior y anticipando que lo regañes.

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Te ríes de tu gato y él te mira de forma extraña

Los gatos no se ríen, por lo que escuchar risas probablemente les resulte sorprendente y confuso.

A nadie le gusta que se rían de él y un ser humano se sentiría avergonzado si alguien se riera de él. Sin embargo, con los gatos, es mucho más probable que se sientan confundidos por tu reacción, ya que no entienden la risa. Es más probable que tu gato te mire en estado de shock (especialmente si te ríes fuerte) o confundido, ya que no entiende tu reacción.

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Tu gato deja de jugar y se acicala si entras en una habitación

Si tu gato deja de hacer lo que estaba haciendo cuando entras en la habitación, la explicación más probable es que se distrajo con los sonidos que hiciste.

Podrías pensar que tu gato se avergüenza al ser sorprendido jugando y se acicala para disimular. Sin embargo, lo más seguro es que el sonido de tu llegada lo haya puesto en alerta, llevándolo a buscar posibles depredadores o peligros cercanos.

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Tu gato vomita y luego mira hacia arriba con una mirada extraña en su cara

Si tu gato te mira de manera inusual después de vomitar, quizá busque consuelo o alivio ante su malestar.

Aunque podríamos interpretar esto como una mirada de vergüenza, también puede ser que tu gato se sienta raro y mal y te esté buscando para que lo tranquilices.

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Antropomorfismo

Aunque los gatos pueden no experimentar emociones de la misma manera que las personas, por lo general no hay daño en pensar que sí lo hacen.

Suponer que nuestros gatos sienten vergüenza se basa en cómo nos sentiríamos nosotros en esa misma situación. Atribuir emociones humanas a los animales de esta manera se llama antropomorfismo. Todos lo hacemos y puede ayudar a fortalecer el vínculo que sentimos con nuestras mascotas. Nos permite creer que nuestras mascotas nos entienden y que nosotros las entendemos a un nivel más profundo.

Es imposible saber con certeza hasta qué punto nuestras mascotas pueden experimentar emociones complejas, pero no suele haber ningún problema en creer que experimentan algunas de estas emociones, aunque no sea así. El antropomorfismo suele tener un efecto muy positivo en el vínculo entre humanos y mascotas y puede ayudarnos a sentirnos mejor conectados con nuestros gatos y otras mascotas.

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La vergüenza en los gatos: reflexiones finales

Cómo experimentan las emociones los gatos sigue siendo un misterio.

Es difícil saber si los gatos tienen la capacidad de experimentar emociones complejas como la vergüenza. Muchos gatos muestran conductas que pueden parecerse a la vergüenza, como esconderse o evitar el contacto visual, pero estas acciones también podrían tener otras explicaciones, como el miedo o simplemente intentar evitar un conflicto.

En definitiva, no sabemos con certeza qué sienten nuestros gatos. ¿En realidad se sienten avergonzados o simplemente responden a nuestro lenguaje corporal y a nuestras propias emociones? De cualquier manera, no está de más creer que nuestros gatos se sienten avergonzados a veces, y que a veces incluso puede hacer que una situación sea divertida en lugar de molesta.

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