Tramadol para gatos: descripción general, dosis y efectos secundarios

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Un gato durante un examen veterinario, enfatizando la importancia de los controles regulares y el cuidado de la salud de los compañeros felinos.

El tramadol es un analgésico opioide que suele recetarse a gatos para tratar el dolor. En este artículo conocerás cómo actúa, qué efectos secundarios debes vigilar y las dudas más frecuentes sobre su uso.

Descripción general de Tramadol para gatos

Tipo de medicamento:
Medicamentos opioides para el dolor
Forma:
Comprimido, solución oral
¿Se requiere receta médica?:
¿Aprobado por la FDA?:
No
Nombres de marca:
Ultram, Ultram ER, Ryzolt, ConZip, Qdolo
Nombres comunes:
Tramadol
Dosis disponibles:
Comprimidos orales recubiertos con película de 50 mg. Comprimidos de liberación prolongada de 100 mg, 200 mg y 300 mg (no recomendados para gatos). Solución oral de 5 mg/ml. La marca Ultracet que se combina con paracetamol no debe utilizarse en gatos, ya que el paracetamol es tóxico para ellos.
Rango de vencimiento:
Los productos deben utilizarse antes de la fecha de caducidad indicada en el envase. Las tabletas deben conservarse a temperatura ambiente (entre 20 y 25 grados C o entre 68 y 77 grados F). Se permiten variaciones de temperatura de aproximadamente 5 grados C o 10 grados F. Como sustancia controlada, el tramadol siempre debe conservarse en un recipiente cerrado y construido de manera segura.

Acerca del Tramadol para gatos

veterinario revisando gato

El tramadol no cuenta con la aprobación de la FDA para uso en gatos, aunque los veterinarios lo recetan con frecuencia fuera de lo indicado en la etiqueta.

El tramadol es un analgésico opioide que actúa uniéndose a receptores específicos en el cuerpo para aliviar el dolor. Existen varios tipos de receptores opioides, y el tramadol se conecta principalmente al receptor mu para brindar ese alivio.

Además, tiene una leve capacidad para bloquear la recaptación de dos neurotransmisores: serotonina y noradrenalina.

En Estados Unidos, el tramadol está clasificado como una sustancia controlada de nivel IV. Esto implica que la posibilidad de que un veterinario lo recete puede estar limitada según la última revisión del animal o por otras condiciones especiales.

Aunque se utiliza en medicina veterinaria desde hace tiempo, no cuenta con la aprobación de la FDA para perros ni gatos. Por ello, su prescripción se realiza fuera de las indicaciones oficiales, algo habitual en este campo.

Leer también: ¿Qué se le puede dar a un gato para aliviar el dolor? 6 opciones recomendadas por veterinarios

¿Qué hace el Tramadol en los gatos?

Un gato con dolor, lo que enfatiza la necesidad de abordar y aliviar el malestar y los problemas de salud felinos.

El tramadol puede usarse para aliviar el dolor en gatos, aunque generalmente no es la primera opción que el veterinario recomienda.

El tramadol se utiliza tanto para el dolor agudo como para el crónico. En casos de dolor intenso y repentino, puede aliviar en 1 o 2 horas. Para dolencias crónicas, como la osteoartritis, se ha observado que sus efectos completos pueden tardar hasta dos semanas en manifestarse.

Curiosamente, estudios recientes indican que el tramadol ofrece un alivio del dolor cuestionable en perros. En gatos, en cambio, la respuesta suele ser más fuerte y su efecto analgésico más evidente.

Aunque los gatos reaccionan mejor al tramadol que los perros, existen otros medicamentos para el dolor que suelen preferirse. Por ejemplo, la buprenorfina actúa más rápido, mientras que el gabapentín aporta un efecto calmante y sedante más marcado.

Efectos secundarios del Tramadol para gatos

Un gato con dolor, lo que resalta la importancia de reconocer y abordar el malestar y los problemas de salud felinos.

Los efectos secundarios y las complicaciones del tramadol son variados y la dosis segura solo debe ser decidida por un veterinario.

Debido a que no se utiliza con tanta frecuencia en gatos, hay información más limitada disponible sobre el alcance de los efectos adversos del trimodal en los gatitos.

Los efectos secundarios más comúnmente reportados en gatos incluyen náuseas, vómitos, sedación, midriasis (pupilas dilatadas) y cambios en el comportamiento.

Los cambios de comportamiento varían de la euforia a la disforia. Los gatos eufóricos parecen abiertamente cariñosos y atentos o tienen una mayor cantidad de energía. Los gatos disfóricos pueden parecer confundidos, desequilibrados y más vocales de lo normal.

El tramadol también puede producir estreñimiento, por lo que es importante tener cuidado si tu gato ya tiene problemas con heces más firmes o duras.

A muchos gatos les pueden resultar desagradables las tabletas comerciales de tramadol, lo que puede provocar que escupan el medicamento, babeen en exceso y tengan un comportamiento de evitación en futuros intentos de administrar el medicamento.

Las sobredosis son poco frecuentes, pero se han notificado. Los signos de toxicidad asociados con el tramadol incluyen la aparición repentina de los efectos secundarios enumerados anteriormente. Estos efectos adversos también incluyen pupilas dilatadas, babeo excesivo, letargo, dificultad para mantener el equilibrio y la coordinación, frecuencia cardíaca elevada y vómitos.

