Náuseas en gatos: causas, síntomas y tratamiento

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gatito durmiendo

La mayoría de las personas conoce bien la sensación de náuseas en diversas situaciones, ya sea por mareo, infecciones virales o resacas. Los gatos también pueden experimentar náuseas, y este artículo tiene como objetivo explicarte por qué ocurre, cómo reconocerlo y qué hacer para aliviar a los felinos que lo padecen.

¿Qué significa cuando un gato sufre náuseas?

La náusea se describe como “una sensación de malestar con ganas de vomitar”. El reto para quienes cuidan gatos es que ellos no pueden comunicarse con palabras, por lo que no pueden decirnos cuándo la sienten.

Pero si los observas con atención, podrás identificar cómo actúan justo antes de vomitar. Cuando muestran ese mismo comportamiento en otras ocasiones, es muy probable que estén experimentando náuseas.

También sabemos que hay circunstancias específicas —como gatos en quimioterapia o durante viajes en automóvil— en las que la aparición de náuseas es más común.

¿Qué tan comunes son las náuseas en los gatos?

Las náuseas en los gatos probablemente no se diagnostican lo suficiente porque no pueden explicarnos que las tienen. Probablemente sea una sensación común en los gatos enfermos y todos deberíamos conocer sus signos para poder ayudarlos.

¿Qué causa las náuseas en los gatos?

Las náuseas son comunes en cualquier condición o situación en la que los problemas de salud subyacentes provoquen regurgitación o vómitos en los gatos. La regurgitación significa la expulsión de alimentos no digeridos, mientras que el vómito significa que el gato expulsa alimentos digeridos o semidigeridos.

Antes de que un gato vomite o regurgite, es muy probable que sufra una sensación de náusea (es decir, la sensación de que va a vomitar).

A continuación se enumeran las principales causas comunes de regurgitación y vómitos en gatos.

En todas las situaciones mencionadas anteriormente, es probable que los gatos sufran náuseas antes de vomitar físicamente.

Síntomas de náuseas

Los signos clínicos de las náuseas son probablemente más fáciles de interpretar en retrospectiva: en otras palabras, después de que un gato ha vomitado, es justo decir que su comportamiento hasta el vómito en sí probablemente estuvo relacionado con la sensación de náuseas.

Teniendo esto en cuenta, los gatos que sufren náuseas muestran los siguientes signos:

  • Pérdida de apetito
  • Salivación o babeo
  • Embotamiento, quedarse encorvado en un mismo lugar
  • Falta de interés por el entorno, no jugar ni interactuar con el cuidador
  • Vocalizar de una manera distintiva (por ejemplo, maullando)
  • Náusea

Analizar las náuseas

Gato siendo revisado por el veterinario

Pueden existir muchas causas posibles de náuseas y vómitos, que pueden incluir la ingesta de un nuevo alimento o suplemento, la ingestión de un objeto extraño, etc.

Los casos leves de náuseas o vómitos (por ejemplo, un solo episodio) pueden necesitar simplemente un enfoque simple, como un ayuno corto seguido de un alimento para mascotas suave y altamente digerible durante 48 horas.

No obstante, como parte del cuidado responsable de tu mascota, si tu gato presenta episodios repetidos de vómitos, debes llevarlo a tu veterinario de inmediato para que pueda identificar el problema subyacente y administrarle un tratamiento. Tu veterinario puede tomar las siguientes medidas.

1. Toma de historia clínica detallada

Tu veterinario revisará cada detalle del estado de tu gato y evaluará su salud en general. Las causas de las náuseas y el vómito crónico pueden ser variadas, y una historia clínica detallada ayudará a identificar el origen.

Hay varios aspectos clave en esta historia: por ejemplo, los gatos mayores son más propensos a ciertos problemas que los jóvenes; los gatos que salen libremente pueden enfrentar riesgos distintos a los que viven solo dentro de casa, y más. También es fundamental conocer la dieta: ¿qué tipo de alimento consume tu gato?

¿Ha comenzado a comer algo nuevo últimamente? ¿Recibe algún suplemento? ¿Hay otros factores que puedan afectar su sistema digestivo? ¿Juega con juguetes? ¿Podría haber ingerido algún objeto extraño que esté causando náuseas? ¿Orina con normalidad? (es importante que observes con atención cómo se comporta en su arenero).

2. Examen físico

El veterinario examinará cuidadosamente todo el cuerpo del gato, palpando al animal por todas partes y comprobando si presenta alguna anomalía. Normalmente, esto incluye tomarle la temperatura, escucharle el pecho con un estetoscopio y pesarlo (la pérdida de peso se asocia a algunas causas de náuseas).

3. Análisis de sangre y orina de rutina

Tu veterinario seguramente solicitará análisis de sangre, que incluyen pruebas diagnósticas básicas como hematología (conteo sanguíneo) y perfiles bioquímicos (electrolitos incluidos). También es común realizar análisis simples de orina. Este conjunto de pruebas, conocido como la base mínima de datos, se utiliza para evaluar a la mayoría de los gatos enfermos, sin importar los síntomas que presenten.

