Distocia en gatos: signos clínicos y tratamiento

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Gato agarrado por manos humanas

El objetivo de este artículo es proporcionar información clara y fácil de entender sobre lo que sucede cuando una gata sufre distocia (dificultad para dar a luz a gatitos). La distocia en los gatos es común y puede ser mortal si no se trata adecuadamente. Sigue leyendo para obtener más información.

¿Qué es la distocia en los gatos?

Distocia es el término que describe un parto difícil. El término se deriva de las palabras griegas “dys”, que significa “dificultad”, y “tokos”, que significa parto. Se trata de una emergencia obstétrica que requiere atención veterinaria urgente para salvar la vida de la gata y sus gatitos.

¿Qué tan común es la distocia?

La distocia es poco frecuente en los gatos. La mayoría (94-97 %) de los embarazos y partos de gatos son completamente normales, y la distocia se produce en el 3-6 % de los casos.

Obviamente, no supone ningún riesgo para las gatas esterilizadas. Y, por supuesto, no supone ningún problema para las gatas no gestantes. La mayoría de las gatas gestantes dan a luz de forma natural, sin necesidad de intervención.

Pero cuando una gata tiene dificultades para parir, se trata de una emergencia urgente. Todos los que cuidan de una gata preñada deben informarse sobre este posible problema, y es útil que los demás lo sepan como parte del conocimiento general sobre la salud de las mascotas.

La distocia puede afectar a todos los gatos domésticos, pero es más común en razas de pedigrí como los gatos siameses, persas, británicos de pelo corto y cornish rex. Esto se debe en parte a que es más probable que se los mantenga para la cría. La distocia también es más común en gatos obesos y en gatos mayores.

¿Cómo se produce distocia en los gatos?

Cuando las gatas preñadas atraviesan el proceso de parto (también conocido como alumbramiento), se esfuerzan para empujar a los gatitos recién nacidos fuera del útero, a través de la vulva, hacia el mundo exterior. Si, por alguna razón, este proceso no se produce de forma fluida y rápida, se trata de una distocia.

Las causas de distocia son más comúnmente causadas por factores maternos (es decir, problemas causados por la gata madre) y mucho menos comúnmente causadas por factores fetales (es decir, algo que tenga que ver con los gatitos).

Los factores maternos incluyen inercia uterina (el útero no se contrae normalmente), canal de parto estrecho (ya sea como una característica anatómica natural o después de un accidente como una pelvis rota), un canal de parto obstruido (por ejemplo, un tumor, un absceso u otras hinchazones), estrés (especialmente en madres primerizas), obesidad y cualquier otra enfermedad general que haga que la gata se sienta mal en general.

La inercia uterina puede deberse a diversas razones, como el agotamiento si la camada es grande, la estimulación inadecuada del útero si la camada es pequeña, el estrés y los niveles bajos de calcio en sangre. También pueden deberse a otras razones.

Los factores fetales incluyen gatitos de gran tamaño, anomalías congénitas de los gatitos (que pueden no ser tan aerodinámicos como lo normal) y mala presentación (por ejemplo, gatitos que salen en posiciones distintas a las normales, aerodinámicas, con la cabeza o la cola primero).

¿Cuáles son las etapas normales del parto en los gatos?

Gata pelirroja después de dar a luz

La mayoría de las gatas dan a luz a su camada dentro de las seis horas posteriores al proceso, desde el principio hasta el final.

Existen tres etapas del parto en los gatos y es importante supervisar muy de cerca a la gata que está dando a luz para saber en qué etapa se encuentra. Estas etapas son las siguientes:

  • La primera etapa dura alrededor de 4 a 24 horas. Los cambios en esta etapa no son observables directamente, porque ocurren internamente: el cuello uterino (abertura del útero) se dilata, el útero comienza a contraerse y la gata comienza a mostrar cambios en su comportamiento. Esto incluye maullidos, ansiedad, inquietud, anidación e ir a un lugar tranquilo donde pueda estar sola. Si se toma la temperatura rectal de la gata en esta etapa, se encontrará que es más baja de lo normal.
  • La segunda etapa es la entrega de los gatitos al mundo. Se observa un flujo vaginal claro, junto con contracciones abdominales y un esfuerzo visible de la gata para expulsar a los gatitos. El primer gatito suele expulsarse dentro de los 60 minutos posteriores al inicio de este esfuerzo y, a partir de entonces, cada gatito siguiente suele expulsarse dentro de los 30 a 60 minutos siguientes. La mayoría de las gatas terminan de dar a luz en un plazo de seis horas.
  • La tercera etapa es la expulsión de la placenta, la placenta y otras membranas, después de que nazcan los gatitos. Esto suele ocurrir dentro de los quince minutos posteriores a la expulsión de cada gatito. Cada gatito tiene su propia placenta, unida al gatito por el cordón umbilical, y la gata madre normalmente las separa mordisqueando el cordón.

