¿Por qué mi gato no maúlla?

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Un gato curioso explora con cautela una escalera. La imagen retrata la naturaleza inquisitiva del felino mientras recorre los escalones.

Algunos gatos maúllan con frecuencia y no dudan en hacerse oír; otros, en cambio, son tranquilos y reservados. Cada gato tiene su carácter, y eso está bien. Pero ¿qué pasa si el tuyo no maúlla nunca? ¿Es normal? Depende.

Cuando un gato no emite maullidos, puede deberse a su temperamento, a la raza, o incluso a una condición de salud. Aquí te cuento qué factores pueden estar detrás de ese silencio.

No maúlla: ¿ahora o nunca?

Lo primero es aclarar algo: ¿se trata de algo reciente o ya lo habías notado desde antes? ¿Siempre ha sido callado o antes maullaba y de pronto dejó de hacerlo? Es clave tener esto claro antes de buscar las causas.

Si es un cambio reciente y solía maullar, podría estar relacionado con algún problema de salud. En ese caso, conviene llevarlo al veterinario para una revisión completa y descartar cualquier enfermedad.

Ahora bien, si siempre ha sido así, no hay motivo de preocupación. De hecho, hay personas que nunca han escuchado maullar a su gato.

¿Por qué nunca he oído maullar a mi gato?

Si nunca has escuchado maullar a tu gato, no te alarmes. Eso no significa que algo esté mal. Hay gatos que, por naturaleza, son más silenciosos y no sienten la necesidad de vocalizar. Tal vez prefieren ronronear o emitir pequeños trinos. Existen distintos tipos de sonidos felinos, y el maullido simplemente podría no estar entre sus formas favoritas de comunicarse.

En cualquier caso, si tu gato siempre ha sido así y no notas ningún otro cambio, no hay razón para preocuparse. Seguramente se trata de su forma de ser, y simplemente es menos expresivo que otros. Mientras lo veas activo, contento y saludable, no hay nada de qué preocuparse por su silencio.

Mi gato solía maullar y ahora no lo hace

Gato enérgico con cola moviéndose en movimiento.

Como cualquier cambio repentino, dejar de maullar puede ser un síntoma de enfermedad.

Si tu gato solía maullar y de repente ya no lo hace, es posible que haya un problema médico subyacente. O tal vez notes que sigue maullando, pero el maullido suena diferente. Casi como si su voz hubiera cambiado. Al investigar este problema, es importante observar si tu gato presenta otros síntomas como (entre otros):

Existen muchas condiciones que pueden hacer que tu gato deje de maullar repentinamente o que el sonido de su maullido cambie. A continuación, analizaremos estas situaciones con más detalle.

Razones por las que tu gato ha dejado de maullar de repente

1. Estrés

Si tu gato de repente se queda callado y no vocaliza tanto, es posible que el estrés sea la causa. El estrés puede afectar enormemente el comportamiento del gato. El estrés puede hacer que algunos gatos se vuelvan retraídos y callados. Es posible que no interactúen tanto con sus dueños y que sea menos probable que intenten llamar la atención vocalizando.

Los factores estresantes incluyen cualquier cosa, como un nuevo bebé en la casa, un nuevo gato, una mudanza o incluso una persona que viene de visita por unos días. A los gatos en particular no les gusta que se muevan sus cajas de arena, camas y otros elementos especiales, y esto puede estresarlos mucho.

Si tu gato ya no maúlla, comprueba si hay algo que pueda causarle estrés. Por ejemplo, si notas que tu gato y un gato nuevo en la casa se pelean o se bloquean el paso, entonces sabrás que hay algún conflicto entre gatos. Esta es una causa muy posible de estrés y podría ser el problema.

2. Infección o virus de las vías respiratorias superiores

Las infecciones del tracto respiratorio superior (URI) o los virus (los más comunes son la gripe felina, el herpesvirus y el calicivirus) pueden causar mucha inflamación en el tracto respiratorio superior. Esto puede hacer que el maullido de tu gato cambie (se vuelva ronco) o que deje de maullar por completo y pierda la voz. Es probable que notes otros síntomas como estornudos, secreción nasal o ocular (nariz que gotea) y algo de letargo.

3. Problemas laríngeos

Gato atento con una sola oreja levantada, mostrando curiosidad. La imagen captura la postura alerta y el gran interés del felino.

Los problemas en la laringe o la tráquea pueden hacer que tu gato deje de maullar. También podrías notar un cambio en su voz: se vuelve ronca, áspera o apagada.