Debido a que el tramadol tiene la capacidad de bloquear la recaptación del neurotransmisor serotonina, las dosis extremadamente altas pueden provocar un efecto llamado síndrome serotoninérgico, que ocurre cuando la serotonina se acumula demasiado en el cuerpo.

Existen varios signos asociados con el síndrome serotoninérgico que afectan a diferentes partes del cuerpo. Estos pueden incluir agitación e inquietud, vocalización excesiva, confusión, convulsiones, vómitos y diarrea, babeo excesivo, frecuencia cardíaca elevada, temperatura alta y respiración rápida.

Es poco probable que se produzca el síndrome serotoninérgico en gatos, salvo en casos de dosis más altas o si el tramadol se combina con otro medicamento que también impida la recaptación de serotonina. Esto se considera un efecto aditivo.

Si bien las recomendaciones de dosis pueden variar ampliamente en los gatos, estos efectos se han observado en gatos mayores en dosis superiores a 2 miligramos por kilogramo (aproximadamente 1 miligramo por libra).

Existen algunas interacciones farmacológicas que pueden ocurrir con el tramadol. Los medicamentos que pueden aumentar el riesgo de síndrome serotoninérgico si se administran junto con el tramadol incluyen (entre otros):

La eficacia del tramadol puede disminuir en gatos que toman el estimulante del apetito ciproheptadina.

Como los gatos no pueden metabolizar el acetaminofeno y éste provoca efectos tóxicos, el medicamento combinado Ultracet, que combina tramadol y acetaminofeno, nunca debe utilizarse en gatos.

Si notas que tu gato presenta algún efecto secundario mientras usa tramadol o sospechas una sobredosis, contacta de inmediato a tu veterinario, el Centro de Control de Envenenamiento de Animales de la ASPCA (1-888-426-4435) o la Línea de Ayuda para Envenenamiento de Mascotas (1-855-764-7661) de inmediato para obtener más asesoramiento.

Leer también: Envenenamiento en gatos: causas, síntomas y tratamiento

Dosis de Tramadol para gatos

Medicación para el dolor en gatos, haciendo hincapié en el uso de productos farmacéuticos para aliviar el malestar felino y promover su bienestar.

La dosis exacta de tramadol para gatos debe ser siempre establecida por un veterinario.

La dosis de tramadol para gatos puede variar mucho y solo debe administrarse bajo indicación de un veterinario autorizado.

La mayoría de los gatos no debería recibir más de una cuarta parte de una tableta comercial de 50 mg, es decir, alrededor de 12.5 mg. Algunos estudios en gatos muestran que los signos de sobredosis pueden aparecer con tan solo 2 mg por kilogramo de peso (1 mg por libra).

Para ponerlo en perspectiva, si un gato promedio de 10 a 12 libras recibiera una tableta completa de 50 mg, estaría recibiendo 2.5 veces más que lo que muchos consideran un límite seguro.

Esto refuerza la importancia de no darle a tu gato medicamentos humanos que tengas en casa sin consultar primero con un veterinario. Aunque quieras aliviar su dolor, podrías causarle más daño que beneficio sin la orientación adecuada.

Para asegurar una dosis precisa y segura, el veterinario puede recurrir a una farmacia de formulación magistral para preparar el medicamento en la concentración adecuada.

Leer también: 12 señales de advertencia de que tu gato tiene dolor y pide ayuda

Conclusión

Agresión inducida por dolor en gatos

Si bien el tramadol se usa comúnmente para tratar el dolor agudo y crónico en humanos, es una opción menos popular para tratar el dolor en gatos.

El tramadol es un analgésico opioide que puede usarse en gatos, aunque no suele ser la primera opción. Esto se debe a que resulta difícil de administrar por su sabor y porque su margen de seguridad es más estrecho. Además, tarda más en hacer efecto en el dolor crónico que otros medicamentos. Aunque es común en humanos, nunca debes darle tramadol a tu gato en casa sin antes consultar con un veterinario autorizado.

Leer también: ¿Los gatos sienten dolor cuando están en celo?

Aviso sobre dosis de medicamentos: Solo podemos ofrecer dosis para medicamentos aprobados por la FDA para uso en gatos y siempre siguiendo las indicaciones del etiquetado. En el caso de medicamentos usados fuera de etiqueta, solo brindamos pautas e información sobre seguridad. La dosis segura y adecuada en estos casos solo puede determinarla un veterinario de confianza.

Te recomendamos trabajar junto a tu veterinario para evaluar si un medicamento es adecuado para tu gato. Cambiar o ajustar la dosis por tu cuenta sin consultarlo puede representar un riesgo. No promovemos el uso de medicamentos para humanos en mascotas sin la supervisión previa de un veterinario.

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Dr. Chris Vanderhoof, DVM, MPH

El Dr. Chris Vanderhoof se graduó en 2013 de la Facultad de Medicina Veterinaria de Virginia-Maryland (VMCVM) en Virginia Tech, donde también obtuvo una Maestría en Salud Pública. Completó una pasantía rotativa en el Hospital Veterinario Red Bank en Nueva Jersey y ahora trabaja como médico general en el área de Washington DC. El Dr. Vanderhoof también es redactor especializado en el campo de la salud animal y fundador de Paramount Animal Health Writing Solutions, que se puede encontrar en www.animalhealthcopywriter.com. El Dr. Vanderhoof vive en el área del norte de Virginia con su familia, incluidos 3 gatos.