A menudo, un gato pasará de la etapa dos a la etapa tres, repetidamente, a medida que cada gatito va pasando, seguido por las membranas y otros tejidos asociados con ese gatito.

Después de la tercera etapa, el proceso de parto habrá terminado y la gata dejará de esforzarse y se tranquilizará para alimentar a sus gatitos recién nacidos.

¿Cuáles son los signos de distocia?

La regla general más común es que si una gata está en la segunda etapa del parto (esforzándose para expulsar a un gatito) durante más de sesenta minutos sin ningún progreso, entonces sufre distocia. Esto significa que necesita ser llevada urgentemente al veterinario.

La distocia a menudo se define de manera más integral para incluir una serie de otros escenarios posibles cuando se necesita una intervención urgente, como se detalla a continuación:

  1. Embarazo prolongado: cuando el nacimiento de los gatitos no se produce como se espera en el momento normal al final del período de gestación. Esto ocurre casi siempre entre los 52 y 74 días (la media es de 65 a 66 días) desde el último día en que se aparearon. Por tanto, si una gata no ha producido gatitos después de 74 días, esto puede definirse como distocia.
  2. Un intervalo prolongado entre el nacimiento de los gatitos (más de 4 a 6 horas) incluso si la gata no está esforzándose activamente.
  3. La segunda etapa del parto dura más de 24 horas (es decir, el proceso completo no concluye totalmente después de un día completo).
  4. Parte de un gatito (o una membrana fetal visible) sobresale de la vagina durante más de 15 minutos sin progreso, a pesar del esfuerzo del gato.
  5. Presencia de secreción verde sin que haya evacuado el gatito en un plazo de 15 minutos.

Diagnóstico de la distocia

Los signos de distocia son tan evidentes que basta con una mirada para saber que algo no va bien. Lleva a tu gata al veterinario de urgencias cuanto antes. Allí se encargarán de todo lo necesario para cuidar de ella y sus crías.

El veterinario podría proceder de la siguiente manera.

1. Toma de historia clínica detallada

Como en cualquier consulta veterinaria, el especialista hablará contigo sobre todos los aspectos relacionados con la salud y el estilo de vida de tu gata. Te hará preguntas sobre su historial reproductivo (cuándo estuvo en celo, en qué momento ocurrió el apareamiento, etc.) y sobre sus hábitos recientes (alimentación, consumo de agua, eliminación de orina y heces, entre otros).

También te pedirá que describas con precisión lo que observaste en las últimas 12 a 24 horas. Por ejemplo, si notaste algún cambio de comportamiento, presencia de secreción vaginal, esfuerzo al intentar parir, entre otras señales.

2. Examen físico

El veterinario revisará a tu gata con detenimiento. Realizará un examen obstétrico y, al mismo tiempo, evaluará su estado general. En muchos casos, esta revisión física brinda la información necesaria para decidir rápidamente qué hacer. En otras ocasiones, puede ser necesario profundizar con estudios adicionales.

3. Análisis de sangre de rutina

El veterinario podría recomendar análisis de sangre. Esto incluye los estudios habituales, como el hemograma y el perfil bioquímico. Sirven para descartar que haya algún otro problema que esté influyendo en la distocia.

4. Diagnóstico por imágenes

Es posible que se realicen radiografías y una ecografía. Estas pruebas permiten conocer con mayor precisión qué está ocurriendo: cuántos gatitos hay, cómo están posicionados, si el canal pélvico está estrecho o si existe alguna otra anomalía en el abdomen.

5. Análisis de sangre especializados

En casos poco comunes, se puede hacer una prueba de progesterona. Si hay dudas sobre el avance de la gestación, este análisis resulta útil, por ejemplo, cuando la gata ha superado el tiempo habitual de embarazo.

Tratamiento de la distocia

gata embarazada caminando

La mayoría de las gatas dan a luz de forma natural, sin necesidad de ayuda ni intervención.