La laringe es la entrada superior de la tráquea en los gatos y evita que la comida llegue a los pulmones. También se conoce como la caja de voz felina. Cuando la laringe no funciona bien, tu gato puede maullar con voz ronca o dejar de maullar por completo.

Entre los problemas que puede presentar la laringe están la inflamación (laringitis), la parálisis laríngea y el cáncer. La inflamación es, con diferencia, la causa más frecuente que he visto en la práctica. Por suerte, la parálisis y el cáncer son menos habituales.

4. Cáncer

Aunque el cáncer está entre las posibles causas, por fortuna es menos frecuente. Puede manifestarse de distintas formas, como tumores en las vías respiratorias superiores. Cualquier bulto o masa en esa zona puede alterar el maullido de tu gato o incluso hacer que deje de maullar por completo. Esta causa suele darse más en gatos mayores que han dejado de maullar de repente.

5. Letargo

Si tu gato ha dejado de maullar repentinamente y está más tranquilo en general, podría tener un problema de salud que lo haga sentir mal.

Los gatos que están letárgicos y no se sienten bien pueden tener menos tendencia a vocalizar. Podrían tener problemas subyacentes como enfermedad renal crónica, diabetes o hipertiroidismo (tiroides hiperactiva).

Cosas que puedes hacer en casa

Gato con los ojos muy abiertos en estado de sorpresa o alerta.

Si has notado que tu gato ha dejado de maullar de repente, hay algunas cosas que puedes hacer en casa para ayudarlo.

Si tu gato ha dejado de maullar de repente, hay algunas cosas que puedes hacer en casa. Primero, observa si presenta otros síntomas como: falta de apetito, secreciones nasales u oculares, estornudos, aumento en el consumo de agua o letargo.

Si notas alguno de estos signos, tu gato podría estar enfermo y necesitar atención veterinaria, así que es fundamental detectarlo a tiempo.

El estrés también puede hacer que tu gato esté más callado y deje de maullar. Si crees que ese es el caso, identifica qué lo está afectando y ajusta el ambiente en casa. Por ejemplo, si la llegada de un nuevo gato genera tensión, asegúrate de que cada uno tenga sus propios recursos.

Estos incluyen camas, escondites, areneros, estaciones de comida y agua, y rascadores. Además, usar un difusor de feromonas sintéticas (como Feliway) ayuda a reducir la ansiedad.

¿Cuándo debes visitar a tu veterinario?

Los gatos que están sanos y felices y nunca han maullado no requieren tratamiento alguno. Algunos simplemente son más tranquilos y poco expresivos que otros.

Pero si tu gato ha dejado de maullar de repente, es importante que lo lleves al veterinario. Allí lo examinarán y podrían solicitar análisis de sangre y orina. También podrían hacer estudios por imagen, como radiografías o tomografías, para descartar posibles tumores o crecimientos.

Conclusión

Cautivador gato Scottish Fold que muestra sus exclusivas orejas dobladas.

Cada gato tiene su propia personalidad, por eso que uno sea callado no debe preocuparte. Pero si tu gato ha dejado de maullar de repente o su voz ha cambiado, es momento de consultar al veterinario para descartar enfermedades, como infecciones, cáncer u otros problemas.

Algunos gatos son menos expresivos y casi nunca maúllan, y eso está bien mientras se vean sanos. Pero si antes maullaba y de pronto dejó de hacerlo, hay que prestarle atención. Podría estar pasando por estrés, inflamación, infección o incluso cáncer.

Lleva a tu gato al veterinario si ha dejado de maullar de repente, sobre todo si muestra otros síntomas.

Leer también: 7 vocalizaciones comunes de los gatos y su significado

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Dr. Aisling O'Keeffe MVB CertSAM ISFMAdvCertFB MRCVS

Aisling se graduó como veterinaria en la University College Dublin en 2015 y trabajó en una combinación de pequeños hospitales para animales aquí y en el Reino Unido, incluida una clínica veterinaria solo para gatos donde trabaja actualmente. Ha completado un certificado de posgrado en Medicina de Pequeños Animales y el certificado de posgrado en Comportamiento Felino Avanzado de la Sociedad Internacional de Medicina Felina. Escribió un libro para niños llamado 'Minding Mittens', cuyo objetivo es educar a los niños sobre el comportamiento y el cuidado de los gatos. Aisling apareció en la serie de televisión de RTE 'Cat Hospital'. Ella es una veterinaria certificada por Fear Free, cuyo objetivo es hacer que las visitas al veterinario sean lo más placenteras y libres de estrés posible. En su tiempo libre le gusta cuidar de sus mascotas, entre las que se incluyen 4 felinos.