Maullidos excesivos en gatos: causas y soluciones

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El maullido excesivo en los gatos es una característica

El maullido y el ronroneo son las principales formas de comunicación vocal en los gatos. Aunque a la mayoría de los dueños no les molesta que su gato ronronee con frecuencia, la situación cambia cuando el maullido se vuelve excesivo.

Además de la preocupación por la salud del gato, el sonido constante puede resultar molesto e irritante para muchas personas.

¿Por qué mi gato maúlla excesivamente?

¿Por qué maúllan los gatos?

Los gatos maúllan como forma de comunicar una amplia variedad de mensajes, que van desde el hambre hasta la necesidad de atención, pasando por la enfermedad y más.

En pocas palabras, los gatos maúllan para comunicarse. Las causas más comunes son las siguientes:

  • Hambre . Si un gato tiene hambre, la forma más fácil de hacértelo saber es maullando excesivamente.
  • Sed. Si tu gato te maúlla, comprueba que su cuenco de agua no esté vacío.
  • Búsqueda de atención. Si tu gato quiere tu atención por cualquier motivo, un maullido es la mejor manera de que lo notes. Por ejemplo, si tu gato no deja de maullar por la noche y está parado junto a la puerta o la ventana, quizá quiera salir.
  • Estrés. Si hay algo que provoque que tu gato se sienta estresado, es posible que maúlle con más frecuencia y más fuerte, por ejemplo, cambios sociales (como un nuevo hogar, un nuevo gato o personas diferentes que visitan la casa), actividades fuera de la casa que pueda ver, ruidos fuertes como fuegos artificiales, viajes en coche, etc.
  • Enfermedad. Algunos problemas de salud graves (por ejemplo, enfermedad renal o enfermedades del tracto urinario como cistitis u obstrucción de la vejiga) pueden hacer que los gatos maúllen con más frecuencia. Otras afecciones a largo plazo, como el hipertiroidismo (una glándula tiroides hiperactiva) o la presión arterial alta, pueden hacer que los gatos maúllen más.
  • Dolor. Los gatos en apuros pueden vocalizar maullando (por ejemplo, un gato que siente dolor debido a una obstrucción urinaria puede maullar fuerte mientras está sentado en la caja de arena).
  • Disfunción cognitiva. Los gatos mayores suelen sufrir una forma de demencia, que puede provocar un aumento de la vocalización.
  • Ansiedad. Tu gato puede maullar mucho si se siente ansioso o asustado. También puedes notar que orina o defeca fuera de la bandeja sanitaria y puede desarrollar problemas de salud relacionados con el estrés, como cistitis o acicalamiento excesivo.
  • Interacciones sociales. Las gatas maúllan fuerte cuando están en celo, y los machos hacen lo mismo cuando perciben el olor de una hembra en celo. Los gatos también maúllan y aúllan fuerte entre sí si tienen encuentros hostiles con otros gatos, especialmente si hay una disputa territorial.
  • Sordera. Si los gatos no pueden oír su propia voz, pueden maullar más fuerte y con mayor frecuencia.
  • Raza. Algunas razas de gatos (por ejemplo, los siameses) tienen un maullido más fuerte, más frecuente y más persistente que otras razas.
  • Hierba gatera. Muchos gatos reaccionan fuertemente a la hierba gatera y el comportamiento alterado del gato puede incluir maullidos y aullidos.
  • No hay razón aparente. A veces los gatos simplemente maúllan, sin una causa aparente.

Cómo detener los maullidos excesivos

Cómo detener los maullidos excesivos

Para detener los maullidos excesivos, primero hay que identificar la causa subyacente y luego resolverla.

¿Tu gato no deja de maullar? Primero, intenta identificar por qué tu gato vocaliza con más frecuencia y luego intenta abordar esta causa subyacente.

  • Hambre. Comprueba que el cuenco de comida de tu gato esté vacío y, si es necesario, rellénalo. Si tu gato empieza a maullar cada vez que tiene hambre antes de la hora de comer, si lo alimentas como respuesta, es probable que, sin querer, le enseñes a hacerlo con más frecuencia. El uso de un comedero automático que se abra en momentos específicos podría ser una forma de evitar que esto suceda.
  • Sed. Un cuenco de agua o una fuente automática, rellenados regularmente todos los días, pueden garantizar que tu gato nunca tenga sed.
  • Búsqueda de atención. Debes intentar prestarle atención a tu gato (por ejemplo, durante el juego) en momentos aleatorios en los que no esté buscando atención para que no aprenda que necesita maullar para llamar tu atención.
  • Estrés. Los problemas de conducta son probablemente la causa más común de maullidos excesivos en los gatos. Busca formas de eliminar el estrés de la vida de tu gato (por ejemplo, para los gatos de interior especialmente, haz que tu casa sea más amigable para los gatos, con muebles para gatos como árboles para gatos). Introduce nuevas mascotas con cuidado (por ejemplo, mediante el intercambio de olores) para minimizar el estrés. Otras posibles modificaciones de comportamiento incluyen nuevos juguetes para gatos, pasar más tiempo jugando con tu gato y cambios en la distribución de tu casa, como obstruir el acceso visual al exterior con mosquiteros para que ya no se puedan ver los gatos afuera. Aprende a comprender el lenguaje corporal de la cola de tu gato para que pueda detectarlo más fácilmente si se siente estresado.
  • Enfermedad y dolor. Realiza controles regulares con tu veterinario para asegurarte de que tu gato se mantenga en buen estado de salud. La frecuencia de las visitas depende de la edad de tu gato: los gatos adultos necesitan un control una vez al año o en cualquier momento en que parezcan no estar bien, mientras que los gatos mayores deben tener controles dos veces al año.
  • Disfunción cognitiva. El veterinario debe evaluar periódicamente a los gatos mayores para detectar enfermedades comunes de la vejez, incluida la disfunción cognitiva.
  • Interacciones sociales. Es una buena idea esterilizar a las gatas y castrar a los machos. Esto reducirá la vocalización vinculada a las conductas sexuales.

Los gatos suelen maullar por una buena razón, así que si tu gato empieza a maullar de forma excesiva o molesta, deberás analizar la situación de su hogar para intentar averiguar la causa.

Esto te permitirá eliminar la razón subyacente del maullido, lo que a su vez debería motivarlos a estar más tranquilos.

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Dr. Pete Wedderburn, DVM

El Dr. Pete Wedderburn se graduó como veterinario en Edimburgo en 1985 y ha dirigido su propio consultorio de cuatro veterinarios con animales de compañía en el condado de Wicklow, Irlanda, desde 1991. Pete es muy conocido como un veterinario de los medios con apariciones regulares en la televisión, la radio y los periódicos nacionales, incluidos una columna semanal en el Daily Telegraph desde 2007. Pete es conocido como "Pete el veterinario" en sus ocupadas páginas de Facebook, Instagram y Twitter, y publica periódicamente información sobre temas de actualidad y casos de la vida real de su clínica. También escribe un blog habitual en www.petethevet.com. Su último libro: “Pet Subjects”, fue publicado por Aurum Press en 2017.