4. Análisis de sangre especializados

Tu veterinario podría sugerir análisis específicos, como el total de T4 para descartar hipertiroidismo, además de pruebas para detectar infecciones virales como FeLV y FIV, ya que un resultado positivo en cualquiera de estas tiene implicaciones importantes para la salud de tu gato.

5. Otras pruebas

Es probable que se realicen radiografías y ecografías para revisar con detalle el tracto digestivo y el abdomen. En casos específicos, aunque es poco común, se puede recomendar imágenes diagnósticas más avanzadas, como una tomografía o resonancia magnética.

También podrían sugerir una endoscopía e incluso una biopsia del tracto gastrointestinal, que puede incluir el esófago, estómago e intestinos del gato.

En algunas situaciones, se mide la presión arterial como parte de un chequeo general de salud felina.

¿Cuánto cuesta tratar a un gato con náuseas?

Se revisa la salud del gato

El objetivo principal es tratar la causa de las náuseas, y una vez que la enfermedad subyacente desaparezca, las náuseas también desaparecerán. Además, se pueden administrar tratamientos específicos para aliviar los síntomas mientras tanto.

El costo depende completamente de la causa de las náuseas y puede ser menos de $ 100 USD si un gato tiene un tipo simple de náuseas vinculadas a un malestar estomacal aislado, hasta más de $ 4,000 USD si un gato tiene náuseas causadas por un problema complejo como el cáncer .

¿Se pueden tratar las náuseas?

El tratamiento para las náuseas varía según la causa.

El objetivo principal suele ser abordar el origen del malestar: una vez que la enfermedad que lo provoca desaparece, las náuseas también se van. Por ejemplo, un gato con enfermedad hepática o hipertiroidismo dejará de sentirse incómodo cuando se controle su problema.

Mientras se trata la causa, puede administrarse un tratamiento específico para aliviar los síntomas. Esto también aplica en casos donde la causa no se puede evitar, como el mareo por movimiento o las náuseas relacionadas con la quimioterapia.

¿Qué tratamientos específicos contra las náuseas existen?

A veces, una solución sencilla como darle una dieta baja en grasas, suave y fácil de digerir, puede ayudar de manera general.

Por lo general, para tratar las náuseas se usan medicamentos contra el vómito, llamados antieméticos. Estos fármacos requieren receta médica, por lo que debes hablar con tu veterinario.

Los principales productos que suelen recomendar son:

  • Maropitant (“Cerenia”), que puede administrarse por inyección o vía oral.
  • Ondansetrón y dolasetrón, pertenecientes a un grupo llamado bloqueadores 5HT3, que en algunos casos el veterinario puede usar, aunque en ciertos lugares esto se considera “uso fuera de etiqueta”.
  • Metoclopramida (Maxolon), común en perros, pero en gatos se emplea con precaución debido a posibles efectos neurológicos a dosis altas, por lo que se usa menos que el maropitant.
  • Granisetrón y dexametasona, útiles para aliviar náuseas específicas asociadas a algunos tipos de quimioterapia; también pueden considerarse “uso fuera de etiqueta”.
  • Otros productos que se pueden usar para reducir las náuseas en casos concretos incluyen antiácidos y medicamentos que protegen la mucosa gástrica, como el sucralfato.

Seguimiento y pronóstico

El nivel de seguimiento varía según cada caso, pero en general, los gatos con náuseas requieren revisiones frecuentes con un veterinario hasta recuperar su estado normal.

El pronóstico depende completamente de cada situación y de la causa que provoca las náuseas. Tu veterinario será quien pueda darte la mejor orientación al respecto.

Conclusión

La náusea suele ser el antecedente del vómito, que en gatos puede tener múltiples causas y debe ser evaluado y tratado por un veterinario. Las náuseas desaparecerán cuando el vómito esté bajo control, pero mientras tanto, tu veterinario puede recetar medicamentos para aliviar el malestar de tu gato.

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Dr. Pete Wedderburn, DVM

El Dr. Pete Wedderburn se graduó como veterinario en Edimburgo en 1985 y ha dirigido su propio consultorio de cuatro veterinarios con animales de compañía en el condado de Wicklow, Irlanda, desde 1991. Pete es muy conocido como un veterinario de los medios con apariciones regulares en la televisión, la radio y los periódicos nacionales, incluidos una columna semanal en el Daily Telegraph desde 2007. Pete es conocido como "Pete el veterinario" en sus ocupadas páginas de Facebook, Instagram y Twitter, y publica periódicamente información sobre temas de actualidad y casos de la vida real de su clínica. También escribe un blog habitual en www.petethevet.com. Su último libro: “Pet Subjects”, fue publicado por Aurum Press en 2017.