Hay tres posibles cursos de acción cuando un gato sufre de distocia.

1. Extracción manual de los gatitos

En situaciones sencillas, existe la opción de reacomodar manualmente a los gatitos que no están bien posicionados. Con abundante lubricación, podrían extraerse con cuidado. En la práctica, esto rara vez es posible.

2. Intervención médica

En algunos casos, la gata puede tener niveles bajos de calcio en sangre, lo que afecta la fuerza de las contracciones uterinas. Para corregirlo, se administra calcio por vía intravenosa, y en ocasiones esto basta para resolver el problema.

En otros casos, se recomienda aplicar una inyección de oxitocina, una hormona que el cuerpo de la gata produce de forma natural cuando los gatitos estiran el canal vaginal o al estimular los pezones al succionar.

La oxitocina provoca contracciones uterinas más intensas. Si el veterinario considera que será útil, aplicará una inyección subcutánea o intramuscular. Debe usarse con precaución: si hay una obstrucción en el canal de parto, administrar oxitocina puede provocar una ruptura del útero.

3. Intervención quirúrgica

En el 50–60% de los casos de distocia, es necesario realizar una cesárea para extraer a los gatitos del útero. La gata se anestesia y se hace una incisión quirúrgica en la parte media del abdomen, por donde se accede al útero para abrirlo y sacar directamente a las crías.

Con frecuencia, se aprovecha el procedimiento para esterilizar a la gata (ovariohisterectomía), aunque si se trata de una reproductora, esta decisión se discute previamente con el veterinario. Una vez finalizada la intervención, se cierra la herida y se espera a que la gata despierte.

Después de la cirugía se colocan suturas, que podrían retirarse unos diez días más tarde.

4. Tratamiento adicional

En todos los casos de distocia, es probable que sea necesario un tratamiento complementario, que incluya alivio del dolor y fluidoterapia intravenosa para el shock. Es importante una cuidadosa atención, un manejo y una observación. Esto incluye asegurarse de que los gatitos sean aceptados y se alimenten normalmente, y de que la gata madre orine y defeque con normalidad. Una bolsa de agua caliente ayuda a garantizar que la madre y los gatitos estén lo suficientemente calientes. Es importante controlar periódicamente la temperatura corporal de la gata madre.

Es necesario realizar un seguimiento minucioso. Es importante comprobar si hay signos de metritis (una infección uterina) y revisar las glándulas mamarias para asegurarse de que haya un suministro abundante de leche. La lactancia (la producción de leche) es de vital importancia para los gatitos recién nacidos.

Pronóstico para gatos con distocia

La mayoría de las gatas se recuperan bien después del tratamiento para la distocia. La clave para un buen resultado es recibir atención médica lo más rápido posible. Si la distocia se prolonga, el riesgo de complicaciones y muertes aumenta.

Si la causa de la distocia son factores maternos (como un canal pélvico estrechado), es muy probable que el mismo problema se repita si la gata queda embarazada nuevamente. Por eso se recomienda esterilizarla al mismo tiempo que se realiza la cesárea.

La distocia representa un riesgo serio para la vida de los gatitos, con tasas de mortalidad que varían considerablemente. De nuevo, la atención inmediata mejora las posibilidades de supervivencia de los gatitos, y un cuidado posterior adecuado es igualmente crucial.

Prevención de la distocia

La mejor manera de prevenir la distocia es esterilizar a las gatas antes de que queden embarazadas.

Reflexiones finales

La distocia es uno de los riesgos para una gata que va a tener gatitos. Todos los dueños de gatas preñadas deben ser conscientes de este riesgo. Infórmate sobre los pasos a seguir para resolver este problema tan serio.

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Dr. Pete Wedderburn, DVM

El Dr. Pete Wedderburn se graduó como veterinario en Edimburgo en 1985 y ha dirigido su propio consultorio de cuatro veterinarios con animales de compañía en el condado de Wicklow, Irlanda, desde 1991. Pete es muy conocido como un veterinario de los medios con apariciones regulares en la televisión, la radio y los periódicos nacionales, incluidos una columna semanal en el Daily Telegraph desde 2007. Pete es conocido como "Pete el veterinario" en sus ocupadas páginas de Facebook, Instagram y Twitter, y publica periódicamente información sobre temas de actualidad y casos de la vida real de su clínica. También escribe un blog habitual en www.petethevet.com. Su último libro: “Pet Subjects”, fue publicado por Aurum Press en 2017.